Rousseff promete continuar con el Brasil de Lula
Redacción
BBC Mundo
La candidata oficialista del Partido de los Trabajadores de Brasil (PT), Dilma Rousseff, prometió este domingo continuar con los principales proyectos del actual presidente, Luiz Inácio "Lula" da Silva, pero "no para repetir, sino para progresar".
"No es casualidad que, después de un gran hombre, Brasil pueda ser gobernado por una mujer. Por una mujer que va a continuar con el Brasil de Lula pero con alma y corazón de mujer", afirmó Rousseff este domingo en una convención en la que fue nombrada oficialmente la candidata del PT para las elecciones presidenciales del 3 de octubre.
En ese evento también se presentó al diputado Michel Tremer, del Partido del Movimiento Democrático Brasileño (PMDB), como compañero de fórmula de Rousseff.
La corresponsal de la BBC Fabrícia Peixoto destacó que la candidata oficialista pronunció un discurso de unos 50 minutos en los que mencionó al presidente Lula unas 30 veces.
Según Peixoto, en Brasil "se apunta a la transferencia de popularidad de Lula a Dilma como el principal punto a favor de la candidata del PT en la disputa por el Palacio de Planalto" de Brasilia, que alberga el Poder Ejecutivo brasileño.
Pese a que el discurso de la ex ministra de Gobierno no estuvo caracterizado por las críticas a sus rivales, ésta aseguró que los presidentes anteriores a Lula gobernaron para "un tercio de la población" mientras que el resto era "carga y estorbo".
Guiño a las mujeres
El voto femenino representa algo más del 50% del electorado brasileño.
Según la corresponsal de la BBC, la convención del PT estuvo marcada por los homenajes a las brasileñas y la propia candidata Dilma Rousself plagó su discurso de guiños a las mujeres que eran mayoría en el auditorio en el que se celebró el acto.
"Llegó la hora de que una mujer gobierne el país, porque nadie mejor que una mujer para profundizar la mirada social", afirmó.
En ese sentido, aseguró que si gana las elecciones, "cuando alguien les pregunte qué quieren ser cuando crezcan, las niñas brasileñas podrán decir, igual que los niños o los obreros después de Lula, que quieren ser presidentas" del país.
El actual presidente también intervino en la convención donde dijo estar convencido de que su candidata ganará los comicios, si bien reconoció que no será fácil.
Además, Lula pidió que la campaña sea de "alto nivel para discutir ideas" y exhortó a sus adversarios a que no hagan "el juego sucio de estar inventando denuncias todos los días".
Desafíos
Dilma Rousseff, la ex ministra de Gobierno de Lula, de 62 años y pasado guerrillero y que nunca ha sido candidata a un cargo de elección popular, deberá converncer a los votantes de que es capaz de administrar el país, afirmó la corresponsal de la BBC.
Según la corresponsal de la BBC, "la falta de experiencia de Rousseff será el objetivo principal de las críticas de sus oponentes en la carrera presidencial".
Para muchos analistas, la ex ministra también tiene que trabajar mejor su actitud en situaciones adversas, como las denuncias y las acusaciones de la campaña electoral.
A tres meses y medio de las elecciones, las encuestas publicadas hasta el momento señalan a Rousseff como la candidata mejor situada junto al candidato del Partido de la Social Democracia de Brasil (PSDB), el ex gobernador de Sao Paulo José Serra.
Según los sondeos, ambos cuentan con el 37% de la intención de voto.
BBC Mundo
La candidata oficialista del Partido de los Trabajadores de Brasil (PT), Dilma Rousseff, prometió este domingo continuar con los principales proyectos del actual presidente, Luiz Inácio "Lula" da Silva, pero "no para repetir, sino para progresar".
"No es casualidad que, después de un gran hombre, Brasil pueda ser gobernado por una mujer. Por una mujer que va a continuar con el Brasil de Lula pero con alma y corazón de mujer", afirmó Rousseff este domingo en una convención en la que fue nombrada oficialmente la candidata del PT para las elecciones presidenciales del 3 de octubre.
En ese evento también se presentó al diputado Michel Tremer, del Partido del Movimiento Democrático Brasileño (PMDB), como compañero de fórmula de Rousseff.
La corresponsal de la BBC Fabrícia Peixoto destacó que la candidata oficialista pronunció un discurso de unos 50 minutos en los que mencionó al presidente Lula unas 30 veces.
Según Peixoto, en Brasil "se apunta a la transferencia de popularidad de Lula a Dilma como el principal punto a favor de la candidata del PT en la disputa por el Palacio de Planalto" de Brasilia, que alberga el Poder Ejecutivo brasileño.
Pese a que el discurso de la ex ministra de Gobierno no estuvo caracterizado por las críticas a sus rivales, ésta aseguró que los presidentes anteriores a Lula gobernaron para "un tercio de la población" mientras que el resto era "carga y estorbo".
Guiño a las mujeres
El voto femenino representa algo más del 50% del electorado brasileño.
Según la corresponsal de la BBC, la convención del PT estuvo marcada por los homenajes a las brasileñas y la propia candidata Dilma Rousself plagó su discurso de guiños a las mujeres que eran mayoría en el auditorio en el que se celebró el acto.
"Llegó la hora de que una mujer gobierne el país, porque nadie mejor que una mujer para profundizar la mirada social", afirmó.
En ese sentido, aseguró que si gana las elecciones, "cuando alguien les pregunte qué quieren ser cuando crezcan, las niñas brasileñas podrán decir, igual que los niños o los obreros después de Lula, que quieren ser presidentas" del país.
El actual presidente también intervino en la convención donde dijo estar convencido de que su candidata ganará los comicios, si bien reconoció que no será fácil.
Además, Lula pidió que la campaña sea de "alto nivel para discutir ideas" y exhortó a sus adversarios a que no hagan "el juego sucio de estar inventando denuncias todos los días".
Desafíos
Dilma Rousseff, la ex ministra de Gobierno de Lula, de 62 años y pasado guerrillero y que nunca ha sido candidata a un cargo de elección popular, deberá converncer a los votantes de que es capaz de administrar el país, afirmó la corresponsal de la BBC.
Según la corresponsal de la BBC, "la falta de experiencia de Rousseff será el objetivo principal de las críticas de sus oponentes en la carrera presidencial".
Para muchos analistas, la ex ministra también tiene que trabajar mejor su actitud en situaciones adversas, como las denuncias y las acusaciones de la campaña electoral.
A tres meses y medio de las elecciones, las encuestas publicadas hasta el momento señalan a Rousseff como la candidata mejor situada junto al candidato del Partido de la Social Democracia de Brasil (PSDB), el ex gobernador de Sao Paulo José Serra.
Según los sondeos, ambos cuentan con el 37% de la intención de voto.