A 60 años del Maracanazo
fifa.com
El 'Maracanazo', la máxima gesta del fútbol uruguayo, cumple su 60 aniversario en un momento en el que la Celeste ha reavivado el optimismo en el país, tras lograr el cuarto puesto en el Mundial de Sudáfrica, y los hinchas ya sueñan con otra hazaña en Brasil 2014.
"A 60 años de Maracaná y a sólo cuatro de Brasil 2014", afirmó el diario Ultimas Noticias, que sostuvo que "con el orgullo celeste bien alto por la reciente gesta de Sudáfrica, este 16 de julio es diferente a los anteriores".
"Hoy, recordamos los 60 años del Maracanazo pero apuntando al próximo Mundial, que también será en Brasil. Mezclemos pasado y futuro a ver qué sale", aseguró el periódico en una nota dedicada a la hazaña recordada cada 16 de julio por toda la prensa uruguaya.
Gesta inolvidable
El relato de cómo el 16 de julio de 1950 Uruguay enmudeció a 200.000 brasileños en un Estadio Maracaná recién inaugurado, al imponerse 2-1 al local Brasil, es transmitido de generación en generación desde entonces y recordado como la mayor hazaña del fútbol uruguayo.
La historia es conocida por los uruguayos de todas las edades: a Brasil le alcanzaba con un empate para llevarse el título y los locales se pusieron 1-0 arriba en el inicio del segundo tiempo.
Lejos de amilanarse, el capitán celeste, Obdulio Varela, se colocó la pelota bajo el brazo y reclamó durante más de un minuto un claro fuera de juego, lo que es recordado como momento clave que permitió "enfriar" el encuentro.
Uruguay se recuperó y a los 21 minutos logró empatar por intermedio de Juan Alberto Schiaffino, pero el monumental estadio enmudeció cuando a falta de 11 minutos llegó el segundo gol para Uruguay, dando inicio a la leyenda del 'Maracanazo'.
"A Maracaná lo callaron tres personas, el Papa, Frank Sinatra y yo", dijo Ghiggia, de 83 años, repitiendo una frase que acuñó hace tiempo en un encuentro con la televisión brasileña. "Después del gol, el silencio fue increíble", recordó el único sobreviviente de la selección del 50 junto al golero Aníbal Paz, actualmente enfermo.
Fue el último título mundial que logró la celeste: después de 1950 lo más lejos que llegó en una Copa del Mundo fue con el cuarto puesto en México 1970, desempeño igualado este año en Sudáfrica tras una larga sucesión de desencantos en las últimas décadas.
Festejo e ilusión
Lejos del espíritu de 1970, cuando el cuarto puesto fue recibido como una derrota, esta vez cientos de miles de uruguayos -en un país de 3,4 millones de personas- se lanzaron a las calles de Montevideo para festejar y brindarle un inmenso agradecimiento a su selección de fútbol.
"Muchas gracias Uruguay por ayudarnos a soñar" o "Gracias por darnos tanta alegría", eran algunos de los carteles que podían verse a lo largo de una larga caravana que convocó le martes a una multitud inédita en la historia reciente del país.
Mientras esperaban la llegada de los jugadores, los animadores de un acto de homenaje a la selección recordaron las glorias pasadas y apuntaron las baterías a la Copa del Mundo de 2014.
"Si hoy en Brasil hay un campeonato, hay un solo país que lo puede ganar: ¡Uruguay!", aseguró uno de los conductores, mientras en medio del repique de tambores el público coreaba: "¡Volveremos, volveremos! ¡Volveremos otra vez, volveremos a ser campeones, como la primera vez!".
El 'efecto Maracaná' ha sido cuestionado por sociólogos, que afirman que dio pie al "el mito de invencibilidad" y a una especie de soberbia que impedía festejar segundos puestos.
Hoy, tras lo realizado por la selección en Sudáfrica, los hinchas se permiten soñar con otra hazaña en Brasil 2014.
El 'Maracanazo', la máxima gesta del fútbol uruguayo, cumple su 60 aniversario en un momento en el que la Celeste ha reavivado el optimismo en el país, tras lograr el cuarto puesto en el Mundial de Sudáfrica, y los hinchas ya sueñan con otra hazaña en Brasil 2014.
"A 60 años de Maracaná y a sólo cuatro de Brasil 2014", afirmó el diario Ultimas Noticias, que sostuvo que "con el orgullo celeste bien alto por la reciente gesta de Sudáfrica, este 16 de julio es diferente a los anteriores".
"Hoy, recordamos los 60 años del Maracanazo pero apuntando al próximo Mundial, que también será en Brasil. Mezclemos pasado y futuro a ver qué sale", aseguró el periódico en una nota dedicada a la hazaña recordada cada 16 de julio por toda la prensa uruguaya.
Gesta inolvidable
El relato de cómo el 16 de julio de 1950 Uruguay enmudeció a 200.000 brasileños en un Estadio Maracaná recién inaugurado, al imponerse 2-1 al local Brasil, es transmitido de generación en generación desde entonces y recordado como la mayor hazaña del fútbol uruguayo.
La historia es conocida por los uruguayos de todas las edades: a Brasil le alcanzaba con un empate para llevarse el título y los locales se pusieron 1-0 arriba en el inicio del segundo tiempo.
Lejos de amilanarse, el capitán celeste, Obdulio Varela, se colocó la pelota bajo el brazo y reclamó durante más de un minuto un claro fuera de juego, lo que es recordado como momento clave que permitió "enfriar" el encuentro.
Uruguay se recuperó y a los 21 minutos logró empatar por intermedio de Juan Alberto Schiaffino, pero el monumental estadio enmudeció cuando a falta de 11 minutos llegó el segundo gol para Uruguay, dando inicio a la leyenda del 'Maracanazo'.
"A Maracaná lo callaron tres personas, el Papa, Frank Sinatra y yo", dijo Ghiggia, de 83 años, repitiendo una frase que acuñó hace tiempo en un encuentro con la televisión brasileña. "Después del gol, el silencio fue increíble", recordó el único sobreviviente de la selección del 50 junto al golero Aníbal Paz, actualmente enfermo.
Fue el último título mundial que logró la celeste: después de 1950 lo más lejos que llegó en una Copa del Mundo fue con el cuarto puesto en México 1970, desempeño igualado este año en Sudáfrica tras una larga sucesión de desencantos en las últimas décadas.
Festejo e ilusión
Lejos del espíritu de 1970, cuando el cuarto puesto fue recibido como una derrota, esta vez cientos de miles de uruguayos -en un país de 3,4 millones de personas- se lanzaron a las calles de Montevideo para festejar y brindarle un inmenso agradecimiento a su selección de fútbol.
"Muchas gracias Uruguay por ayudarnos a soñar" o "Gracias por darnos tanta alegría", eran algunos de los carteles que podían verse a lo largo de una larga caravana que convocó le martes a una multitud inédita en la historia reciente del país.
Mientras esperaban la llegada de los jugadores, los animadores de un acto de homenaje a la selección recordaron las glorias pasadas y apuntaron las baterías a la Copa del Mundo de 2014.
"Si hoy en Brasil hay un campeonato, hay un solo país que lo puede ganar: ¡Uruguay!", aseguró uno de los conductores, mientras en medio del repique de tambores el público coreaba: "¡Volveremos, volveremos! ¡Volveremos otra vez, volveremos a ser campeones, como la primera vez!".
El 'efecto Maracaná' ha sido cuestionado por sociólogos, que afirman que dio pie al "el mito de invencibilidad" y a una especie de soberbia que impedía festejar segundos puestos.
Hoy, tras lo realizado por la selección en Sudáfrica, los hinchas se permiten soñar con otra hazaña en Brasil 2014.