La revista porno Penthouse quiere comprar Playboy
Curiosidades
Los tiempos cambian y ahora el popular conejito de Playboy pasa malos momentos financieros. Tanto que incluso ya surgen compradores entre los que antes eran dura (y mucho) competencia. Es la revista Penthouse, o mejor dicho sus propietarios, los que ofrecen una cifra considerable por adquirir la célebre marca de Playboy.
La oferta realizada estaría cerca de los 170 millones de dólares por comprar todas las empresas de Playboy. Incluyendo la revista y sus diferentes ediciones electrónicas. Sin olvidar, claro está, el canal de televisión para adultos Playboy TV.
La nueva oferta presentada por los propietarios de Penthouse es superior a la que el propio Hugh Hefner, fundador de Playboy, presentó hace unas semanas. Concretamente cerca de 40 millones de dólares más elevada.
Hugh Hefner fundó Playboy en el año 1953. Con sólo una máquina de escribir y muy buenas ideas. Ahora, ya próximo a su retiro definitivo, tiene que ver como su imperio creado sobre las curvas de miles de bellezas de todo el mundo, se tambalea por culpa de unos números tan rojos como el carmín de labios de sus conejitas.
Los tiempos cambian y ahora el popular conejito de Playboy pasa malos momentos financieros. Tanto que incluso ya surgen compradores entre los que antes eran dura (y mucho) competencia. Es la revista Penthouse, o mejor dicho sus propietarios, los que ofrecen una cifra considerable por adquirir la célebre marca de Playboy.
La oferta realizada estaría cerca de los 170 millones de dólares por comprar todas las empresas de Playboy. Incluyendo la revista y sus diferentes ediciones electrónicas. Sin olvidar, claro está, el canal de televisión para adultos Playboy TV.
La nueva oferta presentada por los propietarios de Penthouse es superior a la que el propio Hugh Hefner, fundador de Playboy, presentó hace unas semanas. Concretamente cerca de 40 millones de dólares más elevada.
Hugh Hefner fundó Playboy en el año 1953. Con sólo una máquina de escribir y muy buenas ideas. Ahora, ya próximo a su retiro definitivo, tiene que ver como su imperio creado sobre las curvas de miles de bellezas de todo el mundo, se tambalea por culpa de unos números tan rojos como el carmín de labios de sus conejitas.