Obama avisa a Irán de que la presión internacional aumentará si no cesa su programa nuclear
Washington, Agencias
El presidente de EEUU, Barack Obama, lanzó una nueva advertencia a Irán por su programa nuclear este jueves. Obama afirmó que "continuará la presión" internacional para evitar que la República Islámica pueda hacerse con armamento nuclear. Si Irán continúa su desafío a la comunidad internacional, "la presión seguirá aumentando y su aislamiento seguirá profundizándose", sentenció Obama.
El presidente estadounidense realizó estas declaraciones en la firma de una ley de sanciones contra Irán, que Obama ha descrito como "las más duras contra ese país jamás aprobadas por el Congreso" estadounidense. Un programa de sanciones que la Cámara de Representates y el Senado estadounidense aprobaron hace una semana.
La ley con las nuevas y más estrictas sanciones pretende restringir las importaciones petroleras de la República Islámica y dificultar las transacciones internacionales de la Guardia Revolucionaria iraní y de aquellos bancos internaciones que apoyen el programa nuclear de ese país o el terrorismo. "Hace más difícil para el Gobierno iraní comprar petróleo refinado y los bienes, servicios y materiales para modernizar el sector petrolero y de gas natural iraní", dijo Obama.
Las nuevas sanciones penalizan a las compañías que abastezcan a Irán con gasolina así como a los bancos que realicen negocios con ese país. A las empresas o bancos que tengan relación con el Gobierno iraní no se les permitirá acceder al sistema financiero estadounidense ni obtener contratos con el Gobierno de Obama. Unas sanciones que van más lejos que las aprobadas el mes pasado por el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas. Otros países, como Australia y Canadá, además de la Unión Europea, han presentado o planean presentar su propio programa de sanciones, recordó el presidente estadounidense.
"Con estas sanciones golpeamos en el corazón de la habilidad del Gobierno iraní para desarrollar su plan nuclear". "Estamos enseñando al Gobierno iraní que sus acciones tienen consecuencias", dijo Obama. Las nuevas sanciones están diseñadas para herir el punto más vulnerable de Irán: su sector energético. El quinto país productor de crudo no tiene suficiente capacidad para refinar el petróleo e importa el 40% de la gasolina que necesita.
"Hasta la fecha, Irán ha elegido la senda del desafío, es por eso que hemos construido una coalición de naciones más profunda para presionar al Gobierno iraní". EEUU acusa a Teherán de quererse procurar un arma nuclear mediante su programa atómico, algo que la República Islámica siempre ha desmentido al asegurar que las actividades tienen fines pacíficos.
El presidente de EEUU, Barack Obama, lanzó una nueva advertencia a Irán por su programa nuclear este jueves. Obama afirmó que "continuará la presión" internacional para evitar que la República Islámica pueda hacerse con armamento nuclear. Si Irán continúa su desafío a la comunidad internacional, "la presión seguirá aumentando y su aislamiento seguirá profundizándose", sentenció Obama.
El presidente estadounidense realizó estas declaraciones en la firma de una ley de sanciones contra Irán, que Obama ha descrito como "las más duras contra ese país jamás aprobadas por el Congreso" estadounidense. Un programa de sanciones que la Cámara de Representates y el Senado estadounidense aprobaron hace una semana.
La ley con las nuevas y más estrictas sanciones pretende restringir las importaciones petroleras de la República Islámica y dificultar las transacciones internacionales de la Guardia Revolucionaria iraní y de aquellos bancos internaciones que apoyen el programa nuclear de ese país o el terrorismo. "Hace más difícil para el Gobierno iraní comprar petróleo refinado y los bienes, servicios y materiales para modernizar el sector petrolero y de gas natural iraní", dijo Obama.
Las nuevas sanciones penalizan a las compañías que abastezcan a Irán con gasolina así como a los bancos que realicen negocios con ese país. A las empresas o bancos que tengan relación con el Gobierno iraní no se les permitirá acceder al sistema financiero estadounidense ni obtener contratos con el Gobierno de Obama. Unas sanciones que van más lejos que las aprobadas el mes pasado por el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas. Otros países, como Australia y Canadá, además de la Unión Europea, han presentado o planean presentar su propio programa de sanciones, recordó el presidente estadounidense.
"Con estas sanciones golpeamos en el corazón de la habilidad del Gobierno iraní para desarrollar su plan nuclear". "Estamos enseñando al Gobierno iraní que sus acciones tienen consecuencias", dijo Obama. Las nuevas sanciones están diseñadas para herir el punto más vulnerable de Irán: su sector energético. El quinto país productor de crudo no tiene suficiente capacidad para refinar el petróleo e importa el 40% de la gasolina que necesita.
"Hasta la fecha, Irán ha elegido la senda del desafío, es por eso que hemos construido una coalición de naciones más profunda para presionar al Gobierno iraní". EEUU acusa a Teherán de quererse procurar un arma nuclear mediante su programa atómico, algo que la República Islámica siempre ha desmentido al asegurar que las actividades tienen fines pacíficos.