Ecuador: Correa "no cederá" ante protesta indígena
Paúl Mena Erazo, Ecuador
"No cederé a las presiones de un grupo, por importante que se crea". Así respondió el presidente de Ecuador, Rafael Correa, a las protestas indígenas en contra del proyecto de Ley de Aguas que incluyeron el bloqueo de vías en tres provincias de la Sierra ecuatoriana.
Mientras la Asamblea Nacional se dispone a aprobar el proyecto en los próximos días, la dirigencia indígena ha convocado a sus bases a salir a las carreteras para rechazar el que la entidad rectora del uso del agua, la Autoridad Única del Agua (AUA), esté liderada por una secretaría nacional designada por el jefe de Estado, tal como lo plantea la iniciativa legal.
Los indígenas demandan mayor poder de decisión en el manejo de las políticas hídricas públicas y de allí que este lunes usaron piedras y troncos de árboles para cortar por varias horas la circulación vehicular por la vía Panamericana, que cruza la serranía del país, tanto al sur como al norte de Quito, en varios puntos de las provincias de Pichincha, Imbabura y Cotopaxi.
Tras varios enfrentamientos con los indígenas, la Policía, por medio del uso de bombas lacrimógenas, logró rehabilitar las vías bloqueadas.
Para el presidente Correa, estas protestas comandadas por la Confederación de Nacionalidades Indígenas de Ecuador (Conaie), "son un total fracaso, (un) fundamentalismo sin ningún sentido".
"¿Qué es lo que se está disputando por parte de la Conaie? Sencillamente que ellos manejen el agua con un llamado Consejo Plurinacional, nominado de acuerdo a sus ancestrales tradiciones, es decir a dedo por la argolla de la Conaie", manifestó Correa.
En la Asamblea Nacional se espera que la comisión legislativa de Seguridad Alimentaria entregue al plenario el informe para la votación del proyecto. Si el texto legal es aprobado de acuerdo con las demandas indígenas, este proyecto podría ser vetado parcialmente por el mandatario, una posibilidad que no se descarta desde el Palacio de Gobierno.
Más bloqueos y marchas
El presidente de la Confederación de Nacionalidades Indígenas de la Amazonia Ecuatoriana (Confeniae), filial de la Conaie, Tito Puanchir, dijo a BBC Mundo que su organización rechaza cualquier posición del presidente Correa "que signifique la aprobación de una ley a espaldas del pueblo ecuatoriano".
La dirigencia indígena ha amenazado con nuevos bloqueos mientras la Asamblea no atienda sus demandas.
"Es inquietante el pronunciamiento del gobierno de no ceder en el tema de la Ley de Aguas", señaló Puanchir, ante lo cual manifestó que alrededor de cinco mil indígenas amazónicos iniciarán este martes una marcha hacia Quito para impulsar protestas a las afueras de la Asamblea Nacional.
En paralelo, la dirigencia indígena ha advertido que nuevos bloqueos de vías se repetirán en diversas provincias del país mientras la Asamblea no atienda sus demandas.
No obstante, el presidente de la Conaie, Marlon Santi, aclaró que su organización no busca derrocar al presidente Correa, como han señalado sectores del oficialismo.
"Mucha gente dice: 'Qué indios para porfiados'. No es que somos porfiados, lo que pasa es que no nos atienden", concluyó, de su parte, el dirigente Delfin Tenesaca.
"No cederé a las presiones de un grupo, por importante que se crea". Así respondió el presidente de Ecuador, Rafael Correa, a las protestas indígenas en contra del proyecto de Ley de Aguas que incluyeron el bloqueo de vías en tres provincias de la Sierra ecuatoriana.
Mientras la Asamblea Nacional se dispone a aprobar el proyecto en los próximos días, la dirigencia indígena ha convocado a sus bases a salir a las carreteras para rechazar el que la entidad rectora del uso del agua, la Autoridad Única del Agua (AUA), esté liderada por una secretaría nacional designada por el jefe de Estado, tal como lo plantea la iniciativa legal.
Los indígenas demandan mayor poder de decisión en el manejo de las políticas hídricas públicas y de allí que este lunes usaron piedras y troncos de árboles para cortar por varias horas la circulación vehicular por la vía Panamericana, que cruza la serranía del país, tanto al sur como al norte de Quito, en varios puntos de las provincias de Pichincha, Imbabura y Cotopaxi.
Tras varios enfrentamientos con los indígenas, la Policía, por medio del uso de bombas lacrimógenas, logró rehabilitar las vías bloqueadas.
Para el presidente Correa, estas protestas comandadas por la Confederación de Nacionalidades Indígenas de Ecuador (Conaie), "son un total fracaso, (un) fundamentalismo sin ningún sentido".
"¿Qué es lo que se está disputando por parte de la Conaie? Sencillamente que ellos manejen el agua con un llamado Consejo Plurinacional, nominado de acuerdo a sus ancestrales tradiciones, es decir a dedo por la argolla de la Conaie", manifestó Correa.
En la Asamblea Nacional se espera que la comisión legislativa de Seguridad Alimentaria entregue al plenario el informe para la votación del proyecto. Si el texto legal es aprobado de acuerdo con las demandas indígenas, este proyecto podría ser vetado parcialmente por el mandatario, una posibilidad que no se descarta desde el Palacio de Gobierno.
Más bloqueos y marchas
El presidente de la Confederación de Nacionalidades Indígenas de la Amazonia Ecuatoriana (Confeniae), filial de la Conaie, Tito Puanchir, dijo a BBC Mundo que su organización rechaza cualquier posición del presidente Correa "que signifique la aprobación de una ley a espaldas del pueblo ecuatoriano".
La dirigencia indígena ha amenazado con nuevos bloqueos mientras la Asamblea no atienda sus demandas.
"Es inquietante el pronunciamiento del gobierno de no ceder en el tema de la Ley de Aguas", señaló Puanchir, ante lo cual manifestó que alrededor de cinco mil indígenas amazónicos iniciarán este martes una marcha hacia Quito para impulsar protestas a las afueras de la Asamblea Nacional.
En paralelo, la dirigencia indígena ha advertido que nuevos bloqueos de vías se repetirán en diversas provincias del país mientras la Asamblea no atienda sus demandas.
No obstante, el presidente de la Conaie, Marlon Santi, aclaró que su organización no busca derrocar al presidente Correa, como han señalado sectores del oficialismo.
"Mucha gente dice: 'Qué indios para porfiados'. No es que somos porfiados, lo que pasa es que no nos atienden", concluyó, de su parte, el dirigente Delfin Tenesaca.