Queiroz dará minutos a Pepe y perdona a Deco
"Pepe está preparado para jugar. Pero todos sabemos que un jugador no sale de una lesión, larga y está listo para jugar 90 minutos, pero Pepe va a jugar", dijo Queiroz en una entrevista conjunta con medios internacionales que acompañan a la selección portuguesa.
Queiroz reconoció que un Mundial no es el torneo idóneo para ir dando minutos a un jugador para que vaya adquiriendo ritmo competitivo, pero aseguró que si Portugal se llega a adelantar en el partido ante Costa de Marfil de la primera jornada le hubiera llamado para que saltase al terreno de juego.
El seleccionador luso se mostró contrario a plantearse la posición final de España en el Grupo H para intentar evitarla en los octavos de final y que lo único que quiere es pasar de fase, sin tener en cuenta el rival. "Con tal de pasar a octavos no me importaba que España, Brasil, Alemania y Holanda hiciesen una selección con sus mejores jugadores para enfrentarse a nosotros", dijo.
El técnico quiso restar importancia a la sequía de 16 meses sin marcar con la selección de Crisiano Ronaldo y dijo que no ha llegado a hablar personalmente con el jugador del Real Madrid sobre este tema.
Recordó que ya entrenó a delanteros como Ruud Van Nistelroy o Ole Gunnar Solskjaer que muestran ese "orgullo y ganas de marcar goles", pero que los tantos llegan "naturalmente" y no hay que presionarles o agobiarles.
"Cuando las personas piensan que un jugador está perturbado por no marcar goles es todo lo contrario. Las cosas van a suceder naturalmente. Claro que queremos que Cristiano y los demás marquen, pero lo más importante es que el equipo gane, ya sea con él marcando o dando las asistencias", dijo.
El entrenador aseguró que no quedó dolido de las críticas vertidas por el centrocampista Deco sobre su posición en el campo y el modo de jugar del equipo, aunque reconoció que quedó "preocupado" en un primer momento por si detrás de éstas había algún problema de fondo, pero tras hablar con el jugador todo quedó resuelto.
"Entre mí y Deco y los demás jugadores existe una relación de amistad, solidaridad y confianza que no queda dañada (...) Él pidió disculpas y para mí es un punto y final en este tema", aseguró. Queiroz reconoció que el primer partido del Mundial, y en el caso de Portugal ante Costa de Marfil, normalmente se gestionan los riesgos, con menos jugadores implicados en el ataque, pero que esto cambiará en los próximos dos encuentros.
"En el segundo partido no hay mucho espacio para esperar, tenemos que hacer que sucedan cosas y no podemos quedarnos a su espera y en el tercer partido (ante Brasil) será todo abierto, un todo o nada", aseguró el técnico.
Queiroz afirmó que por la "especial relación y simpatía que Portugal siente hacia Brasil" espera que las dos selecciones lusófonas se clasifiquen a la siguiente fase. Ante la escasez de gol que está viviendo Portugal y los grandes especialistas en jugadas a balón parada, Queiroz dijo que trabajan a diario esta faceta del juego, que, aunque en los primeros partidos no haya sido fundamental, en su opinión, supondrá "entre el 30 y 40 por ciento del total de los tantos marcados en el Mundial".
"Nuestros mejores lanzadores trabajan esta faceta a diario con el mayor de los cuidados", dijo Queiroz, que aseguró que ya tiene establecido quién va a efectuar los lanzamientos en el equipo.
Queiroz reconoció que un Mundial no es el torneo idóneo para ir dando minutos a un jugador para que vaya adquiriendo ritmo competitivo, pero aseguró que si Portugal se llega a adelantar en el partido ante Costa de Marfil de la primera jornada le hubiera llamado para que saltase al terreno de juego.
El seleccionador luso se mostró contrario a plantearse la posición final de España en el Grupo H para intentar evitarla en los octavos de final y que lo único que quiere es pasar de fase, sin tener en cuenta el rival. "Con tal de pasar a octavos no me importaba que España, Brasil, Alemania y Holanda hiciesen una selección con sus mejores jugadores para enfrentarse a nosotros", dijo.
El técnico quiso restar importancia a la sequía de 16 meses sin marcar con la selección de Crisiano Ronaldo y dijo que no ha llegado a hablar personalmente con el jugador del Real Madrid sobre este tema.
Recordó que ya entrenó a delanteros como Ruud Van Nistelroy o Ole Gunnar Solskjaer que muestran ese "orgullo y ganas de marcar goles", pero que los tantos llegan "naturalmente" y no hay que presionarles o agobiarles.
"Cuando las personas piensan que un jugador está perturbado por no marcar goles es todo lo contrario. Las cosas van a suceder naturalmente. Claro que queremos que Cristiano y los demás marquen, pero lo más importante es que el equipo gane, ya sea con él marcando o dando las asistencias", dijo.
El entrenador aseguró que no quedó dolido de las críticas vertidas por el centrocampista Deco sobre su posición en el campo y el modo de jugar del equipo, aunque reconoció que quedó "preocupado" en un primer momento por si detrás de éstas había algún problema de fondo, pero tras hablar con el jugador todo quedó resuelto.
"Entre mí y Deco y los demás jugadores existe una relación de amistad, solidaridad y confianza que no queda dañada (...) Él pidió disculpas y para mí es un punto y final en este tema", aseguró. Queiroz reconoció que el primer partido del Mundial, y en el caso de Portugal ante Costa de Marfil, normalmente se gestionan los riesgos, con menos jugadores implicados en el ataque, pero que esto cambiará en los próximos dos encuentros.
"En el segundo partido no hay mucho espacio para esperar, tenemos que hacer que sucedan cosas y no podemos quedarnos a su espera y en el tercer partido (ante Brasil) será todo abierto, un todo o nada", aseguró el técnico.
Queiroz afirmó que por la "especial relación y simpatía que Portugal siente hacia Brasil" espera que las dos selecciones lusófonas se clasifiquen a la siguiente fase. Ante la escasez de gol que está viviendo Portugal y los grandes especialistas en jugadas a balón parada, Queiroz dijo que trabajan a diario esta faceta del juego, que, aunque en los primeros partidos no haya sido fundamental, en su opinión, supondrá "entre el 30 y 40 por ciento del total de los tantos marcados en el Mundial".
"Nuestros mejores lanzadores trabajan esta faceta a diario con el mayor de los cuidados", dijo Queiroz, que aseguró que ya tiene establecido quién va a efectuar los lanzamientos en el equipo.