Borghi molesto con la aparición de Medel en barra chilena
Buenos Aires, Olé
Gary Medel se subió al paravalanchas y hasta tocó el bombo en la popular de Universidad Católica. Pasó el día libre en Chile y ahí, rodeado de barras, vio el segundo tiempo del partido que su ex equipo le ganó 2-0 a Santiago Morning. Imperdible. A Borghi no le gustó mucho y dijo: "Hablaremos para que no suceda más".
Llegó al Estadio Municipal de La Pintana, en el sur de Santiago, apenas un ratito antes de que Milovan Mirosevic pusiera, de penal, el 1-0 para la Universidad Católica frente a Santiago Morning. Junto con varios amigos, Gary Medel se acomodó en la platea. Era su día libre en Boca, después de la derrota frente a Racing, y el chileno decidió pasarlo en su tierra. Pero en el entretiempo, tras el 2-0 de su ex equipo, el Pitbull desapareció...
Y cuando comenzó el segundo tiempo, ahí estaba, en el medio de la popular que ocupaban hinchas y barras de la Católica. No es la primera vez que lo hace. En esta ocasión, hasta se puso una remera blanca, regalo de Los Cruzados, y le dio duro al bombo, con una sonrisa, mientras cantaba y saltaba. Hasta que, antes del final, se fue después de recibir una ovación de la gente. La historia rebotó, obviamente, en Argentina y en Claudio Borghi no pudo eludir el tema. "Es algo que tenemos que hablar para que no suceda más", dijo el Bichi en La Ultima Palabra.
Esta moda, en su momento, fue protagonizada por Fernando Cavenaghi en la popular de River, Lucho Figueroa en la tribuna de Central, Bazán Vera en la de Unión y se extendió a los futbolistas argentinos que juegan en Europa: Mauro Zárate apareció entre los ultras de la Lazio y hasta Diego Milito se metió en el centro de la cabecera que ocupaban los tifosi del Genoa. Son actitudes ligadas a lo folclórico que, al mismo tiempo, recorren un camino difuso.
Gary Medel se subió al paravalanchas y hasta tocó el bombo en la popular de Universidad Católica. Pasó el día libre en Chile y ahí, rodeado de barras, vio el segundo tiempo del partido que su ex equipo le ganó 2-0 a Santiago Morning. Imperdible. A Borghi no le gustó mucho y dijo: "Hablaremos para que no suceda más".
Llegó al Estadio Municipal de La Pintana, en el sur de Santiago, apenas un ratito antes de que Milovan Mirosevic pusiera, de penal, el 1-0 para la Universidad Católica frente a Santiago Morning. Junto con varios amigos, Gary Medel se acomodó en la platea. Era su día libre en Boca, después de la derrota frente a Racing, y el chileno decidió pasarlo en su tierra. Pero en el entretiempo, tras el 2-0 de su ex equipo, el Pitbull desapareció...
Y cuando comenzó el segundo tiempo, ahí estaba, en el medio de la popular que ocupaban hinchas y barras de la Católica. No es la primera vez que lo hace. En esta ocasión, hasta se puso una remera blanca, regalo de Los Cruzados, y le dio duro al bombo, con una sonrisa, mientras cantaba y saltaba. Hasta que, antes del final, se fue después de recibir una ovación de la gente. La historia rebotó, obviamente, en Argentina y en Claudio Borghi no pudo eludir el tema. "Es algo que tenemos que hablar para que no suceda más", dijo el Bichi en La Ultima Palabra.
Esta moda, en su momento, fue protagonizada por Fernando Cavenaghi en la popular de River, Lucho Figueroa en la tribuna de Central, Bazán Vera en la de Unión y se extendió a los futbolistas argentinos que juegan en Europa: Mauro Zárate apareció entre los ultras de la Lazio y hasta Diego Milito se metió en el centro de la cabecera que ocupaban los tifosi del Genoa. Son actitudes ligadas a lo folclórico que, al mismo tiempo, recorren un camino difuso.