Sindicatos confirman que convenio COB-Gobierno no fue firmado sólo por Pedro Montes
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Representantes de varios sindicatos afiliados a la Central Obrera Boliviana (COB) confirmaron el jueves que el convenio de Panduro, firmado con el Gobierno, no sólo fue rubricado y decidido por el principal dirigente de la matriz de los trabajadores bolivianos, Pedro Montes, sino por determinación orgánica.
La COB y el Gobierno firmaron el pasado martes un convenio que abrió un cuarto intermedio a la marcha que protagonizaban dirigentes sindicales desde la localidad andina de Caracollo hacia La Paz, en demanda de una nueva Ley de pensiones y un incremento mayor al 5% aprobado por el Ejecutivo.
"Han escuchado de la propia boca de los ejecutivos que se trabaja orgánicamente, nadie tiene una reunión privada", dijo Montes, tras una nueva reunión con el presidente Evo Morales en Palacio de Gobierno, a la que asistieron más de 30 delegados de diversos sectores laborales.
A su juicio los representantes de los sindicatos mineros, fabriles, maestros y de salud resolvieron el pasado martes suspender la marcha que iniciaron el lunes en la población de Caracollo y que pretendía llegar a La Paz, después de una nueva oferta del Gobierno para aprobar la Ley de Pensiones y para aplicar una formula inversamente proporcional al incremento salarial del 5%.
"Pedro Montes se debe a las organizaciones sindicales y a las organizaciones afiliadas a la COB", recalcó el dirigente.
En esa dirección, Montes convocó a todas las organizaciones laborales a continuar el diálogo abierto con el Gobierno para alcanzar nuevos acuerdos y atender las demandas que tiene los diferentes sectores.
"Esperamos su participación, esperamos su aporte para que así los trabajadores del país sean beneficiados", remarcó.
La posición del líder de la COB fue respaldada por el representante del magisterio urbano, Jorge Baldivieso, quien aseveró que "prácticamente", el Gobierno atendió los puntos esenciales de las demandas de la COB.
"Y creemos que hay muy buenas perspectivas para llegar a una solución en el caso específico del magisterio urbano", acotó.
Baldivieso destacó también la propuesta gubernamental para que los trabajadores se jubilen a partir de los 58 años.
En esa línea, el representante del sector de salud pública, José Luis Delgado, lamentó la "posición radical" de algunos trabajadores que, a su juicio, lejos de encontrar soluciones buscan agudizar los conflictos.
"El ampliado nacional de los trabajadores en salud del país ayer (miércoles) ha aceptado porque se establecen puntos centrales cuando se dice que toda ley que se va a emitir tiene que ser en base a consensos con nuestra Central Obrera Boliviana y los trabajadores", dijo.
Coincidió con esa posición el secretario ejecutivo de la Federación Sindical de Trabajadores Mineros de Bolivia, Guido Midma, que aseguró que se debe acatar de manera disciplinada y orgánica las resoluciones que logra la COB en las mesas de diálogo con el Ejecutivo.
"La federación de mineros no va aceptar que se esté mellando a nuestra entidad matriz, al contrario llama a la reflexión a esas otras instituciones que automáticamente se están marginando para trabajar orgánicamente con la central obrera", manifestó.
René Alvino, dirigente de los fabriles, sector que se mantiene movilizado y que rechazó el acuerdo COB-Gobierno, aseguró que ese gremio no está al margen de la COB, aunque reconoció que existen "dificultades".
