Caída de "La Barbie" es golpe al narcotráfico y un respiro para el Gobierno
México, Agencias
La detención en México del narcotraficante Edgar Valdez Villareal, alias "La Barbie", supone un nuevo golpe del Gobierno de Felipe Calderón a los cárteles de la droga y un respiro para las autoridades mexicanas en un momento en el que se ha recrudecido la violencia en el país.
Valdez, de 37 años, nacido en Laredo (Texas, EE.UU.) y conocido como "La Barbie" por su buen semblante, pelo rubio y ojos azules, fue presentado hoy a los medios, ante los que se mostró sonriente y silencioso, tras haber sido detenido el lunes en el central estado de México.
"La Barbie" era uno de los narcotraficantes más buscados por México y EE.UU., y la fiscalía mexicana ofrecía una recompensa de 30 millones de pesos (2,26 millones de dólares) por su cabeza.
El capo, que traficaba alrededor de una tonelada de cocaína al mes, recientemente cobró notoriedad más por la sanguinaria guerra que mantenía con sus antiguos socios del cártel de los Beltrán Leyva que por sus actividades del narcotráfico.
Esa guerra sembró de cuerpos mutilados y decapitados a los estados de Morelos y Guerrero, donde los del cártel del Pacífico, comandados por Valdez, se intercambiaban decenas de muertos y mensajes con los Beltrán Leyva, liderados por Hector Beltrán Leyva, "El H".
"La detención se convierte en un 'tanque de oxígeno' para el Gobierno de Felipe Calderón, sobre todo porque se produce la víspera del Cuarto Informe de Gobierno, cuando el desaliento por la ingobernabilidad y la ola criminal parecen imparables", afirmó hoy el analista Ricardo Alemán en el diario El Universal.
La caída de "La Barbie" se da en un momento en que la violencia del crimen organizado en México se ha recrudecido, especialmente en el estado de Tamaulipas (noreste), donde se enfrentan anárquicamente el cártel del Golfo y la organización narcotraficante Los Zetas, sus antiguos socios.
La matanza de 72 inmigrantes indocumentados de Honduras, El Salvador, Guatemala, Ecuador y Brasil la semana pasada; el homicidio del alcalde del municipio de Hidalgo; la explosión de dos coches cargados con explosivos de bajo poder, uno de ellos contra un canal de televisión; son solo algunos de los hechos violentos de los últimos días registrados en Tamaulipas.
Asimismo, la Policía Federal (PF) de México anunció ayer la expulsión de 3.200 de sus agentes como parte de un proceso de "revisión y depuración" de sus estructuras, lo que representa casi el 10 por ciento de la plantilla total de policías.
Además, el gobernante mexicano concluyó la semana pasada una larga ronda de diálogos con distintos sectores de la sociedad mexicana en los que quedó de manifiesto el descontento que hay en el país con la estrategia de seguridad del Ejecutivo y la incesante ola de violencia del crimen organizado.
Ese descontento se ha extendido incluso a las propias filas del mandatario desde donde han mostrado sus discrepancias con la política de seguridad personajes como el ex presidente Vicente Fox o el ex dirigente Manuel Espino.
El mandatario buscará en pocos días el apoyo del Congreso y de los gobernadores de México para crear 32 policías estatales que absorberán a los cientos de cuerpos municipales que hay en el país, y también para aprobar un ambicioso paquete legislativo para luchar contra el lavado de dinero.
"La detención de 'La Barbie' llega en el momento más necesitado y urgente para el Gobierno de Calderón, justo cuando Washington retiraba a hijos de diplomáticos acreditados en Monterrey y presidentes de América Central lo cuestionaban por su lucha antinarco y la violencia desbordaba en varias entidades", señaló Martín Moreno, columnista del diario Excélsior.
La captura de Valdez se suma a la muerte en combate, en los últimos ocho meses, de dos capos insignes: Ignacio "Nacho" Coronel del cártel de Sinaloa, y Arturo Beltrán Leyva, alias "El Barbas", máximo líder de la organización de los Hermanos Beltrán Leyva.
Las autoridades mexicanas todavía no han determinado si "La Barbie" será extraditado a EE.UU., y no es claro quién lo relevará al mando de su debilitada estructura criminal.
La detención en México del narcotraficante Edgar Valdez Villareal, alias "La Barbie", supone un nuevo golpe del Gobierno de Felipe Calderón a los cárteles de la droga y un respiro para las autoridades mexicanas en un momento en el que se ha recrudecido la violencia en el país.
Valdez, de 37 años, nacido en Laredo (Texas, EE.UU.) y conocido como "La Barbie" por su buen semblante, pelo rubio y ojos azules, fue presentado hoy a los medios, ante los que se mostró sonriente y silencioso, tras haber sido detenido el lunes en el central estado de México.
"La Barbie" era uno de los narcotraficantes más buscados por México y EE.UU., y la fiscalía mexicana ofrecía una recompensa de 30 millones de pesos (2,26 millones de dólares) por su cabeza.
El capo, que traficaba alrededor de una tonelada de cocaína al mes, recientemente cobró notoriedad más por la sanguinaria guerra que mantenía con sus antiguos socios del cártel de los Beltrán Leyva que por sus actividades del narcotráfico.
Esa guerra sembró de cuerpos mutilados y decapitados a los estados de Morelos y Guerrero, donde los del cártel del Pacífico, comandados por Valdez, se intercambiaban decenas de muertos y mensajes con los Beltrán Leyva, liderados por Hector Beltrán Leyva, "El H".
"La detención se convierte en un 'tanque de oxígeno' para el Gobierno de Felipe Calderón, sobre todo porque se produce la víspera del Cuarto Informe de Gobierno, cuando el desaliento por la ingobernabilidad y la ola criminal parecen imparables", afirmó hoy el analista Ricardo Alemán en el diario El Universal.
La caída de "La Barbie" se da en un momento en que la violencia del crimen organizado en México se ha recrudecido, especialmente en el estado de Tamaulipas (noreste), donde se enfrentan anárquicamente el cártel del Golfo y la organización narcotraficante Los Zetas, sus antiguos socios.
La matanza de 72 inmigrantes indocumentados de Honduras, El Salvador, Guatemala, Ecuador y Brasil la semana pasada; el homicidio del alcalde del municipio de Hidalgo; la explosión de dos coches cargados con explosivos de bajo poder, uno de ellos contra un canal de televisión; son solo algunos de los hechos violentos de los últimos días registrados en Tamaulipas.
Asimismo, la Policía Federal (PF) de México anunció ayer la expulsión de 3.200 de sus agentes como parte de un proceso de "revisión y depuración" de sus estructuras, lo que representa casi el 10 por ciento de la plantilla total de policías.
Además, el gobernante mexicano concluyó la semana pasada una larga ronda de diálogos con distintos sectores de la sociedad mexicana en los que quedó de manifiesto el descontento que hay en el país con la estrategia de seguridad del Ejecutivo y la incesante ola de violencia del crimen organizado.
Ese descontento se ha extendido incluso a las propias filas del mandatario desde donde han mostrado sus discrepancias con la política de seguridad personajes como el ex presidente Vicente Fox o el ex dirigente Manuel Espino.
El mandatario buscará en pocos días el apoyo del Congreso y de los gobernadores de México para crear 32 policías estatales que absorberán a los cientos de cuerpos municipales que hay en el país, y también para aprobar un ambicioso paquete legislativo para luchar contra el lavado de dinero.
"La detención de 'La Barbie' llega en el momento más necesitado y urgente para el Gobierno de Calderón, justo cuando Washington retiraba a hijos de diplomáticos acreditados en Monterrey y presidentes de América Central lo cuestionaban por su lucha antinarco y la violencia desbordaba en varias entidades", señaló Martín Moreno, columnista del diario Excélsior.
La captura de Valdez se suma a la muerte en combate, en los últimos ocho meses, de dos capos insignes: Ignacio "Nacho" Coronel del cártel de Sinaloa, y Arturo Beltrán Leyva, alias "El Barbas", máximo líder de la organización de los Hermanos Beltrán Leyva.
Las autoridades mexicanas todavía no han determinado si "La Barbie" será extraditado a EE.UU., y no es claro quién lo relevará al mando de su debilitada estructura criminal.