Grondona dice que la historia de los barras comenzó en 1986

Pretoria, Olé
"Yo viajo como parte de un grupo de 43 y somos la hinchada oficial de la Selección. Es mentira que estamos bancados por el Gobierno. Y tampoco por la AFA. Nosotros tenemos el arreglo directo con Maradona y Bilardo”, reconoció hace unos días Ramón Ortiz, uno de los barras de Boca que viajó en el avión de la Selección. Desde las puertas del búnker para adentro lo desmintieron: “Diego y yo no tenemos relación con la barra. Ni sabíamos que venían”, se defendió Carlos Bilardo. "No está mi viejo, imaginate si voy a traer a otro. No tengo relación con nadie y si ese personaje dije que yo lo traje, te juro que no tengo nada que ver con nadie. Y si quiere fama, decile que vaya a laburar", se desligó Maradona. Pero uno de las tres patas dijo algo totalmente diferente. Nada menos que el de más alto rango, Julio Grondona: "Esta historia nace en el 86".

Desligados del tema los dos responsables que el barra había mencionado, las acusaciones y responsabilidades cayeron sobre el titular de la AFA. Grondona fue denunciado por la organización Familiares de Víctimas de la Violencia en el Fútbol Argentino (Favifa) por una presunta responsabilidad en el viaje de los barras en el mismo avión que el plantel. Hoy, Grondona, cansado del tema de los barras le contó a Radio Mitre que “las relaciones que pudieran ser con Bilardo y Maradona es de hace 20 o 30 años, porque esta historia nace en el 86. Desde el 86, no desde el partido con Venezuela esta situación se viene dando”. Además agregó que “no es un problema de la AFA, terminemos, hablemos en serio, es un problema de la sociedad, de la legislación. Hace 25 años que estamos en esto, no es un día”.

Grondona, habló sobre la posibilidad de impedir el viaje de los barras y explicó que “son cuestiones que son muy difíciles. Tan difíciles son, que no hay ningún medio de las autoridades correspondientes a los gobierno de turno y se los puede trabar no dándoles el pasaporte. Yo llevo 31 años en la AFA, en alguna oportunidad, ¿pudieron probar que yo haya atendido a esa gente? Yo lo único que he hecho con esa gente fue aguantarla debajo de la AFA, haciendo escraches si no le gusta una cosa, si no le gusta la otra, pero jamás he tranzado, y jamás los he conocido, no tengo trato”. ¿Cuál es la solución para Grondona? “Hay una sola salida, es irse”, expresó. Pero eso sería perder la batalla frente a los barras. Por último contó que “la gente que quiso terminarlo, terminó mal”. Una muestra más del poder que tienen las barras en el fútbol argentino. Así seguirá todo, oscuro.