Garzón: "No he recibido ni un céntimo más de lo estipulado"
Lidia Jiménez, El País
El juez Baltasar Garzón entró muy serio, a las 20.30, en una improvisada sala de prensa en el municipio onubense de Valverde del Camino. Quería aclarar que el auto del magistrado Manuel Marchena que ordena a la policía judicial investigar sus cuentas privadas no tiene "ninguna base legal", "se extralimita" y, además, "hace mucho daño" a él y a su familia. "Quiero comparecer ahora, aquí, para aclararlo todo", afirmó. Baltasar Garzón aseguró que no ha recibido "ni un céntimo de más de lo estipulado por la Universidad de Nueva York", en relación con la petición del Tribunal Supremo a la Guardia Civil para que investigue el origen de sus ingresos durante su estancia en esa institución. "No tengo nada que ocultar", añadió.
El juez se encontraba en Valverde del Camino (Huelva) porque iba a recoger el título de hijo adoptivo del municipio en el que ejerció la judicatura por primera vez. "Lo que iba a ser un día de regocijo, se ha convertido en un día de acusaciones infundadas". El magistrado, apartado de la Audiencia Nacional por el Consejo General del Poder Judicial, conoció justo antes del homenaje el auto del Tribunal Supremo (TS), firmado por Manuel Marchena, en el que pide a la Guardia Civil un informe "acerca del origen, persona, organismo o entidad pagadora de todos los ingresos percibidos por Garzón entre el 1 de marzo de 2005 y el 30 de julio de 2006 que no se correspondan con las cantidades abonadas en concepto de nómina por su condición de magistrado de la Audiencia Nacional".
Con traje oscuro y sin disimular en absoluto su incomodidad, Garzón entró al tema: "No he leído la resolución pero aquí en Valverde lo he sabido. Lo que quiero decir de forma contundente es que no hay nada que ocultar por mi parte. Hubiera sido más fácil si me lo hubieran pedido [las cuentas]. Sencillamente las hubiera aportado".
Garzón no daba crédito a las afirmaciones de Marchena y a la petición del informe: "Sólo espero que esto se haga lo más rápido posible. Va a quedar claro que no hay ninguna relación entre los hechos que investiga el Tribunal Supremo y las cuentas que hoy se trasluce que pudieran existir". Sobre la universidad de Nueva York, añadió: "Cualquiera que conozca las universidades norteamericanas sabe que el control es estrictamente rígido". Marchena, en cambio, habla de un posible "desconcierto contable" de la citada universidad.
El magistrado repitió en los 14 minutos que duró su intervención la misma frase: "No he recibido ni un solo céntimo más de lo que se acordó con la Universidad mucho antes de cualquier patrocinio". Sin embargo, Garzón no va a impugar la investigación. "Se va a demostrar que no es cierto que haya contradicciones en mi declaración", tal y como afirma el juez del Supremo.
Garzón insistió ante las preguntas de los periodistas: "No hay base legal alguna" [para la investigación general de sus cuentas e ingresos]. Sobre la matriculación de su hija en Nueva York a la que Marchena alude, Garzón dio explicaciones: "Fue un acuerdo con la Universidad, una cantidad en especie para la escolarización de mi hija. Al margen y anterior a cualquiera de esos patrocinios". "¿Cree usted que está sufriendo una persecución política?", se le preguntó: "No seré yo quien lo diga, yo creo en la justicia, pero el daño que se me está haciendo es constatable".
El juez Baltasar Garzón entró muy serio, a las 20.30, en una improvisada sala de prensa en el municipio onubense de Valverde del Camino. Quería aclarar que el auto del magistrado Manuel Marchena que ordena a la policía judicial investigar sus cuentas privadas no tiene "ninguna base legal", "se extralimita" y, además, "hace mucho daño" a él y a su familia. "Quiero comparecer ahora, aquí, para aclararlo todo", afirmó. Baltasar Garzón aseguró que no ha recibido "ni un céntimo de más de lo estipulado por la Universidad de Nueva York", en relación con la petición del Tribunal Supremo a la Guardia Civil para que investigue el origen de sus ingresos durante su estancia en esa institución. "No tengo nada que ocultar", añadió.
El juez se encontraba en Valverde del Camino (Huelva) porque iba a recoger el título de hijo adoptivo del municipio en el que ejerció la judicatura por primera vez. "Lo que iba a ser un día de regocijo, se ha convertido en un día de acusaciones infundadas". El magistrado, apartado de la Audiencia Nacional por el Consejo General del Poder Judicial, conoció justo antes del homenaje el auto del Tribunal Supremo (TS), firmado por Manuel Marchena, en el que pide a la Guardia Civil un informe "acerca del origen, persona, organismo o entidad pagadora de todos los ingresos percibidos por Garzón entre el 1 de marzo de 2005 y el 30 de julio de 2006 que no se correspondan con las cantidades abonadas en concepto de nómina por su condición de magistrado de la Audiencia Nacional".
Con traje oscuro y sin disimular en absoluto su incomodidad, Garzón entró al tema: "No he leído la resolución pero aquí en Valverde lo he sabido. Lo que quiero decir de forma contundente es que no hay nada que ocultar por mi parte. Hubiera sido más fácil si me lo hubieran pedido [las cuentas]. Sencillamente las hubiera aportado".
Garzón no daba crédito a las afirmaciones de Marchena y a la petición del informe: "Sólo espero que esto se haga lo más rápido posible. Va a quedar claro que no hay ninguna relación entre los hechos que investiga el Tribunal Supremo y las cuentas que hoy se trasluce que pudieran existir". Sobre la universidad de Nueva York, añadió: "Cualquiera que conozca las universidades norteamericanas sabe que el control es estrictamente rígido". Marchena, en cambio, habla de un posible "desconcierto contable" de la citada universidad.
El magistrado repitió en los 14 minutos que duró su intervención la misma frase: "No he recibido ni un solo céntimo más de lo que se acordó con la Universidad mucho antes de cualquier patrocinio". Sin embargo, Garzón no va a impugar la investigación. "Se va a demostrar que no es cierto que haya contradicciones en mi declaración", tal y como afirma el juez del Supremo.
Garzón insistió ante las preguntas de los periodistas: "No hay base legal alguna" [para la investigación general de sus cuentas e ingresos]. Sobre la matriculación de su hija en Nueva York a la que Marchena alude, Garzón dio explicaciones: "Fue un acuerdo con la Universidad, una cantidad en especie para la escolarización de mi hija. Al margen y anterior a cualquiera de esos patrocinios". "¿Cree usted que está sufriendo una persecución política?", se le preguntó: "No seré yo quien lo diga, yo creo en la justicia, pero el daño que se me está haciendo es constatable".