ALP proclama el 17 de julio Día nacional e internacional del Desaparecido
La Paz, Abi
La Asamblea Legislativa Plurinacional (ALP) de Bolivia declaró Día Internacional y Nacional del Desaparecido el 17 de julio, en la víspera de cumplirse 30 años del cruento golpe militar que encabezó el general Luis García Meza.
La declaratoria se registró en el marco de la XII sesión ordinaria el viernes.
El presidente de la ALP, Álvaro García Linera, además de rendir su reconocimiento y admiración por los caídos y desaparecidos el 17 de julio de 1980, hizo aprobar por el pleno legislativo y por unanimidad, el homenaje cuyo texto será publicado este sábado.
"Rendimos nuestro homenaje y proclamamos este 17 de julio Día Internacional del Desaparecido, Día nacional del Desaparecido, en memoria de ciudadanas y ciudadanos que fueron víctimas de desapariciones forzadas durante las dictaduras militares en Bolivia", señala el documento expedido por la ALP.
El líder socialista boliviano Marcelo Quiroga Santa Cruz y el líder obrero Carlos Flores fueron asesinados al cabo de una reunión del Consejo Nacional de Defensa de la Democracia en la destruida sede de la Central Obrera Boliviana en el centro de La Paz.
De acuerdo con organizaciones activistas de derechos humanos el régimen de hecho de García Meza segó la vida y desapareció a 200 bolivianos.
Los restos de Quiroga Santa Cruz y Flores no han sido encontrados aún.
La resolución legislativa indica además que "la dictadura en Bolivia en las décadas de los años '70 y '80 ha victimizado a luchadores por el retorno a la democracia, y que un 17 de julio ha cobrado vidas y a enlutado el alma de los familiares revictimizándoles aún más al no encontrar los cuerpos de sus seres queridos".
Sostiene también que "los crímenes de lesa humanidad deben ser condenados, sin embargo nos debe comprometer a realizar esfuerzos responsables para que nunca más se cometan en Bolivia y en el mundo hechos de esta naturaleza".
El homenaje se verificó luego de una moción de la diputada de la opositora Unidad Nacional, Elizabeth Reyes, cuyo progenitor, José Reyes, fuera asesinado junto a la cúpula del socialdemócrata Movimiento de la Izquierda Revolucionaria en la calle Harrington, de La Paz, el 14 de enero de 1981, a manos de paramilitares.
Pos u parte, la diputada Marcela Revollo, del Movimiento Sin Miedo, dijo, a su turno, que "el homenaje sería incompleto, si no se llega dar con los restos de Marcelo Quiroga, Carlos Flores, Renato Ticona y muchos más durante las dictaduras militares".
La Asamblea Legislativa Plurinacional (ALP) de Bolivia declaró Día Internacional y Nacional del Desaparecido el 17 de julio, en la víspera de cumplirse 30 años del cruento golpe militar que encabezó el general Luis García Meza.
La declaratoria se registró en el marco de la XII sesión ordinaria el viernes.
El presidente de la ALP, Álvaro García Linera, además de rendir su reconocimiento y admiración por los caídos y desaparecidos el 17 de julio de 1980, hizo aprobar por el pleno legislativo y por unanimidad, el homenaje cuyo texto será publicado este sábado.
"Rendimos nuestro homenaje y proclamamos este 17 de julio Día Internacional del Desaparecido, Día nacional del Desaparecido, en memoria de ciudadanas y ciudadanos que fueron víctimas de desapariciones forzadas durante las dictaduras militares en Bolivia", señala el documento expedido por la ALP.
El líder socialista boliviano Marcelo Quiroga Santa Cruz y el líder obrero Carlos Flores fueron asesinados al cabo de una reunión del Consejo Nacional de Defensa de la Democracia en la destruida sede de la Central Obrera Boliviana en el centro de La Paz.
De acuerdo con organizaciones activistas de derechos humanos el régimen de hecho de García Meza segó la vida y desapareció a 200 bolivianos.
Los restos de Quiroga Santa Cruz y Flores no han sido encontrados aún.
La resolución legislativa indica además que "la dictadura en Bolivia en las décadas de los años '70 y '80 ha victimizado a luchadores por el retorno a la democracia, y que un 17 de julio ha cobrado vidas y a enlutado el alma de los familiares revictimizándoles aún más al no encontrar los cuerpos de sus seres queridos".
Sostiene también que "los crímenes de lesa humanidad deben ser condenados, sin embargo nos debe comprometer a realizar esfuerzos responsables para que nunca más se cometan en Bolivia y en el mundo hechos de esta naturaleza".
El homenaje se verificó luego de una moción de la diputada de la opositora Unidad Nacional, Elizabeth Reyes, cuyo progenitor, José Reyes, fuera asesinado junto a la cúpula del socialdemócrata Movimiento de la Izquierda Revolucionaria en la calle Harrington, de La Paz, el 14 de enero de 1981, a manos de paramilitares.
Pos u parte, la diputada Marcela Revollo, del Movimiento Sin Miedo, dijo, a su turno, que "el homenaje sería incompleto, si no se llega dar con los restos de Marcelo Quiroga, Carlos Flores, Renato Ticona y muchos más durante las dictaduras militares".