Temblor financiero: Europa aprobó plan finaciero por 500 mil millones de euros
BRUSELAS.- En lo que se transformó en un hecho histórico, la Unión Europea puso en un mecanismo de asistencia financiera para ayudar a los países de la zona con dificultades para pagar su deuda pública.
Se prevé un sistema de garantías y avales para movilizar créditos por hasta 720.000 millones de euros, que tendrían tres fuentes de procedencia: los Estados, la Comisión Europea y el Fondo Monetario Internacional (FMI). Aunque éste último actor no está confirmado dentro del esquema.
Tras una extensa reunión de los ministros europeos de Economía y Finanzas se acordó un mecanismo financiero sin precedentes para la zona euro cercano a los 500.000 millones de euros susceptible de devolver la confianza en la moneda única antes de la apertura de los mercados mundiales este lunes.
A medida que iban pasando las horas del domingo, la movilización internacional se intensificaba para alcanzar el acuerdo que finalmente se logró para evitar una crisis de deuda soberana en la Eurozona, devolviendo la calma a las bolsas, que esta semana se derrumbaron.
Fuentes diplomáticas avanzaron en un primer momento que el monto que abordaban los ministros para poner a disposición de los países de la Eurozona con riesgo de quiebra sería de 500.000 millones de euros (638.000 millones de dólares). No obstante, poco después esa suma fue elevada a 600.000 millones de euros (765.000 millones de dólares), según otras fuentes. Aunque finalmente, según comunicaron, el acuerdo cerró en la primer suma difundida.
Este plan sin precedentes es todavía susceptible de ser modificado por los ministros de Finanzas de los 27, determinados a tomar una decisión sólida y creíble, capaz de atajar la crisis de confianza en la Eurozona que se originó con la crisis presupuestaria griega y el riesgo de contagio a países fuertemente endeudados como España y Portugal.
Conversaciones . La canciller alemana, Angela Merkel, y el presidente francés, Nicolas Sarkozy, constataron durante una conversación telefónica su "acuerdo completo" sobre las medidas que fueron anunciadas en Bruselas, según el palacio del Elíseo, que no entró en detalles.
Ambos dirigentes departieron separadamente por teléfono con el presidente estadounidense, Barack Obama, quien pidió medidas "enérgicas" a la Unión Europea (UE) para dar una respuesta eficaz a los "desórdenes actuales" que afectan a los mercados.
La reunión fue convocada tras la cumbre del Eurogrupo realizada el viernes último en la que los 16 jefes de Estado estuvieron de acuerdo en defender coordinadamente la "estabilidad, unidad e integridad" de la unión monetaria a cualquier precio.
La crisis de la deuda en Grecia ya comenzó a afectar a otros países, como Portugal, España o Italia, y el nerviosismo de los inversores, ante la predicción de una bancarrota inevitable dentro de la zona, condujo esta semana a caídas imparables en las bolsas.
Hasta la fecha, sólo existía un sistema de ayuda europeo para apoyar a las naciones fuera de la eurozona, que está dotado con 50.000 millones de euros. Al respecto, analistas estimaron que el nuevo mecanismo de la UE tiene que contar con una dotación mucho más generosa para poder ser creíble.
Rechazo . Gran Bretaña anticipó su rechazo a participar en el fondo de urgencia europeo de ayuda a los países de la Eurozona en dificultad, según indicaron algunos diplomáticos de ese país a la agencia AFP.
El rechazo de Londres podría obligar a la Eurozona a crear un mecanismo de préstamos garantizados sólo por los países que adoptaron el euro.
Se prevé un sistema de garantías y avales para movilizar créditos por hasta 720.000 millones de euros, que tendrían tres fuentes de procedencia: los Estados, la Comisión Europea y el Fondo Monetario Internacional (FMI). Aunque éste último actor no está confirmado dentro del esquema.
Tras una extensa reunión de los ministros europeos de Economía y Finanzas se acordó un mecanismo financiero sin precedentes para la zona euro cercano a los 500.000 millones de euros susceptible de devolver la confianza en la moneda única antes de la apertura de los mercados mundiales este lunes.
A medida que iban pasando las horas del domingo, la movilización internacional se intensificaba para alcanzar el acuerdo que finalmente se logró para evitar una crisis de deuda soberana en la Eurozona, devolviendo la calma a las bolsas, que esta semana se derrumbaron.
Fuentes diplomáticas avanzaron en un primer momento que el monto que abordaban los ministros para poner a disposición de los países de la Eurozona con riesgo de quiebra sería de 500.000 millones de euros (638.000 millones de dólares). No obstante, poco después esa suma fue elevada a 600.000 millones de euros (765.000 millones de dólares), según otras fuentes. Aunque finalmente, según comunicaron, el acuerdo cerró en la primer suma difundida.
Este plan sin precedentes es todavía susceptible de ser modificado por los ministros de Finanzas de los 27, determinados a tomar una decisión sólida y creíble, capaz de atajar la crisis de confianza en la Eurozona que se originó con la crisis presupuestaria griega y el riesgo de contagio a países fuertemente endeudados como España y Portugal.
Conversaciones . La canciller alemana, Angela Merkel, y el presidente francés, Nicolas Sarkozy, constataron durante una conversación telefónica su "acuerdo completo" sobre las medidas que fueron anunciadas en Bruselas, según el palacio del Elíseo, que no entró en detalles.
Ambos dirigentes departieron separadamente por teléfono con el presidente estadounidense, Barack Obama, quien pidió medidas "enérgicas" a la Unión Europea (UE) para dar una respuesta eficaz a los "desórdenes actuales" que afectan a los mercados.
La reunión fue convocada tras la cumbre del Eurogrupo realizada el viernes último en la que los 16 jefes de Estado estuvieron de acuerdo en defender coordinadamente la "estabilidad, unidad e integridad" de la unión monetaria a cualquier precio.
La crisis de la deuda en Grecia ya comenzó a afectar a otros países, como Portugal, España o Italia, y el nerviosismo de los inversores, ante la predicción de una bancarrota inevitable dentro de la zona, condujo esta semana a caídas imparables en las bolsas.
Hasta la fecha, sólo existía un sistema de ayuda europeo para apoyar a las naciones fuera de la eurozona, que está dotado con 50.000 millones de euros. Al respecto, analistas estimaron que el nuevo mecanismo de la UE tiene que contar con una dotación mucho más generosa para poder ser creíble.
Rechazo . Gran Bretaña anticipó su rechazo a participar en el fondo de urgencia europeo de ayuda a los países de la Eurozona en dificultad, según indicaron algunos diplomáticos de ese país a la agencia AFP.
El rechazo de Londres podría obligar a la Eurozona a crear un mecanismo de préstamos garantizados sólo por los países que adoptaron el euro.