Morales se pone al frente para desactivar protestas
LA PAZ, Agencias
El presidente Evo Morales dejó de lado otros compromisos y se puso al mando de negociaciones para frenar una ola de protestas que acorralan a su gobierno tras la muerte el fin de semana de dos manifestantes en choques con la policía.
El mandatario desactivó el lunes la amenaza de un paro en una región fronteriza en negociaciones que él presidió y el martes se reunía con líderes de la protesta que derivó en la muerte de dos estudiantes en una localidad al norte de La Paz.
Evo Morales
En tanto, la huelga general convocada desde el lunes por la Central Obrera Boliviana (COB) por mejores salarios y otras demandas no tuvo acogida y se reduce a una marcha hacia La Paz de los mayores sindicatos que crece en número. Sólo algunas escuelas públicas acatan el paro, según informes sindicales y del gobierno.
Morales afronta tres frentes de conflicto : la marcha de la COB, el conflicto de Caranavi que derivó en dos muertes por una planta de cítricos y la amenaza de una marcha indígena por supuestos incumplimientos del gobierno.
Poco más de medio centenar de obreros mantienen una huelga de hambre desde hace diez días por un incremento salarial superior al 5% decretado.
El gobierno ofertó a los sindicatos flexibilizar la ley de jubilaciones pero dijo que no modificará el tope del 5% de aumento salarial, informó el martes el ministro de Hacienda Luis Arce.
No hay más dinero para aumentar salarios porque la prioridad del gobierno es la inversión de empresas públicas, dijo Arce.
El fondo de las protestas es por mejores salarios pero también por una reactivación productiva para generar empleo algo en lo que el gobierno no fue efectivo. El aumento que aplica el Ejecutivo a maestros, funcionarios, policías y militares que dependen del erario nacional, es también aplicado por empresas privadas.
Casi a diario Morales hace apariciones públicas en concentraciones transmitidas por medios estatales, pero estos días tuvo que modificar su agenda para dar prioridad a los asuntos domésticos. En las últimas semanas estuvo más ocupado en asuntos internacionales.
El conflicto de Caranavi fue un duro golpe porque fue protagonizado por seguidores del mandatario quienes el domingo quemaron la bandera del partido oficialista en señal de repudio después de la arremetida policial.
Morales saltó a la política desde los combativos sindicatos cocaleros que bloqueaban carreteras para exigir atención a sus demandas y el mandatario siempre rechazó la respuesta policial de los gobiernos de turno a la protestas sociales.
El presidente Evo Morales dejó de lado otros compromisos y se puso al mando de negociaciones para frenar una ola de protestas que acorralan a su gobierno tras la muerte el fin de semana de dos manifestantes en choques con la policía.
El mandatario desactivó el lunes la amenaza de un paro en una región fronteriza en negociaciones que él presidió y el martes se reunía con líderes de la protesta que derivó en la muerte de dos estudiantes en una localidad al norte de La Paz.
Evo Morales
En tanto, la huelga general convocada desde el lunes por la Central Obrera Boliviana (COB) por mejores salarios y otras demandas no tuvo acogida y se reduce a una marcha hacia La Paz de los mayores sindicatos que crece en número. Sólo algunas escuelas públicas acatan el paro, según informes sindicales y del gobierno.
Morales afronta tres frentes de conflicto : la marcha de la COB, el conflicto de Caranavi que derivó en dos muertes por una planta de cítricos y la amenaza de una marcha indígena por supuestos incumplimientos del gobierno.
Poco más de medio centenar de obreros mantienen una huelga de hambre desde hace diez días por un incremento salarial superior al 5% decretado.
El gobierno ofertó a los sindicatos flexibilizar la ley de jubilaciones pero dijo que no modificará el tope del 5% de aumento salarial, informó el martes el ministro de Hacienda Luis Arce.
No hay más dinero para aumentar salarios porque la prioridad del gobierno es la inversión de empresas públicas, dijo Arce.
El fondo de las protestas es por mejores salarios pero también por una reactivación productiva para generar empleo algo en lo que el gobierno no fue efectivo. El aumento que aplica el Ejecutivo a maestros, funcionarios, policías y militares que dependen del erario nacional, es también aplicado por empresas privadas.
Casi a diario Morales hace apariciones públicas en concentraciones transmitidas por medios estatales, pero estos días tuvo que modificar su agenda para dar prioridad a los asuntos domésticos. En las últimas semanas estuvo más ocupado en asuntos internacionales.
El conflicto de Caranavi fue un duro golpe porque fue protagonizado por seguidores del mandatario quienes el domingo quemaron la bandera del partido oficialista en señal de repudio después de la arremetida policial.
Morales saltó a la política desde los combativos sindicatos cocaleros que bloqueaban carreteras para exigir atención a sus demandas y el mandatario siempre rechazó la respuesta policial de los gobiernos de turno a la protestas sociales.