Presidente insta a petroleros a asumir reto de la industrialización de los hidrocarburos
Santa Cruz de la Sierra, Abi
Al resaltar el apoyo de los sindicatos y las organizaciones sociales al proceso de cambio que lleva adelante el Gobierno desde enero de 2006, el presidente Evo Morales instó a los trabajadores petroleros a asumir el reto de la industrialización de los hidrocarburos.
En un encuentro con los sindicatos del sector, el Jefe de Estado puntualizó que, una vez que se ha consolidado la nacionalización de los hidrocarburos, "ahora viene la etapa de la industrialización para que Bolivia obtenga mayores ganancias que contribuyan a su desarrollo y al mejoramiento de la calidad de vida de los ciudadanos".
"Será muy importante el aporte de los trabajadores para el cumplimiento de las metas trazadas en este sector", agregó.
Morales indicó que tras poco más de cuatro años al frente de la Administración de Bolivia está claro que el mejor camino para Bolivia es el de la recuperación de los recursos naturales.
Desde que se hizo cargo de la Presidencia en enero de 2006, el Gobierno ha nacionalizado los sectores de hidrocarburos, telecomunicaciones y electricidad paras que el Estado tome a su cargo la administración y regulación de estos sectores.
El Primer Mandatario enfatizó que esa política ha contribuido al mejoramiento de la economía nacional, al punto de haber incrementado las reservas monetarias internacionales y financiado programas de desarrollo social para los sectores más desprotegidos.
Anotó que hasta se puede analizar si las reservas internacionales podrían servir para invertir en el fortalecimiento de los emprendimientos nacionales.
Señaló que esos resultados deberían provocar una reflexión en los bolivianos para establecer quién se ha llevado todo el dinero de Bolivia por la privatización de las empresas estratégicas del Estado.
En 1997, el Gobierno encabezado entonces por el empresario minero Gonzalo Sánchez de Lozada dispuso la privatización de las principales empresas estatales en los sectores de las telecomunicaciones, transportes aéreos y ferroviarios, hidrocarburos, telecomunicaciones y electricidad con amplias facilidades para los inversionistas, que eran empresas trasnacionales.
Sánchez de Lozada bautizó a esa política como "capitalización de empresas estatales" en el entendido de que las trasnacionales iban a contribuir con capital para su fortalecimiento, pero en los hechos sangraron las economías de esas entidades.
El Presidente Morales enfatizó que la política de recuperación de los recursos naturales y de desarrollo social ha impulsado a la derecha, las oligarquías y a los neoliberales a desarrollar ahora acciones para obstaculizar la marcha del Gobierno.
"Como han fracasado con sus estrategias de desestabilizar al Gobierno con golpes de Estado y otras medidas, ahora pretenden dividir a los movimientos sociales a través de Fundaciones y Organismos No Gubernamentales que instan a algunos sectores a exigir demandas que están fuera de las Leyes y la Constitución", anotó.
Dijo que por ejemplo una de esas demandas es que todas las tierras fiscales y concesiones madereras que fueron recuperadas pasen a pequeños grupos de los movimientos indígenas de Bolivia.
El Primer Mandatario insistió en que "Al no encontrar argumentos, la derecha pretende usar ahora a los dirigentes sociales para obstaculizar el proceso de cambio y las profundas transformaciones estructurales".
Señaló que frente a esas acciones, los movimientos sociales que apoyan el proceso deben cerrar filas e impedir su división con la elección de dirigentes que conduzcan con transparencia a los sindicatos.
Destacó que el Gobierno, al igual que las organizaciones sociales está imbuido de un sentimiento anti imperialista y de defensa de la soberanía nacional, lo que fortalece su estructura.
Al resaltar el apoyo de los sindicatos y las organizaciones sociales al proceso de cambio que lleva adelante el Gobierno desde enero de 2006, el presidente Evo Morales instó a los trabajadores petroleros a asumir el reto de la industrialización de los hidrocarburos.
En un encuentro con los sindicatos del sector, el Jefe de Estado puntualizó que, una vez que se ha consolidado la nacionalización de los hidrocarburos, "ahora viene la etapa de la industrialización para que Bolivia obtenga mayores ganancias que contribuyan a su desarrollo y al mejoramiento de la calidad de vida de los ciudadanos".
"Será muy importante el aporte de los trabajadores para el cumplimiento de las metas trazadas en este sector", agregó.
Morales indicó que tras poco más de cuatro años al frente de la Administración de Bolivia está claro que el mejor camino para Bolivia es el de la recuperación de los recursos naturales.
Desde que se hizo cargo de la Presidencia en enero de 2006, el Gobierno ha nacionalizado los sectores de hidrocarburos, telecomunicaciones y electricidad paras que el Estado tome a su cargo la administración y regulación de estos sectores.
El Primer Mandatario enfatizó que esa política ha contribuido al mejoramiento de la economía nacional, al punto de haber incrementado las reservas monetarias internacionales y financiado programas de desarrollo social para los sectores más desprotegidos.
Anotó que hasta se puede analizar si las reservas internacionales podrían servir para invertir en el fortalecimiento de los emprendimientos nacionales.
Señaló que esos resultados deberían provocar una reflexión en los bolivianos para establecer quién se ha llevado todo el dinero de Bolivia por la privatización de las empresas estratégicas del Estado.
En 1997, el Gobierno encabezado entonces por el empresario minero Gonzalo Sánchez de Lozada dispuso la privatización de las principales empresas estatales en los sectores de las telecomunicaciones, transportes aéreos y ferroviarios, hidrocarburos, telecomunicaciones y electricidad con amplias facilidades para los inversionistas, que eran empresas trasnacionales.
Sánchez de Lozada bautizó a esa política como "capitalización de empresas estatales" en el entendido de que las trasnacionales iban a contribuir con capital para su fortalecimiento, pero en los hechos sangraron las economías de esas entidades.
El Presidente Morales enfatizó que la política de recuperación de los recursos naturales y de desarrollo social ha impulsado a la derecha, las oligarquías y a los neoliberales a desarrollar ahora acciones para obstaculizar la marcha del Gobierno.
"Como han fracasado con sus estrategias de desestabilizar al Gobierno con golpes de Estado y otras medidas, ahora pretenden dividir a los movimientos sociales a través de Fundaciones y Organismos No Gubernamentales que instan a algunos sectores a exigir demandas que están fuera de las Leyes y la Constitución", anotó.
Dijo que por ejemplo una de esas demandas es que todas las tierras fiscales y concesiones madereras que fueron recuperadas pasen a pequeños grupos de los movimientos indígenas de Bolivia.
El Primer Mandatario insistió en que "Al no encontrar argumentos, la derecha pretende usar ahora a los dirigentes sociales para obstaculizar el proceso de cambio y las profundas transformaciones estructurales".
Señaló que frente a esas acciones, los movimientos sociales que apoyan el proceso deben cerrar filas e impedir su división con la elección de dirigentes que conduzcan con transparencia a los sindicatos.
Destacó que el Gobierno, al igual que las organizaciones sociales está imbuido de un sentimiento anti imperialista y de defensa de la soberanía nacional, lo que fortalece su estructura.