Pueblos aymaras niegan que el Gobierno pretenda dividir a los indígenas y rechazan huelgas y marchas
La Paz, Abi
Pueblos aymaras del departamento de La Paz negaron el lunes que el Gobierno pretenda dividir a las organizaciones indígenas del país y rechazaron las huelgas o marcha en desmedro de la unidad política de las naciones originarias campesinas con el presidente Evo Morales.
"Que no se entienda mal y que no se diga ni se pronuncie que está dividiendo el Gobierno, porque el Gobierno es nuestro, por las venas del presidente Evo Morales corre sangre aymara", dijo Viviana Lima, mujer de pollera y dirigente de la comunidad Qhapac Uma Suyu, afiliado al Consejo Nacional de Ayllus y Markas del Qullasuyu (CONAMAQ).
Por el contrario, denunció que algunos dirigentes son influenciados por Organizaciones No Gubernamentales (ONGs), financiadas por la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID, por sus siglas en inglés), que desvirtúan la lucha y las reivindicaciones de los pueblos indígenas.
"Nosotros no vamos apoyar huelgas de hambre ni tampoco las marchas. Hoy en día no es para las marchas, no es para huelgas de hambre", sostuvo Lima.
A su turno, el mallku Gregorio Choque criticó a la Confederación de Pueblos Indígenas del Oriente de Bolivia (CIDOB) por organizar "unilateralmente" una marcha para que el proyecto de Ley Marco de Autonomías y Descentralización les otorgue facultades autonómicas "inconstitucionales".
Choque sostuvo que ese proyecto, próximo a ser analizado en la Asamblea Legislativa, fue elaborado en consenso y garantiza la inclusión de los territorios ancestrales como base fundamental de las autonomías indígenas originarias campesinas.
"Hay un proceso que hay que llevar adelante, no hay que precipitarse", dijo, al indicar que la CIDOB, que aglutina a 34 naciones originarias minoritarias de las tierras bajas, no tomaron en cuenta a los pueblos indígenas de la zona andina.
Hace una semana, la CIDOB comenzó una marcha desde la ciudad amazónica de Trinidad (Beni) con destino a La Paz, sede de los Órganos Ejecutivo y Legislativo, exigiendo una nueva delimitación territorial, tierras fiscales y que sus estatutos autonómicos sean aprobados por usos y costumbres y no mediante un referéndum, como manda la Constitución.
Los dirigentes de la comunidad Qhapac Uma Suyu denunciaron, también, que algunos dirigentes del CONAMAQ de forma "inconsulta" se sumaron a la huelga de hambre que, del pasado viernes hasta el sábado, protagonizaron los seis diputados de los pueblos originarios minoritarios en demanda de más escaños.
"Ratificamos nuestros rechazo a cualquier marcha o huelga de hambre inconsulta y arbitraria a cargo de algunas autoridades y manifestamos que los suyus de La Paz no participaremos de ninguna movilización si es que no es orgánica", indica una Resolución, firmada por las comunidades Qhapac Uma Suyu, Larikaja y Afrodescendientes.
No obstante, piden que el Gobierno convoque de inmediato a una mesa técnica para consensuar algunos aspectos pendientes en el proyecto de Ley Marco de Autonomías y Descentralización.
Pueblos aymaras del departamento de La Paz negaron el lunes que el Gobierno pretenda dividir a las organizaciones indígenas del país y rechazaron las huelgas o marcha en desmedro de la unidad política de las naciones originarias campesinas con el presidente Evo Morales.
"Que no se entienda mal y que no se diga ni se pronuncie que está dividiendo el Gobierno, porque el Gobierno es nuestro, por las venas del presidente Evo Morales corre sangre aymara", dijo Viviana Lima, mujer de pollera y dirigente de la comunidad Qhapac Uma Suyu, afiliado al Consejo Nacional de Ayllus y Markas del Qullasuyu (CONAMAQ).
Por el contrario, denunció que algunos dirigentes son influenciados por Organizaciones No Gubernamentales (ONGs), financiadas por la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID, por sus siglas en inglés), que desvirtúan la lucha y las reivindicaciones de los pueblos indígenas.
"Nosotros no vamos apoyar huelgas de hambre ni tampoco las marchas. Hoy en día no es para las marchas, no es para huelgas de hambre", sostuvo Lima.
A su turno, el mallku Gregorio Choque criticó a la Confederación de Pueblos Indígenas del Oriente de Bolivia (CIDOB) por organizar "unilateralmente" una marcha para que el proyecto de Ley Marco de Autonomías y Descentralización les otorgue facultades autonómicas "inconstitucionales".
Choque sostuvo que ese proyecto, próximo a ser analizado en la Asamblea Legislativa, fue elaborado en consenso y garantiza la inclusión de los territorios ancestrales como base fundamental de las autonomías indígenas originarias campesinas.
"Hay un proceso que hay que llevar adelante, no hay que precipitarse", dijo, al indicar que la CIDOB, que aglutina a 34 naciones originarias minoritarias de las tierras bajas, no tomaron en cuenta a los pueblos indígenas de la zona andina.
Hace una semana, la CIDOB comenzó una marcha desde la ciudad amazónica de Trinidad (Beni) con destino a La Paz, sede de los Órganos Ejecutivo y Legislativo, exigiendo una nueva delimitación territorial, tierras fiscales y que sus estatutos autonómicos sean aprobados por usos y costumbres y no mediante un referéndum, como manda la Constitución.
Los dirigentes de la comunidad Qhapac Uma Suyu denunciaron, también, que algunos dirigentes del CONAMAQ de forma "inconsulta" se sumaron a la huelga de hambre que, del pasado viernes hasta el sábado, protagonizaron los seis diputados de los pueblos originarios minoritarios en demanda de más escaños.
"Ratificamos nuestros rechazo a cualquier marcha o huelga de hambre inconsulta y arbitraria a cargo de algunas autoridades y manifestamos que los suyus de La Paz no participaremos de ninguna movilización si es que no es orgánica", indica una Resolución, firmada por las comunidades Qhapac Uma Suyu, Larikaja y Afrodescendientes.
No obstante, piden que el Gobierno convoque de inmediato a una mesa técnica para consensuar algunos aspectos pendientes en el proyecto de Ley Marco de Autonomías y Descentralización.