Un estudio concluye que la mejor forma de anotar un penalti es ignorar al portero
Londres, Ep
Los jugadores de fútbol que deben lanzar un penalti para alzarse con la gloria en la definición de un partido del Mundial tienen que ignorar por completo al portero y concentrarse en la dirección hacia la que quieren disparar el balón, según un estudio científico publicado este lunes en Gran Bretaña.
En un nuevo estudio científico que analizó cómo la ansiedad afecta a los futbolistas a la hora de los penaltis, Greg Wood, psicólogo de la Exeter University, en Gran Bretaña, dijo que los jugadores bajo presión deben trabajar para mantener la calma y no dejarse distraer por el arquero.
"Estamos naturalmente condicionados para centrarnos en cosas de nuestro entorno que encontramos amenazantes, y en una competición por penales lo único que pone en duda el éxito de la pegada es el portero, por eso tendemos a concentrarnos en él y en sus movimientos", explicó. "En cambio, deberíamos mirar sólo hacia donde vamos a patear la pelota e ignorar al guardameta", agregó.
Wood estudió a jugadores de fútbol de nivel universitario, a quienes instaló una tecnología de rastreo de la visión, y luego los sometió a varias situaciones que los pondrían más o menos ansiosos mientras intentaban lanzar penaltis.
El estudio, que será publicado en el Journal of Sports Sciences, halló que cuanto más nerviosos estaban los jugadores, más concentrados estaban en la amenaza del portero y más propensos eran a disparar la pelota contra él o cerca, lo que facilita la parada.
Los guardametas, por su parte, tienden a centrarse en la pelota o en los miembros inferiores del lanzador, no en su cara o sus ojos, por eso existe un bajo riesgo de que el jugador dirija su mirada hacia él. Wood dijo que su estudio demostró que si el portero salta o mueve sus brazos con la intención de distraer al jugador, es más probable que el lanzador se centre en él y tire la pelota en su dirección.
El trabajo citó al ex portero del Liverpool Duddek, quien en el 2005 describió cómo sus técnicas de distracción habían dado sus frutos en un partido clave. "Mi mayor recuerdo es en la final de la Copa de Europa en 1984 en Roma y mi rutina de las ''piernas de espagueti'' durante los penales, que nos permitió ganar el trofeo", dijo.
"La gente pensaba que yo era irrespetuoso con los jugadores, pero yo sólo estaba probando su concentración bajo presión. Creo que no pasaron la prueba", afirmó.
Wood dijo que su estudio apoyaba la sugerencia de Grobbelaar. "Ya sea que se use la técnica de las ''piernas de espagueti'' o simplemente el movimiento de brazos, parece que Duddek tenía razón", señaló.
Los jugadores de fútbol que deben lanzar un penalti para alzarse con la gloria en la definición de un partido del Mundial tienen que ignorar por completo al portero y concentrarse en la dirección hacia la que quieren disparar el balón, según un estudio científico publicado este lunes en Gran Bretaña.
En un nuevo estudio científico que analizó cómo la ansiedad afecta a los futbolistas a la hora de los penaltis, Greg Wood, psicólogo de la Exeter University, en Gran Bretaña, dijo que los jugadores bajo presión deben trabajar para mantener la calma y no dejarse distraer por el arquero.
"Estamos naturalmente condicionados para centrarnos en cosas de nuestro entorno que encontramos amenazantes, y en una competición por penales lo único que pone en duda el éxito de la pegada es el portero, por eso tendemos a concentrarnos en él y en sus movimientos", explicó. "En cambio, deberíamos mirar sólo hacia donde vamos a patear la pelota e ignorar al guardameta", agregó.
Wood estudió a jugadores de fútbol de nivel universitario, a quienes instaló una tecnología de rastreo de la visión, y luego los sometió a varias situaciones que los pondrían más o menos ansiosos mientras intentaban lanzar penaltis.
El estudio, que será publicado en el Journal of Sports Sciences, halló que cuanto más nerviosos estaban los jugadores, más concentrados estaban en la amenaza del portero y más propensos eran a disparar la pelota contra él o cerca, lo que facilita la parada.
Los guardametas, por su parte, tienden a centrarse en la pelota o en los miembros inferiores del lanzador, no en su cara o sus ojos, por eso existe un bajo riesgo de que el jugador dirija su mirada hacia él. Wood dijo que su estudio demostró que si el portero salta o mueve sus brazos con la intención de distraer al jugador, es más probable que el lanzador se centre en él y tire la pelota en su dirección.
El trabajo citó al ex portero del Liverpool Duddek, quien en el 2005 describió cómo sus técnicas de distracción habían dado sus frutos en un partido clave. "Mi mayor recuerdo es en la final de la Copa de Europa en 1984 en Roma y mi rutina de las ''piernas de espagueti'' durante los penales, que nos permitió ganar el trofeo", dijo.
"La gente pensaba que yo era irrespetuoso con los jugadores, pero yo sólo estaba probando su concentración bajo presión. Creo que no pasaron la prueba", afirmó.
Wood dijo que su estudio apoyaba la sugerencia de Grobbelaar. "Ya sea que se use la técnica de las ''piernas de espagueti'' o simplemente el movimiento de brazos, parece que Duddek tenía razón", señaló.