Morales llama a la integración y da por concluida la confrontación en Bolivia

Santa Cruz de la Sierra, Abi
El presidente Evo Morales hizo un ferviente llamado a la integración de Bolivia, al conmemorar el viernes el 185 aniversario de la independencia nacional, en una inédita sesión de la bicameral Asamblea Legislativa Plurinacional en la ciudad oriental de Santa Cruz.

"Siento que se termina la confrontación y viene la integración", afirmó el mandatario en un encendido discurso en el salón Chiriguano de la Expocruz, emblema de la pujanza del departamento de Santa Cruz, pulmón, a su vez, de la economía boliviana.

El gobernador opositor de Santa Cruz, Rubén Costas, que en un discurso anterior había proclamado el retorno al régimen republicano superado por el Constitución vigente desde 2009, que consagra un modelo de Estado plurinacional con autonomías regionales, asistió a la solemne sesión legislativa en homenaje a la independencia nacional, la primera desde fundado el país en 1825.

Morales, que fue ovacionado repetidas veces por el foro parlamentario, dijo superado el tiempo del desencuentro que mediatizó un tramo de su primer mandato entre 2006 y 2008.

"Después de la pelea viene cariño, después del macanaku (llega) el mamaanaku, ésa es nuestra tarea", ilustró con vocablos en lengua quechua para representar los tiempos de paz emergente en Bolivia.

Morales llamó a gobernadores, alcaldes y movimientos sociales a trabajar de forma conjunta con la Presidencia para gatillar el desarrollo integral del país, y "acelerar ese proceso de transformaciones en lo estructural".

El jefe de Estado pidió a la oposición a su gobierno progresista y a quienes no comparten su política deponer posturas beligerantes y "dejar de mirarnos mal entre nosotros, porque estamos en tiempos de integración de nuestros pueblos".

Inscribió su arenga en el milenio "de los pueblos" del mundo "a partir de los movimientos sociales".

El jefe de Estado volvió a pedir prelación para instaurar en el país, uno de los con mayor inequidad en la región, "igualdad con unidad", pese a proclamar la reducción de la pobreza extrema, en 10% en la nación andina amazónica.

En coincidencia con el abogado socialista y ex candidato a la gobernación de Santa Cruz, Jerjes Justiniano, planteó su convicción de que esta región oriental boliviana se ha convertido en el crisol del nuevo Estado plurinacional.

Santa Cruz es el "departamento de mayor integración de bolivianos, Quién no tiene un familiar que vive en Santa Cruz", citó de ejemplo.

Morales agradeció la hospitalidad de Costas y del alcalde de la ciudad de Santa Cruz, Percy Fernández, también opositor, por acoger la principal celebración por la fiesta patria.

El gobernante, que señaló tres debilidades, asignaturas pendientes, de su administración, el narcotráfico, el contrabando y la inversión pública, pese al portentoso presupuesto asignado para esa partida en la política fiscal para 2010, convocó fervientemente a los empresarios criollos a sumarse, con sus capitales al mega proyecto de industrialización de los recursos naturales en Bolivia, política insignia de su gobierno de izquierdas.

"Bolivia tiene mucha esperanza, mucho futuro, sólo necesitamos socios internos", afirmó al tiempo de demandar el concurso del empresariado boliviano.

"Hasta cuándo voy a seguir buscando plata de la CAF (Corporación Andina de Fomento) del BID (Banco Interamericano de Desarrollo), de organismos internacionales, Brasil y Venezuela, si nosotros podemos financiar nuestros grandes proyectos", cuestionó en su alocución.

Pidió a Costas, a manera de ejemplo, aportar al proceso de industrialización desde la Gobernación, para internalizar el desarrollo boliviano.

"En vez que nuestros socios sean empresarios extranjeros, que nuestros socios sean empresarios para la exportación", sostuvo al celebrar el avance que cobró el proyecto de industrialización del hierro en el extremo este del país, donde se emplaza el mayor yacimiento de este mineral del planeta explotado, en el formato de riesgo compartido con el Estado, por la siderúrgica india Jindal.

El gobernante destacó por último el momento promisorio que atraviesa el país en la generalidad de sus rubros de actividad.

"Vamos bien, todos los bolivianos y bolivianas. Esta es la realidad que expreso con mucha honestidad", concluyó.

En el último lustro Bolivia multiplicó en 150% su Producto Interior Bruto, situado hoy en 18.000 millones de dólares.

En un registro sin precedentes, sus Reservas Internacionales Netas orillan los 8.600 millones de dólares, mientras su política fiscal navega en las aguas calmas del superávit desde 2006, lo que le ha permitido capear la crisis financiera internacional, que ahora golpea con fuerza a Europa.