García Linera: "Tarde o temprano la Wiphala flameará sobre la plaza 24 de septiembre"

La Paz, Abi
La Wiphala, que es el símbolo de todos los bolivianos desde tiempos inmemoriales, va a flamear "tarde o temprano en todo el país, entre ellos en la plaza 24 de septiembre", manifestó el martes el presidente en ejercicio de la nación, Alvaro García Linera.

En una conferencia de prensa en el Palacio de Gobierno, García Linera hizo esas apreciaciones al ser consultado sobre la resistencia de algunos sectores políticos en el departamento de Santa Cruz para que la Wiphala no sea colocada como símbolo en los actos de la efeméride patria a celebrarse el viernes 6 de agosto en la ciudad oriental.

"No se puede detener la historia, la Wiphala es el símbolo desde hace décadas y siglos de los pueblos aymaras, quechuas, guaraníes, sirionós y de todas las culturas de Bolivia, por lo que no puede ser omitida como símbolo nacional", dijo.

Agregó que la nueva Constitución Política del Estado consagra a la Wiphala como la bandera nacional, junto a la tricolor, por lo que debe ser respetada por todos los ciudadanos.

El Presidente en Ejercicio agregó que, además, la historia muestra que la Wiphala "representa la lucha de los pobres y discriminados de Bolivia a lo largo de 184 años y que ahora son los protagonistas del proceso de cambio y de profundas transformaciones".

García Linera se refirió de esa manera a las posiciones que han esgrimido algunos sectores políticos en el departamento de Santa Cruz que consideran que solamente debe flamear en los actos cívicos la bandera tricolor, rojo, amarillo y verde.

La Asamblea Legislativa Plurinacional sesionará en la ciudad de Santa Cruz de la Sierra el próximo seis de agosto, por lo que comisiones de las instituciones estatales coordinan con sus similares del Gobierno de Santa Cruz la preparación del evento.

A esos actos, donde el presidente Evo Morales Ayma, emitirá un mensaje a la nación, han sido invitados representantes de las misiones diplomáticas acreditadas en Bolivia, de las Gobernaciones de los nueve departamentos y de otras instituciones estatales para que tengan el máximo realce.

De acuerdo con las investigaciones, la Wiphala es el símbolo de las clases explotadas, oprimidas, humilladas y marginadas, por lo que es la representación de las mayorías nacionales.

Esos informes subrayan que para los pueblos aymara y quechua, la Wiphala "es la expresión del pensamiento filosófico andino y en su contenido manifiesta el desarrollo de la ciencia, la tecnología y el arte; además de la expresión dialéctica del Pacha-kama y Pacha-mama, como una organización y armonía de hermandad entre los pueblos".

Esas investigaciones también establecieron que la Wiphala no es solamente un símbolo de los pueblos de Bolivia, sino de Ecuador y Perú que comparten los andes de Sudamérica.

Las naciones aymara y quechua, guaraní y sirionó y otras consideran que la Wiphala debe ser usada en los actos ceremoniales, en las fiestas, en las marchas, en los juegos y competencias, en actos de conmemoración, en los encuentros de comunidades de ayllus y markas, y en los trabajos agrícolas y en todo acontecimiento del diario vivir del hombre andino.

Cada uno de los colores tiene una simbología. Por ejemplo el rojo representa al planeta tierra (aka-pacha), es la expresión del hombre andino, en el desarrollo intelectual, es la filosofía cósmica en el pensamiento y el conocimiento de los Amawtas, mientras que el naranja significa la sociedad y la cultura, la preservación y procreación de la especie humana.

El amarillo representa la energía y fuerza (ch'ama-pacha), es la expresión de los principios morales del hombre andino, es la doctrina del Pacha-kama y Pacha-mama: la dualidad (chacha-warmi) son las leyes y normas, la práctica colectivista de hermandad y solidaridad humana, mientras el blanco es el tiempo y a la dialéctica como la expresión del desarrollo y la transformación permanente.

El color verde de la Wiphala representa la economía y la producción andina, es el símbolo de las riquezas naturales, de la superficie y el subsuelo, la tierra y territorio, la producción agropecuaria, la flora y fauna, los yacimientos hidrológicos y mineralógicos; y el azul al espacio cósmico, al infinito y a los sistemas estelares del universo y los efectos naturales que se sienten sobre la tierra, es la astronomía y la física, la organización socio económica, político y cultural.

Finalmente el violeta representa a la política y la ideología andina, el poder comunitario y armónico de los Andes, el Instrumento del Estado, como una instancia superior, lo que es la estructura del poder; las organizaciones, sociales, económicas y culturales y la administración del pueblo y del país.