Medio Oriente: negociaciones contrarreloj para salvar el proceso de paz
Redacción
BBC Mundo
En las últimas horas Estados Unidos intensificó sus gestiones en su mediación entre israelíes y palestinos para evitar que el presidente de la Autoridad Nacional Palestina (ANP), Mahmud Abbas, cumpla su amenaza y se retire de las negociaciones de paz con Israel si no se amplía la moratoria sobre la construcción de asentamientos judíos, que expira el domingo.
En su intervención este sábado frente a la Asamblea General de Naciones Unidas, Abbas aseguró que los palestinos están dispuestos a llegar a un acuerdo con Israel, aunque dijo que el gobierno de Tel Aviv debe elegir entre la paz y la continuación de los asentamientos.
Israelíes y palestinos reanudaron a principios de septiembre las conversaciones de paz tras un paréntesis de 20 meses.
Pero los palestinos dicen que no seguirán dialogando a menos que Israel extienda la moratoria sobre la construcción de asentamientos en Cisjordania.
El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, se ha negado hasta ahora a prolongar la moratoria que decretó en noviembre del pasado año, asegurando que la construcción de las colonias judías no es un impedimento para las negociaciones.
Esta misma semana, el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, urgió a Israel ante la ONU a ampliar la moratoria.
Posición difícil
Hasta ahora, el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, se ha negado a prolongar la moratoria.
Según explica desde Cisjordania el corresponsal de la BBC Jon Donnison, Mahmoud Abbas se encuentra en una posición difícil.
Washington está presionando al presidente de la ANP para que no se retire de las conversaciones de paz.
Pero si Abbas alcanza un compromiso con los israelíes que no suponga la paralización total de la construcción de asentamientos, reforzará su imagen de líder débil, asegura nuestro corresponsal.
Al mismo tiempo, si cumple su amenaza y abandona las negociaciones, se le culpará de haber hecho fracasar el proceso de paz.
A ello hay que añadir, explica Donnison, el hecho de que Abbas está negociando sobre unos territorios de los que no tiene el control total, ya que Gaza, donde vive un 40% de los palestinos, está gobernado por Hamas, que se niega a participar en el proceso de paz patrocinado por EE.UU.
El ministro de Defensa de Israel, Ehud Barak, le dijo a la BBC antes de abandonar Nueva York de regreso a su país, que este domingo mantendrá conversaciones con otros miembros del gabinete israelí para intentar convencerlos de la necesidad de alcanzar un compromiso antes de que la moratoria expire.
Pese a ello, Barak señaló que había un 50% de posibilidades de llegar a un acuerdo con los palestinos sobre los asentamientos, aunque aseguró que, en su opinión, es muy probable que las conversaciones de paz continúen.
"Problemas peligrosos"
Asentamientos
• Más de 430.000 colonos judíos viven en asentamientos de Cisjordania y Jerusalén Oriental, junto a 2,5 millones de palestinos.
• En los altos del Golán viven 20.000 colonos.
• Los asentamientos ocupan el 40% del área de Cisjordania.
• En ese territorio palestino hay unos 100 asentamientos no autorizados por el gobierno de Israel.
En su intervención este sábado frente a la Asamblea General de Naciones Unidas, Mahmoud Abbas dijo que los palestinos harán todo lo posible por llegar a un acuerdo de paz con Israel en un año.
Pero también enumeró los agravios cometidos por los israelíes, como el bloqueo de la Franja de Gaza y el encarcelamiento de miles de palestinos.
El presidente de la ANP aseguró que su pueblo enfrenta "problemas peligrosos que les empujan hacia la esquina de la violencia y el conflicto".
"Este es el resultado de la mentalidad de la expansión y la dominación, que todavía controla la ideología y las políticas de Israel, la potencia ocupante", aseguró.
Sin embargo, agregó: "Nuestras manos heridas todavía son capaces de llevar a la rama de olivo de los escombros de los árboles que la ocupación genera todos los días".
Cerca de medio millón de judíos viven en los asentamientos construidos en Cisjordania y Jerusalén Oriental tras la ocupación israelí de 1967.
Estos asentamientos son considerados ilegales bajo la ley internacional.
BBC Mundo
En las últimas horas Estados Unidos intensificó sus gestiones en su mediación entre israelíes y palestinos para evitar que el presidente de la Autoridad Nacional Palestina (ANP), Mahmud Abbas, cumpla su amenaza y se retire de las negociaciones de paz con Israel si no se amplía la moratoria sobre la construcción de asentamientos judíos, que expira el domingo.
En su intervención este sábado frente a la Asamblea General de Naciones Unidas, Abbas aseguró que los palestinos están dispuestos a llegar a un acuerdo con Israel, aunque dijo que el gobierno de Tel Aviv debe elegir entre la paz y la continuación de los asentamientos.
Israelíes y palestinos reanudaron a principios de septiembre las conversaciones de paz tras un paréntesis de 20 meses.
Pero los palestinos dicen que no seguirán dialogando a menos que Israel extienda la moratoria sobre la construcción de asentamientos en Cisjordania.
El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, se ha negado hasta ahora a prolongar la moratoria que decretó en noviembre del pasado año, asegurando que la construcción de las colonias judías no es un impedimento para las negociaciones.
Esta misma semana, el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, urgió a Israel ante la ONU a ampliar la moratoria.
Posición difícil
Hasta ahora, el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, se ha negado a prolongar la moratoria.
Según explica desde Cisjordania el corresponsal de la BBC Jon Donnison, Mahmoud Abbas se encuentra en una posición difícil.
Washington está presionando al presidente de la ANP para que no se retire de las conversaciones de paz.
Pero si Abbas alcanza un compromiso con los israelíes que no suponga la paralización total de la construcción de asentamientos, reforzará su imagen de líder débil, asegura nuestro corresponsal.
Al mismo tiempo, si cumple su amenaza y abandona las negociaciones, se le culpará de haber hecho fracasar el proceso de paz.
A ello hay que añadir, explica Donnison, el hecho de que Abbas está negociando sobre unos territorios de los que no tiene el control total, ya que Gaza, donde vive un 40% de los palestinos, está gobernado por Hamas, que se niega a participar en el proceso de paz patrocinado por EE.UU.
El ministro de Defensa de Israel, Ehud Barak, le dijo a la BBC antes de abandonar Nueva York de regreso a su país, que este domingo mantendrá conversaciones con otros miembros del gabinete israelí para intentar convencerlos de la necesidad de alcanzar un compromiso antes de que la moratoria expire.
Pese a ello, Barak señaló que había un 50% de posibilidades de llegar a un acuerdo con los palestinos sobre los asentamientos, aunque aseguró que, en su opinión, es muy probable que las conversaciones de paz continúen.
"Problemas peligrosos"
Asentamientos
• Más de 430.000 colonos judíos viven en asentamientos de Cisjordania y Jerusalén Oriental, junto a 2,5 millones de palestinos.
• En los altos del Golán viven 20.000 colonos.
• Los asentamientos ocupan el 40% del área de Cisjordania.
• En ese territorio palestino hay unos 100 asentamientos no autorizados por el gobierno de Israel.
En su intervención este sábado frente a la Asamblea General de Naciones Unidas, Mahmoud Abbas dijo que los palestinos harán todo lo posible por llegar a un acuerdo de paz con Israel en un año.
Pero también enumeró los agravios cometidos por los israelíes, como el bloqueo de la Franja de Gaza y el encarcelamiento de miles de palestinos.
El presidente de la ANP aseguró que su pueblo enfrenta "problemas peligrosos que les empujan hacia la esquina de la violencia y el conflicto".
"Este es el resultado de la mentalidad de la expansión y la dominación, que todavía controla la ideología y las políticas de Israel, la potencia ocupante", aseguró.
Sin embargo, agregó: "Nuestras manos heridas todavía son capaces de llevar a la rama de olivo de los escombros de los árboles que la ocupación genera todos los días".
Cerca de medio millón de judíos viven en los asentamientos construidos en Cisjordania y Jerusalén Oriental tras la ocupación israelí de 1967.
Estos asentamientos son considerados ilegales bajo la ley internacional.