Vicepresidente: oposición a ley transitoria de autonomías busca confrontación
El vicepresidente Alvaro García Linera denunció el sábado por confrontacional la "pose" política asumida por los gobernadores electos de los departamentos de Santa Cruz, Beni y Pando, de tajante rechazo a la Ley de Transición a las Autonomías que la Cámara de Diputados pondrá en vía de promulgación el sábado en Bolivia.
"Esas son poses políticas. Otra vez es el grupo de los confrontadores del país. En Santa Cruz, ayer (sábado), lo ha demostrado el pueblo: se convocó a un cabildo de un millón (de personas, a un mitin de protesta y rechazo a la ley que prescribe, además de la implantación de las autonomías departamentales, la suscripción de autoridades electas y, si fuera del caso, su procesamiento y revocación de mandato) y no había el millón, no había 100.000, no había 10.000", afirmó en una improvisada conferencia de prensa en La Paz.
Organizaciones civiles y gobernadores electos de Santa Cruz, Rubén Costas; Beni, Ernesto Suárez y Tarija, Mario Cossio se declararon en "estado de emergencia" antes la aprobación de la ley.
En un mitin, el viernes en Santa Cruz, Costas dijo que la Ley Transitoria de Autonomías le importaba, simplemente, "un bledo".
"Nos importa un bledo la ley corta, nos importa un bledo la ley de tránsfugas o transitoria, nos importa un bledo los decretos de ley, de esa dictadura disfrazada en democracia", se expidió el dirigente ante centenas de personas congregadas en la Plaza 24 de Septiembre.
Preguntado sobre el juramento que Costas realizó al cargo, en público y en medio de sus adláteres, lo que fue interpretado como un aviso de su decisión de no asistir al acto de juramentación, por parte del presidente Evo Morales, pautado para el 30 de mayo en La Paz, el Vicepresidente encontró en él trazas de confrontación política.
"No sé legalmente qué significará pero yo lo asumo, simplemente, como una actitud de confrontación y, frente a la confrontación, el Gobierno responde con la autonomía, con la legalidad, la transparencia, y quien tiene miedo a la transparencia y quien le tiene miedo a la autonomía, se vuelve un provocador y nosotros ante la provocación otra vez respondemos con ley, legalidad, transparencia y tranquilidad", afirmó al asegurar que, pese a todo, el gobierno de Morales garantiza la implantación de las autonomías.
"Son poses políticas de gente que todavía quiere seguir confrontando, pero Bolivia entera, Santa Cruz entera, quieren tranquilidad, quieren trabajo y quieren autonomía", añadió.
Fiero opositor, también a la Ley de Transición a las Autonomías, Costas, que entre 2006 y 2009 ejerció la Prefectura de Santa Cruz, enfrenta, actualmente, un proceso por malversación de más de 10 millones de bolivianos utilizados en la realización del inconstitucional referéndum autonómico en 2008.
También de verbo desenfadado, el presidente del político empresarial Comité Pro Santa Cruz, Luis Núñez, lo propio radical opositor a Morales, calificó de "sucia, trucha, sin vergüenza y cretina" la Ley Transitoria de Autonomías.
De acuerdo con García Linera la Ley de Transición a las Autonomías apunta a proteger los recursos públicos de "los pícaros y ladrones".
Insistió que, a contrapelo de una versión que como reguero de pólvora se difundió en el país, la Ley determina la suspensión temporal de un gobernador o alcalde sólo en caso de formalización penal y la suspensión definitiva en la eventualidad que una indagación dejara evidencias incontrastables de corrupción.
También se dijo extrañado que de 337 alcaldes y 9 gobernadores electos sólo Costas, Cossio y Suárez se hayan quejado con tanta acidez contra la ley.
"Hay un artículo que establece que, como a cualquier ciudadano, tiene que enjuiciarse a quien ha cometido delito, pero esto no pone en duda, no va a obstaculizar que el 30 de mayo los gobernadores elegidos juren, como se debe, ante las instituciones como gobernadores", explicó.
Denunció que los opositores a la Ley de Transición a las Autonomías intentan evadir el camino de la Constitución para dotar a las regiones bolivianas de un régimen de independencia política y administrativa.
"En verdad no quieren autonomía. La autonomía para ellos fue un pretexto para proteger sus haciendas, sus negocios personales y el Gobierno, en cambio, está viabilizando lo que la gente quería, la gente de a pie, el cruceño, el beniano de a pie, lo que quería", afirmó.