Marca tensión religiosa aniversario del 11 de septiembre
Washington, Agencias
Las tensiones religiosas están opacando el aniversario de los ataques del 11 de septiembre contra Estados Unidos, donde el presidente Barack Obama instó a un orador cristiano a abandonar un plan para quemar copias del Corán.
Un día antes del noveno aniversario del sábado, un reporte advirtió que Estados Unidos enfrentaba una creciente amenaza de grupos de insurgentes domésticos y de una 'americanización' de los líderes de Al Qaeda.
El viernes, Obama llamó a los estadounidenses a respetar el 'inalienable' derecho de libertad religiosa y dijo que esperaba que el orador abandonase su plan de quemar el libro sagrado del Islam, diciendo que podría dañar profundamente la imagen de Estados Unidos en el extranjero.
Las noticias del plan enfadaron a los musulmanes del mundo y provocaron violentas protestas en Afganistán, en la que un manifestante murió víctima de un disparo.
'Esta es una forma de poner en peligro a nuestras tropas, a nuestros hijos e hijas (...) No juegue con eso', dijo Obama en una conferencia de prensa en Washington en la que incluyó un llamado a la tolerancia religiosa.
El pastor Terry Jones, del desconocido Dove World Outreach Center en Gainesville, Florida, ha cesado sus amenazas de quemar el Corán en el aniversario de los ataques del 11 de septiembre en los que murieron casi 3.000 personas.
Jones llegó en la tarde del viernes a Nueva York, donde tiene previsto presentarse en el programa 'Today' de NBC en la mañana del sábado.
El dijo que suspendería la quema del Corán si se pudiese reunir con los líderes musulmanes que buscan construir un centro islámico y una mezquita cerca del lugar de Manhattan de los ataques del 11 de septiembre, con el objetivo de que sean reubicados.
Si bien el orador fundamentalista mantuvo a la gente dudando sobre sus reales intenciones, un evangelista que actuó como portavoz, K.A. Paul, dijo que el podía 'garantizar' que Jones no seguiría adelante con el acto previsto.
Refiriéndose al 'individuo en Florida', Obama destacó que el plan del pastor para quemar el Corán ya había provocado manifestaciones contra Estados Unidos en Afganistán, donde las tropas de Estados Unidos libran una agotadora batalla contra milicianos musulmanes talibanes.
Miles de personas salieron a las calles en Afganistán el viernes, algunas amenazando con atacar bases de Estados Unidos. Un manifestante murió y varios resultaron heridos fuera de la base de la OTAN dirigida por Alemania en el noreste de Afganistán. Las manifestaciones posteriormente se extendieron hasta la capital, Kabul, y al menos otras cuatro provincias.
OPOSICION AL CENTRO
Quienes se oponen al plan de construcción del centro en Nueva York dicen que es insensible con las familias de la víctimas en los eventos incluidos en el proyecto, dijo Feisal Abdul Rauf, el viernes y agregó que no tenía una reunión prevista con el pastor de Florida.
El comisario el-Gamal, desarrollador del proyecto del centro, negó que éste fuese a ser trasladado.
Obama dijo en la conferencia de prensa que reconocía 'las sensibilidades extraordinarias' que rodean a los ataque del 11 de septiembre.
Pero agregó que dijo que sería posible levantar una mezquita cerca de la llamada Zona Cero, o un edificio que represente a cualquier tipo de religión.
'Este país se destaca por la propuesta de que todos los hombres y mujeres son creados iguales, de que ellos tienen ciertos derechos inalienables. Uno de esos derechos inalienables es el practicar libremente su religión', dijo Obama.
'No estamos en guerra contra el Islam, estamos en guerra contra las organizaciones terroristas que han distorsionado al Islam y han hecho un falso uso del Islam', agregó.
Los ex directores de la comisión de 9/11 que estudió lo ataques del 2001 presentaron un reporte de 43 páginas que dijeron es un llamado de atención sobre la radicalización de los musulmanes en Estados Unidos y la cambiante estrategia de Al Qaeda y sus aliados.
'La amenaza que Estados Unidos enfrenta es diferente a la de hace nueve años', dijo el reporte, entregado por el Bipartisan Policy Center con sede en Washington.
'Estados Unidos es ahora un poco diferente a Europa en términos de que tiene un problema de terrorismo nacional que involucra a inmigrantes y musulmanes locales, así como convertidos', agregó.
Funcionarios estadounidenses han advertido que los casos como el de la amenaza de quema del Corán podrían aumentar el reclutamiento para los talibanes y Al Qaeda.
Las tensiones religiosas están opacando el aniversario de los ataques del 11 de septiembre contra Estados Unidos, donde el presidente Barack Obama instó a un orador cristiano a abandonar un plan para quemar copias del Corán.
Un día antes del noveno aniversario del sábado, un reporte advirtió que Estados Unidos enfrentaba una creciente amenaza de grupos de insurgentes domésticos y de una 'americanización' de los líderes de Al Qaeda.
El viernes, Obama llamó a los estadounidenses a respetar el 'inalienable' derecho de libertad religiosa y dijo que esperaba que el orador abandonase su plan de quemar el libro sagrado del Islam, diciendo que podría dañar profundamente la imagen de Estados Unidos en el extranjero.
Las noticias del plan enfadaron a los musulmanes del mundo y provocaron violentas protestas en Afganistán, en la que un manifestante murió víctima de un disparo.
'Esta es una forma de poner en peligro a nuestras tropas, a nuestros hijos e hijas (...) No juegue con eso', dijo Obama en una conferencia de prensa en Washington en la que incluyó un llamado a la tolerancia religiosa.
El pastor Terry Jones, del desconocido Dove World Outreach Center en Gainesville, Florida, ha cesado sus amenazas de quemar el Corán en el aniversario de los ataques del 11 de septiembre en los que murieron casi 3.000 personas.
Jones llegó en la tarde del viernes a Nueva York, donde tiene previsto presentarse en el programa 'Today' de NBC en la mañana del sábado.
El dijo que suspendería la quema del Corán si se pudiese reunir con los líderes musulmanes que buscan construir un centro islámico y una mezquita cerca del lugar de Manhattan de los ataques del 11 de septiembre, con el objetivo de que sean reubicados.
Si bien el orador fundamentalista mantuvo a la gente dudando sobre sus reales intenciones, un evangelista que actuó como portavoz, K.A. Paul, dijo que el podía 'garantizar' que Jones no seguiría adelante con el acto previsto.
Refiriéndose al 'individuo en Florida', Obama destacó que el plan del pastor para quemar el Corán ya había provocado manifestaciones contra Estados Unidos en Afganistán, donde las tropas de Estados Unidos libran una agotadora batalla contra milicianos musulmanes talibanes.
Miles de personas salieron a las calles en Afganistán el viernes, algunas amenazando con atacar bases de Estados Unidos. Un manifestante murió y varios resultaron heridos fuera de la base de la OTAN dirigida por Alemania en el noreste de Afganistán. Las manifestaciones posteriormente se extendieron hasta la capital, Kabul, y al menos otras cuatro provincias.
OPOSICION AL CENTRO
Quienes se oponen al plan de construcción del centro en Nueva York dicen que es insensible con las familias de la víctimas en los eventos incluidos en el proyecto, dijo Feisal Abdul Rauf, el viernes y agregó que no tenía una reunión prevista con el pastor de Florida.
El comisario el-Gamal, desarrollador del proyecto del centro, negó que éste fuese a ser trasladado.
Obama dijo en la conferencia de prensa que reconocía 'las sensibilidades extraordinarias' que rodean a los ataque del 11 de septiembre.
Pero agregó que dijo que sería posible levantar una mezquita cerca de la llamada Zona Cero, o un edificio que represente a cualquier tipo de religión.
'Este país se destaca por la propuesta de que todos los hombres y mujeres son creados iguales, de que ellos tienen ciertos derechos inalienables. Uno de esos derechos inalienables es el practicar libremente su religión', dijo Obama.
'No estamos en guerra contra el Islam, estamos en guerra contra las organizaciones terroristas que han distorsionado al Islam y han hecho un falso uso del Islam', agregó.
Los ex directores de la comisión de 9/11 que estudió lo ataques del 2001 presentaron un reporte de 43 páginas que dijeron es un llamado de atención sobre la radicalización de los musulmanes en Estados Unidos y la cambiante estrategia de Al Qaeda y sus aliados.
'La amenaza que Estados Unidos enfrenta es diferente a la de hace nueve años', dijo el reporte, entregado por el Bipartisan Policy Center con sede en Washington.
'Estados Unidos es ahora un poco diferente a Europa en términos de que tiene un problema de terrorismo nacional que involucra a inmigrantes y musulmanes locales, así como convertidos', agregó.
Funcionarios estadounidenses han advertido que los casos como el de la amenaza de quema del Corán podrían aumentar el reclutamiento para los talibanes y Al Qaeda.