Bolivia: empresarios desalentados por medida de Evo Morales
La Paz, Agencias
La Confederación de Empresarios de Bolivia calificó como una señal "desalentadora" para las inversiones la decisión del presidente Evo Morales de revertir a favor del Estado acciones en una cementera que pertenecían a un empresario opositor.
"El sector empresarial ha recibido un mensaje muy desalentador por parte del presidente", dijo el jueves el líder de la mayor organización patronal, Daniel Sánchez.
Morales emitió un decreto en la víspera que dispone la "recuperación" de las acciones en la Fábrica Nacional de Cemento SA (FANCESA) a favor de gobernación de Chuquisaca, en el sur del país, controlada ahora por el gobernador oficialista Esteban Urquizo.
"No cabe duda que la decisión afectará a las futuras inversiones privadas nacionales y extranjeras", dijo Sánchez.
La propietaria de ese paquete de 33,3% de las acciones era la Sociedad Boliviana de Cemento (SOBOCE), del magnate cementero y político opositor Samuel Doria Medina, y de su socio el Grupo de Cementos Chihuahua, de México.
SOBOCE dijo en un comunicado el jueves que "defenderá su patrimonio y todos los derechos que la ley le ampara y garantiza, porque la arbitraria expropiación de su participación accionaria en FANCESA es un acto contra toda legalidad y una agresión contra normas constitucionales".
Dijo que la medida "incurre en abuso de poder" y "flagrante injusticia".
El decreto fija un plazo de 180 días para alcanzar un acuerdo sobre el valor de las acciones y la indemnización para SOBOCE. La compañía dijo que compró el paquete en 1999 en un equivalente a 25,7 millones de dólares.
El Ministro de Hacienda, Luis Arce, dijo en rueda de prensa el jueves que Doria Medina aprovechó su condición de ministro de Estado en 1999 para comprar las acciones al amparo de una ley de privatizaciones que aprobó el gobierno de entonces.
"Se está recuperando lo que fue del Estado, no hay abuso. Más bien hubo un tráfico de influencias" en aquel momento, acotó.
Los otros dueños de FANCESA son la alcaldía de Sucre, capital del departamento de Chuquisaca y controlada por el oficialismo, y una universidad estatal.
Doria Medina controla la industria del cemento en Bolivia. Fue candidato a la presidencia y en dos ocasiones fue derrotado por Evo Morales. Su partido Unidad Nacional (UN) llegó a ser la tercera fuerza política y tiene una presencia reducida en la Asamblea Legislativa dominada por el oficialismo.
La Confederación de Empresarios de Bolivia calificó como una señal "desalentadora" para las inversiones la decisión del presidente Evo Morales de revertir a favor del Estado acciones en una cementera que pertenecían a un empresario opositor.
"El sector empresarial ha recibido un mensaje muy desalentador por parte del presidente", dijo el jueves el líder de la mayor organización patronal, Daniel Sánchez.
Morales emitió un decreto en la víspera que dispone la "recuperación" de las acciones en la Fábrica Nacional de Cemento SA (FANCESA) a favor de gobernación de Chuquisaca, en el sur del país, controlada ahora por el gobernador oficialista Esteban Urquizo.
"No cabe duda que la decisión afectará a las futuras inversiones privadas nacionales y extranjeras", dijo Sánchez.
La propietaria de ese paquete de 33,3% de las acciones era la Sociedad Boliviana de Cemento (SOBOCE), del magnate cementero y político opositor Samuel Doria Medina, y de su socio el Grupo de Cementos Chihuahua, de México.
SOBOCE dijo en un comunicado el jueves que "defenderá su patrimonio y todos los derechos que la ley le ampara y garantiza, porque la arbitraria expropiación de su participación accionaria en FANCESA es un acto contra toda legalidad y una agresión contra normas constitucionales".
Dijo que la medida "incurre en abuso de poder" y "flagrante injusticia".
El decreto fija un plazo de 180 días para alcanzar un acuerdo sobre el valor de las acciones y la indemnización para SOBOCE. La compañía dijo que compró el paquete en 1999 en un equivalente a 25,7 millones de dólares.
El Ministro de Hacienda, Luis Arce, dijo en rueda de prensa el jueves que Doria Medina aprovechó su condición de ministro de Estado en 1999 para comprar las acciones al amparo de una ley de privatizaciones que aprobó el gobierno de entonces.
"Se está recuperando lo que fue del Estado, no hay abuso. Más bien hubo un tráfico de influencias" en aquel momento, acotó.
Los otros dueños de FANCESA son la alcaldía de Sucre, capital del departamento de Chuquisaca y controlada por el oficialismo, y una universidad estatal.
Doria Medina controla la industria del cemento en Bolivia. Fue candidato a la presidencia y en dos ocasiones fue derrotado por Evo Morales. Su partido Unidad Nacional (UN) llegó a ser la tercera fuerza política y tiene una presencia reducida en la Asamblea Legislativa dominada por el oficialismo.