Juventus, con triplete de un Krasic enorme, venció a Cagliari


Roma, Agencias
En el estadio Olímpico de Turín, Juventus recibió a Cagliari y le ganó de manera contundente por 4 a 2, gracias a un triplete de Milos Krasic y al gol de Leonardo Bonucci. Para la visita marcó un doblete Alessandro Matri, quien primero empató momentáneamente y luego descontó, anotando el último tanto del partido.

Así, la Vieja Señora se trepó hasta la novena posición de la tabla, que ocupa con siete puntos junto a Cesena, mientras que los sardos, por su parte, se quedaron con seis unidades en onceava posición, que comparten con Sampdoria y Bologna.

En Turín se vio un enfrentamiento parejo, en el que el equilibrio fue roto por la grande performance de Krasic, por lejos la figura del match. En efecto, más allá del triplete, con dos goles prácticamente inventados de la nada por el serbio, el rubio volante de Juventus jugó con grande sacrificio en defensa, siempre se sumó en ataque y se puso realmente el equipo al hombro cuando Juventus más lo necesitó.

Ya al décimo minuto el ex jugador de CSKA Moscow selló el 1 a 0: en jugada de tiro de esquina, la defensa visitante despejó algo corto y Krasic conectó de derecha, enviando el balón al ángulo bajo, acariciando el palo a la derecha del arquero.

A pesar de la tempranera ventaja, los bianconeri no lograron tomar un pleno dominio del match y, al revés, les dejaron demasiado espacio de maniobra a los azul y rojo. Así, en poco tiempo, los hombres de Bisoli pudieron igualar el marcador, aprovechando un grave error defensivo de los locales: Lazzari recibió un pelotazo largo sobre la izquierda y dispuso de tiempo y espacio para controlar, encarar y meter el centro por atrás de la defensa, ahí adonde se metió solito Matri para tocarla adentro y salir a gritar el gol.

El empate equilibró aún más el match, porque Cagliari se encerró atrás y les dejó la incumbencia de la creación del juego a los escasamente inspirados jugadores de la Juve. Los locales fatigaban para encontrar el espacio justo, pero otra vez Krasic arregló la situación, esta vez también con la colaboración de los errores de ambos los marcadores de punta: Perico se dejó soplar el balón por Amaurí, quien apoyó hacia atrás para que Pepe pusiera el centro hacia el segundo palo, y ahí Agostini se quedó dormido y se dejó anticipar por el serbio, quien con un toque sutil de derecha la mandó a guardar.

En el complemento, las cosas se pusieron rápidamente de la mejor manera para los locales, puesto que en jugada de tiro de esquina, muy confusa por cierto, Bonucci logró empujarla adentro. Ese tanto le cortó definitivamente las piernas a la visita, que al minuto 25 sufrió el cuarto con otra gran jugada de Krasic, quien en el desarrollo de otro córner controló el balón al límite, metió un par de gambetas y sacó un tiro fuerte de puntín, que se desvió en Astori y se metió en el fondo de la red.

Cagliari salió a buscar una reacción de orgullo y pudo por lo menos anotar el segundo, siempre sobre el eje Lazzari-Matri: el primero puso el cuchillazo y el segundo la tocó adentro, cortando a las espaldas de la defensa hacia el primer palo.

Durante la semana Del Piero, bandera de Juventus, había declarado que el equipo en este momento depende de Krasic: el serbio demostró enseguida que así es y decidió él solo un encuentro en el que la Vieja Señora encontró varias dificultades para abrir la defensa rival. Por encima, así festejó de la mejor manera el nacimiento de su hija, Mila. ¡Felicitaciones!

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