Fútbol boliviano: Aurora perdió con The Strongest con un gol discutible
La Paz, Erbol
A The Strongest no le sobró nada para vencer (2-1) a un Aurora mejor plantado, pero conservador y que al final terminó ofuscado porque su cuerpo técnico y jugadores reclamaron el gol del triunfo de los atigrados.
Esta vez, el equipo atigrado extrañó al goleador Vásuqez, porque di Cosmo y López dieron un concierto de errores ofensivos y desperdiciaron el trabajo de un medio terreno intermintente, lo que obligó al entrenador Coelho a apelar a todo lo que tenía en el banco.
Aurora que fue vapuleado por el local en el primer cuarto de hora fue ajustando las marcas, frenó al medio terreno aurinegro y dejó que López y Di Cosmo tropezaran en sus propios errores. Al finalizar el primer tiempo llegó al gol en una distracción defensiva del local, que aprovechó bien Saucedo para empalmar de media vuelta y superar al portero Fernández a los 45 minutos.
Como ocurre con todos los equipos visitantes, Aurora se durmió en el complemento, trató de formar dos líneas de cuatro para frenar al rival, pero mostró fisuras en su última línea, de manera que todo el peso del encuentro recayó sobre las espaldas del guardameta Dulcich.
No obstante ello, la visita tuvo tres oportunidades claras de anotar a través de Saucedo y Reynoso y en cada una de ellas apareció la mano salvadora del guardameta Fernández, una de las grandes figuras del partido.
Obligado por las circunstancias, el entrenador de The Strongest Mandó al campo de juego a Menacho, quien expuso voluntad, a Nelvin Soliz, que le cambió la cara a su equipo y, finalmente a Darwin Peña.
Palacios a los 32 minutos en un descuido defensivo de Aurora marcó el empate con remate desde el área chica. Luego, cuando el visitante atinaba sólo a defenderse llegó el gol de la victoria, luego de un pase de Menacho a Di Cosmo que definió con frialdad ante la salida del portero.
En esa jugada nació la protesta de la visita y la posterior expulsión del entrenador Zamora y el volante Arévalo, de manrea que los últimos minutos fueron de simple cumplimiento porque mientras el balón corría en el terreno, la banca de Aurora era una bronca completa.
A The Strongest no le sobró nada para vencer (2-1) a un Aurora mejor plantado, pero conservador y que al final terminó ofuscado porque su cuerpo técnico y jugadores reclamaron el gol del triunfo de los atigrados.
Esta vez, el equipo atigrado extrañó al goleador Vásuqez, porque di Cosmo y López dieron un concierto de errores ofensivos y desperdiciaron el trabajo de un medio terreno intermintente, lo que obligó al entrenador Coelho a apelar a todo lo que tenía en el banco.
Aurora que fue vapuleado por el local en el primer cuarto de hora fue ajustando las marcas, frenó al medio terreno aurinegro y dejó que López y Di Cosmo tropezaran en sus propios errores. Al finalizar el primer tiempo llegó al gol en una distracción defensiva del local, que aprovechó bien Saucedo para empalmar de media vuelta y superar al portero Fernández a los 45 minutos.
Como ocurre con todos los equipos visitantes, Aurora se durmió en el complemento, trató de formar dos líneas de cuatro para frenar al rival, pero mostró fisuras en su última línea, de manera que todo el peso del encuentro recayó sobre las espaldas del guardameta Dulcich.
No obstante ello, la visita tuvo tres oportunidades claras de anotar a través de Saucedo y Reynoso y en cada una de ellas apareció la mano salvadora del guardameta Fernández, una de las grandes figuras del partido.
Obligado por las circunstancias, el entrenador de The Strongest Mandó al campo de juego a Menacho, quien expuso voluntad, a Nelvin Soliz, que le cambió la cara a su equipo y, finalmente a Darwin Peña.
Palacios a los 32 minutos en un descuido defensivo de Aurora marcó el empate con remate desde el área chica. Luego, cuando el visitante atinaba sólo a defenderse llegó el gol de la victoria, luego de un pase de Menacho a Di Cosmo que definió con frialdad ante la salida del portero.
En esa jugada nació la protesta de la visita y la posterior expulsión del entrenador Zamora y el volante Arévalo, de manrea que los últimos minutos fueron de simple cumplimiento porque mientras el balón corría en el terreno, la banca de Aurora era una bronca completa.