Kenneth Bell: "UE y América Latina en 10 años de cumbres pasaron de la teoría a la acción"
La Paz, Abi
La Unión Europea, América Latina y el Caribe en 10 años de cumbres pasaron de la teoría a la acción y cooperación concreta, aseguró el lunes el embajador de ese organismo europeo en Bolivia, Kenneth Bell.
El diplomático escocés, que ofreció una rueda de prensa junto al embajador de España en Bolivia, Ramón Santos, explicó en los alcances de la VI Cumbre de presidentes y jefes de Estado de la Unión Europea y América Latina y el Caribe (UE-ALC), que se realizará en Madrid el miércoles 18 de mayo.
"Eran unas reuniones que comenzaron, hace 10 años, en debates más generales, pero ahora pasamos realmente a planos de acción y cooperación concreta entre nuestras dos regiones que creemos son aliados naturales en este mundo globalizado", remarcó.
Su colega español coincidió en que a medida que pasan las cumbres de la UE-ALC, ambas regiones "van haciéndose cada vez más socios globales" para encarar temas de preocupación mundial, tales como la crisis financiera internacional y el cambio climático.
"La Unión Europea y America Latina y el Caribe significan un tercio del número de Estados que hay en el mundo. Somos aliados naturales por muchas razones, pero básicamente hay una serie de vínculos históricos, culturales, económicos que hacen que estas dos regiones tengan una tendencia a entenderse y hablar cada vez de más cosas", argumentó el diplomático español
Las declaraciones de Bell y Santos, coincidieron con las palabras del presidente de España y de la UE, José Luis Rodríguez Zapatero, que apostó el lunes en Madrid por la creación de una "Unión Latinoamericana", como un factor de equilibrio ante los "riesgos" de la globalización.
"Sería una gran noticia que pudiéramos ver en un futuro inmediato una cumbre entre la UE y la Unión Latinoamericana", dijo el mandatario.
En ese marco, se espera que los presidentes y jefes de Estado europeos y latinoamericanos, reunidos en Madrid, tengan un mayor diálogo sobre cuestiones macroeconómicas y financieras, medioambientales y energía, ciencia e investigación, cambio climático, entre otros, que terminen en proyectos de desarrollo biregional.
La Unión Europea, América Latina y el Caribe en 10 años de cumbres pasaron de la teoría a la acción y cooperación concreta, aseguró el lunes el embajador de ese organismo europeo en Bolivia, Kenneth Bell.
El diplomático escocés, que ofreció una rueda de prensa junto al embajador de España en Bolivia, Ramón Santos, explicó en los alcances de la VI Cumbre de presidentes y jefes de Estado de la Unión Europea y América Latina y el Caribe (UE-ALC), que se realizará en Madrid el miércoles 18 de mayo.
"Eran unas reuniones que comenzaron, hace 10 años, en debates más generales, pero ahora pasamos realmente a planos de acción y cooperación concreta entre nuestras dos regiones que creemos son aliados naturales en este mundo globalizado", remarcó.
Su colega español coincidió en que a medida que pasan las cumbres de la UE-ALC, ambas regiones "van haciéndose cada vez más socios globales" para encarar temas de preocupación mundial, tales como la crisis financiera internacional y el cambio climático.
"La Unión Europea y America Latina y el Caribe significan un tercio del número de Estados que hay en el mundo. Somos aliados naturales por muchas razones, pero básicamente hay una serie de vínculos históricos, culturales, económicos que hacen que estas dos regiones tengan una tendencia a entenderse y hablar cada vez de más cosas", argumentó el diplomático español
Las declaraciones de Bell y Santos, coincidieron con las palabras del presidente de España y de la UE, José Luis Rodríguez Zapatero, que apostó el lunes en Madrid por la creación de una "Unión Latinoamericana", como un factor de equilibrio ante los "riesgos" de la globalización.
"Sería una gran noticia que pudiéramos ver en un futuro inmediato una cumbre entre la UE y la Unión Latinoamericana", dijo el mandatario.
En ese marco, se espera que los presidentes y jefes de Estado europeos y latinoamericanos, reunidos en Madrid, tengan un mayor diálogo sobre cuestiones macroeconómicas y financieras, medioambientales y energía, ciencia e investigación, cambio climático, entre otros, que terminen en proyectos de desarrollo biregional.