Santos cierra puertas del diálogo con guerrilla
Hernando Salazar, Bogotá
Santos reiteró que la orden a las fuerzas militares es "arreciar" contra todos los grupos al margen de la ley.
Un día después de la explosión de un carro bomba en Bogotá, que dejó 90 lesionados, el presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, le envió un mensaje a la guerrilla y dijo que la puerta del diálogo está cerrada, mientras no haya demostraciones de paz, pero se cuidó de atribuirle la autoría del atentado.
"La llave del diálogo no la hemos botado al mar, pero la puerta está cerrada y se mantendrá cerrada hasta que quienes quieran dialogar de paz no demuestren en forma clara y fehaciente su verdadera voluntad", expresó Santos.
Durante una ceremonia militar en Popayán, en el sur del país, el presidente colombiano, que seis días antes había dicho que las puertas del diálogo no estaban cerradas con llave, exigió "una demostración muy clara de unas verdaderas intenciones de dialogar para buscar la paz".
Y pidió "hechos concretos como los que hemos mencionado: que liberen los secuestrados, que dejen el terrorismo, que liberen a los niños que han reclutado a la fuerza, que dejen la extorsión, que dejen de actuar como terroristas".
Al mismo tiempo, el nuevo presidente, que asumió el pasado 7 de agosto, reiteró que la orden a las fuerzas militares es “arreciar, arreciar y arreciar" contra todos los grupos al margen de la ley.
¿Guerrilla culpable?
Analistas consultados por BBC Mundo consideran que el mensaje de Santos estaba dirigido a las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), la guerrilla nacida en 1964, que actualmente tiene unos 8.000 hombres y mujeres en armas, y que recientemente le propuso conversar de paz.
En la misma ceremonia, sin embargo, Santos se cuidó de no culpar a la guerrilla del carro bomba que explotó frente a un edificio donde funciona la más importante cadena radial de Colombia y la sede latinoamericana de la agencia española EFE, en el norte de Bogotá.
"No sabemos todavía –y hay que decir la verdad- no sabemos todavía quiénes fueron los responsables ni contra quién (iba dirigido el atentado). Pero sabemos, sí, que cualquier acto terrorista busca una consecuencia. Y por fortuna esa consecuencia fue totalmente contraproducente, porque Colombia está unida, firme, en contra de cualquier acto terrorista", dijo Santos.
Armando Borrero, ex consejero de Seguridad Nacional, declaró a BBC Mundo que él no cree que "tenga sentido que el atentado haya sido obra de la guerrilla, en momentos en que está buscando acercamientos con el gobierno".
"A mí me suena más que es un acto de la derecha extremista que considera que Santos 'traicionó' a Álvaro Uribe por acercarse a Hugo Chávez", señala Borrero.
Pero otro experto, Alfredo Rangel, sospecha de la guerrilla y así se lo dice a BBC Mundo.
"Me cuesta mucho trabajo pensar en un actor distinto de las FARC. Esa es la lógica de la guerrilla, que no es extraño respaldar sus ofertas de paz con acciones violentas, como lo ha hecho en otras ocasiones", opina Rangel, director de la Fundación Seguridad y Democracia.
La única evolución que ha tenido el ataque del jueves es la entrega a las autoridades de un hombre que dice haber falsificado las placas del vehículo que fue utilizado donde explotó la bomba.
Alfredo Rangel, analista
"Me cuesta mucho trabajo pensar en un actor distinto de las FARC. Esa es la lógica de la guerrilla, que no es extraño respaldar sus ofertas de paz con acciones violentas, como lo ha hecho en otras ocasiones".
Santos reiteró que la orden a las fuerzas militares es "arreciar" contra todos los grupos al margen de la ley.
Un día después de la explosión de un carro bomba en Bogotá, que dejó 90 lesionados, el presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, le envió un mensaje a la guerrilla y dijo que la puerta del diálogo está cerrada, mientras no haya demostraciones de paz, pero se cuidó de atribuirle la autoría del atentado.
"La llave del diálogo no la hemos botado al mar, pero la puerta está cerrada y se mantendrá cerrada hasta que quienes quieran dialogar de paz no demuestren en forma clara y fehaciente su verdadera voluntad", expresó Santos.
Durante una ceremonia militar en Popayán, en el sur del país, el presidente colombiano, que seis días antes había dicho que las puertas del diálogo no estaban cerradas con llave, exigió "una demostración muy clara de unas verdaderas intenciones de dialogar para buscar la paz".
Y pidió "hechos concretos como los que hemos mencionado: que liberen los secuestrados, que dejen el terrorismo, que liberen a los niños que han reclutado a la fuerza, que dejen la extorsión, que dejen de actuar como terroristas".
Al mismo tiempo, el nuevo presidente, que asumió el pasado 7 de agosto, reiteró que la orden a las fuerzas militares es “arreciar, arreciar y arreciar" contra todos los grupos al margen de la ley.
¿Guerrilla culpable?
Analistas consultados por BBC Mundo consideran que el mensaje de Santos estaba dirigido a las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), la guerrilla nacida en 1964, que actualmente tiene unos 8.000 hombres y mujeres en armas, y que recientemente le propuso conversar de paz.
En la misma ceremonia, sin embargo, Santos se cuidó de no culpar a la guerrilla del carro bomba que explotó frente a un edificio donde funciona la más importante cadena radial de Colombia y la sede latinoamericana de la agencia española EFE, en el norte de Bogotá.
"No sabemos todavía –y hay que decir la verdad- no sabemos todavía quiénes fueron los responsables ni contra quién (iba dirigido el atentado). Pero sabemos, sí, que cualquier acto terrorista busca una consecuencia. Y por fortuna esa consecuencia fue totalmente contraproducente, porque Colombia está unida, firme, en contra de cualquier acto terrorista", dijo Santos.
Armando Borrero, ex consejero de Seguridad Nacional, declaró a BBC Mundo que él no cree que "tenga sentido que el atentado haya sido obra de la guerrilla, en momentos en que está buscando acercamientos con el gobierno".
"A mí me suena más que es un acto de la derecha extremista que considera que Santos 'traicionó' a Álvaro Uribe por acercarse a Hugo Chávez", señala Borrero.
Pero otro experto, Alfredo Rangel, sospecha de la guerrilla y así se lo dice a BBC Mundo.
"Me cuesta mucho trabajo pensar en un actor distinto de las FARC. Esa es la lógica de la guerrilla, que no es extraño respaldar sus ofertas de paz con acciones violentas, como lo ha hecho en otras ocasiones", opina Rangel, director de la Fundación Seguridad y Democracia.
La única evolución que ha tenido el ataque del jueves es la entrega a las autoridades de un hombre que dice haber falsificado las placas del vehículo que fue utilizado donde explotó la bomba.
Alfredo Rangel, analista
"Me cuesta mucho trabajo pensar en un actor distinto de las FARC. Esa es la lógica de la guerrilla, que no es extraño respaldar sus ofertas de paz con acciones violentas, como lo ha hecho en otras ocasiones".