Maradona: "Bilardo me traicionó"
Buenos Aires, Agencias
Maradona leyó un comunicado durante diez minutos y no aceptó preguntas. Se mostró dolido, no hizo autocrítica y les apuntó al Narigón y a Grondona, a quien acusó de mentiroso y hasta avisó que "desde el '90 que no pasamos los cuartos de final: el problema del fútbol argentino viene desde arriba".
Diego sigue siendo Diego, sin dudas. Nunca a medias tintas, siempre fiel a sus convicciones, con poca autocrítica sobre su trabajo pero con la convicción de haber caminado siempre por la misma vereda y aquellos que en algún tiempo lo acompañaron fueron los que en definitiva le quitaron el sueño de la revancha en su tan amada Selección Argentina. Con un impecable traje negro, camisa celeste y una barba al mejor estivo Che Guevara, el Diez dio su versión de la salida de la Selección y no ahorró calificativos a la hora de apuntar a los responsables: “¿Qué pasó? Grondona me mintió y Bilardo me traicionó”, arrancó diciendo. Con tranquilidad pero con una presesión lógica que marchaba por dentro, el Diez contó su verdad y aclaró: “Hubo una reunión en Sudáfrica junto a Grondona, algunos jugadores y varios testigos. Julio me dijo que estaba contento, conforme con mi trabajo y quería que siga. Una vez en Argentina me reuní y me comunicó que siete de mis ayudantes no continuarían. Eso fue como decirme que yo estaba afuera”. Para Diego le apuntaron a su gente y eso “no se negocia”, por eso dijo basta. “Yo tengo los códigos que ellos no tienen. A mi me los enseñó mi viejo de chiquito y, con mis errores, no los pienso cambiar”, sentenció. Sin embargo, para Maradona, quien cambió fue Grondona y según el propio Diego, ese cambio se dio mientras su cuerpo técnico y él “estaban haciendo el duelo”. Diego dijo: “Tal vez pensaron que yo podía traicionar a mis colaboradores, porque ellos en mi lugar lo hubiesen hecho. Cuando nosotros estábamos de luto, Bilardo trabajaba en las sombras para echarme. La lista que me pidió Grondona (NdeR: para el partido del próximo 11 de agosto ante Irlanda) y que yo se la dí era un cuento, porque Bilardo y Humberto ya la habían hecho.”
Las manos inquietas, la ansiedad lógica por leer un comunicado que duró 10 minuots exactos le jugaron alguna mala pasada en la lectura. Tal vez porque el propio entrenado nunca pensó estar en esa silla del restaurante El Mangrullo. En el comienzo del comunicado, Diego hizo también un análisis de su gestión y en ese sentido aclaró: “Me llamaron para apagar un incendio, tomamos una Selección que tenía el grupo dividido, apagamos el incendio, recuperamos la mística del grupo y cuando tenía tiempo para trabajar pasó lo que pasó”. En referencia al tiempo, Diego tiró que su ciclo “fue el más corto de los últimos 35 años” y que no le permitieron continuar con su proyecto. “Desde 1990 que una selección no logra superar los cuartos de final, esto no es casualidad, esto es porque se están haciendo mal las cosas desde arriba y no se está haciendo nada para cambiarlas”, tiró.
En definitiva el Diez marcó una vez más la cancha. En su discurso dejó en claro de que lado está cada uno y le dejó una frase-advertencia, para quien sea su sucesor: “Agarre quien agarre la selección que sepa que la traición está a la vuelta de la esquina y hay personajes que no quieren al fútbol, argentino y solo quieren cuidan sus intereses”. Un Maradona auténtico, un capítulo más de su vida…
Maradona leyó un comunicado durante diez minutos y no aceptó preguntas. Se mostró dolido, no hizo autocrítica y les apuntó al Narigón y a Grondona, a quien acusó de mentiroso y hasta avisó que "desde el '90 que no pasamos los cuartos de final: el problema del fútbol argentino viene desde arriba".
Diego sigue siendo Diego, sin dudas. Nunca a medias tintas, siempre fiel a sus convicciones, con poca autocrítica sobre su trabajo pero con la convicción de haber caminado siempre por la misma vereda y aquellos que en algún tiempo lo acompañaron fueron los que en definitiva le quitaron el sueño de la revancha en su tan amada Selección Argentina. Con un impecable traje negro, camisa celeste y una barba al mejor estivo Che Guevara, el Diez dio su versión de la salida de la Selección y no ahorró calificativos a la hora de apuntar a los responsables: “¿Qué pasó? Grondona me mintió y Bilardo me traicionó”, arrancó diciendo. Con tranquilidad pero con una presesión lógica que marchaba por dentro, el Diez contó su verdad y aclaró: “Hubo una reunión en Sudáfrica junto a Grondona, algunos jugadores y varios testigos. Julio me dijo que estaba contento, conforme con mi trabajo y quería que siga. Una vez en Argentina me reuní y me comunicó que siete de mis ayudantes no continuarían. Eso fue como decirme que yo estaba afuera”. Para Diego le apuntaron a su gente y eso “no se negocia”, por eso dijo basta. “Yo tengo los códigos que ellos no tienen. A mi me los enseñó mi viejo de chiquito y, con mis errores, no los pienso cambiar”, sentenció. Sin embargo, para Maradona, quien cambió fue Grondona y según el propio Diego, ese cambio se dio mientras su cuerpo técnico y él “estaban haciendo el duelo”. Diego dijo: “Tal vez pensaron que yo podía traicionar a mis colaboradores, porque ellos en mi lugar lo hubiesen hecho. Cuando nosotros estábamos de luto, Bilardo trabajaba en las sombras para echarme. La lista que me pidió Grondona (NdeR: para el partido del próximo 11 de agosto ante Irlanda) y que yo se la dí era un cuento, porque Bilardo y Humberto ya la habían hecho.”
Las manos inquietas, la ansiedad lógica por leer un comunicado que duró 10 minuots exactos le jugaron alguna mala pasada en la lectura. Tal vez porque el propio entrenado nunca pensó estar en esa silla del restaurante El Mangrullo. En el comienzo del comunicado, Diego hizo también un análisis de su gestión y en ese sentido aclaró: “Me llamaron para apagar un incendio, tomamos una Selección que tenía el grupo dividido, apagamos el incendio, recuperamos la mística del grupo y cuando tenía tiempo para trabajar pasó lo que pasó”. En referencia al tiempo, Diego tiró que su ciclo “fue el más corto de los últimos 35 años” y que no le permitieron continuar con su proyecto. “Desde 1990 que una selección no logra superar los cuartos de final, esto no es casualidad, esto es porque se están haciendo mal las cosas desde arriba y no se está haciendo nada para cambiarlas”, tiró.
En definitiva el Diez marcó una vez más la cancha. En su discurso dejó en claro de que lado está cada uno y le dejó una frase-advertencia, para quien sea su sucesor: “Agarre quien agarre la selección que sepa que la traición está a la vuelta de la esquina y hay personajes que no quieren al fútbol, argentino y solo quieren cuidan sus intereses”. Un Maradona auténtico, un capítulo más de su vida…