Boca: define este martes el caso Riquelme
Buenos Aires, Agencias
La interna que explotó en la comisión directiva de Boca Juniors en torno al contrato de Juan Román Riquelme obligó a sus protagonistas a cuidar los pasos a seguir, al punto que era una incógnita sobre el momento en que el futbolista y la directiva firmarán el nuevo vínculo con cuatro años de extensión.
Los macristas que dominan la nueva oposición al menos en cuanto al contrato de Riquelme, tanto por su extensión como en los términos económicos, y que ya levantó la advertencia del tesorero Daniel Angelici de que renunciará en caso de que cristalice el acuerdo al que llegaron el jugador y el presidente Jorge Amor Ameal.
Ameal y la gente que apoya la contratación de Riquelme tras el acuerdo entre esa parte de la dirigencia y el representante del futbolista, analizaba los pasos a seguir: si esperar hasta la reunión de comisión directiva del martes o adelantarse a consumar el vínculo previamente a ese cónclave.
Los opositores aseguran que la votación que hubo en un hotel el viernes último no tiene sustento al afirmar que el estatuto señala que las decisiones de CD tienen que tomarse en sede institucional.
Nadie quiere dar el paso que lleve a impugnaciones y, en este punto, los macristas tienen menos apuro, ya que aprovechan el tiempo para sumar aliados en una posible votación el martes.
Ameal y su gente, entre ellos el vice Juan Carlos Crespi, los más interesados en tener sí o sí a Riquelme, en cambio son los que pueden cargar con esas impugnaciones si es que el titular xeneize se la juega y procede a la firma del contrato. Se juega porque el estatuto de Boca señala que el directivo debe afrontar eventuales deudas del club con su patrimonio.
Se trata de un vínculo por 5 millones de dólares por cuatro años y se reparten por partes iguales la carga impositiva, que supera el millón por cada uno.
La carga tributaria para Boca es la aspereza que a los macristas le impiden transitar por el mismo camino que sus colegas, aunque hay algo más. Se trata de las elecciones que habrá en diciembre, cuando venza el período de Ameal al frente del club, luego de asumir tras la muerte de su antecesor Pedro Pompilio.
Así, las cosas, la comisión directiva de Boca se reunirá el martes para decidir si aprueba la propuesta que el presidente le realizó a Riquelme.
Luego del tenso encuentro entre dirigentes que tuvo que ser suspendido unos días atrás, y con varias idas y vueltas más durante el fin de semana, las negociaciones ahora aparecen encaminadas pero no definidas, en especial por la resistencia que genera en varios pesos pesado del club.
Riquelme se niega además a jugar el partido amistoso o de despedida con el que Boca pretendía pagarle los 500 mil dólares que él deberá desembolsar a lo largo de estos cuatro años en concepto de impuesto a las Ganancias, por lo que se espera que el encuentro de comisión directiva sea largo y áspero.
Si finalmente llegan a un acuerdo y se firma el contrato, habrá foto y conferencia de prensa con el futbolista antes del fin de semana. En caso contrario el jugador, que se recupera de una compleja lesión de rodilla, quedará liberado para negociar su incorporación a Flamengo, Racing o Independiente.
La interna que explotó en la comisión directiva de Boca Juniors en torno al contrato de Juan Román Riquelme obligó a sus protagonistas a cuidar los pasos a seguir, al punto que era una incógnita sobre el momento en que el futbolista y la directiva firmarán el nuevo vínculo con cuatro años de extensión.
Los macristas que dominan la nueva oposición al menos en cuanto al contrato de Riquelme, tanto por su extensión como en los términos económicos, y que ya levantó la advertencia del tesorero Daniel Angelici de que renunciará en caso de que cristalice el acuerdo al que llegaron el jugador y el presidente Jorge Amor Ameal.
Ameal y la gente que apoya la contratación de Riquelme tras el acuerdo entre esa parte de la dirigencia y el representante del futbolista, analizaba los pasos a seguir: si esperar hasta la reunión de comisión directiva del martes o adelantarse a consumar el vínculo previamente a ese cónclave.
Los opositores aseguran que la votación que hubo en un hotel el viernes último no tiene sustento al afirmar que el estatuto señala que las decisiones de CD tienen que tomarse en sede institucional.
Nadie quiere dar el paso que lleve a impugnaciones y, en este punto, los macristas tienen menos apuro, ya que aprovechan el tiempo para sumar aliados en una posible votación el martes.
Ameal y su gente, entre ellos el vice Juan Carlos Crespi, los más interesados en tener sí o sí a Riquelme, en cambio son los que pueden cargar con esas impugnaciones si es que el titular xeneize se la juega y procede a la firma del contrato. Se juega porque el estatuto de Boca señala que el directivo debe afrontar eventuales deudas del club con su patrimonio.
Se trata de un vínculo por 5 millones de dólares por cuatro años y se reparten por partes iguales la carga impositiva, que supera el millón por cada uno.
La carga tributaria para Boca es la aspereza que a los macristas le impiden transitar por el mismo camino que sus colegas, aunque hay algo más. Se trata de las elecciones que habrá en diciembre, cuando venza el período de Ameal al frente del club, luego de asumir tras la muerte de su antecesor Pedro Pompilio.
Así, las cosas, la comisión directiva de Boca se reunirá el martes para decidir si aprueba la propuesta que el presidente le realizó a Riquelme.
Luego del tenso encuentro entre dirigentes que tuvo que ser suspendido unos días atrás, y con varias idas y vueltas más durante el fin de semana, las negociaciones ahora aparecen encaminadas pero no definidas, en especial por la resistencia que genera en varios pesos pesado del club.
Riquelme se niega además a jugar el partido amistoso o de despedida con el que Boca pretendía pagarle los 500 mil dólares que él deberá desembolsar a lo largo de estos cuatro años en concepto de impuesto a las Ganancias, por lo que se espera que el encuentro de comisión directiva sea largo y áspero.
Si finalmente llegan a un acuerdo y se firma el contrato, habrá foto y conferencia de prensa con el futbolista antes del fin de semana. En caso contrario el jugador, que se recupera de una compleja lesión de rodilla, quedará liberado para negociar su incorporación a Flamengo, Racing o Independiente.