Bolivia: cuatro conflictos sociales golpean la tranquilidad del país

La Paz, Erbol
Cuatro conflictos sociales golpean la tranquilidad del país, el diálogo y la solución a los mismos se dejan esperar. Estos movimientos se articularon por demandas y destinatarios diferentes; dos de ellos están dirigidos contra el gobierno y los otros contra la Corte Nacional Electoral y el sector privado.

Está el caso del conflicto entre Caranavi y Alto Beni por la instalación de una planta procesadora de cítricos. El bloqueo del acceso al norte paceño desde hace 11 días generó la escasez de artículos de primera necesidad en la región.

Se mantiene latente, por una parte la amenaza de Guanay de desbloquear la carretera si hasta este jueves el gobierno no soluciona el problema y; por otra, la marcha de Alto Beni rumbo a La Paz. Entre tanto, el gobierno contiene el uso de la fuerza pública.

En el otro frente, está el tema del incremento salarial del 5 por ciento ofrecido por el gobierno la semana pasada. El tema desató una ola de protestas. Maestros y fabriles se unieron en torno a la Central Obrera Boliviana (COB) para ganar las calles y protestar por los bajos salarios. El gobierno reiteró que el ofrecimiento oficial es “inamovible”.

El paro de 24 horas convocado por la COB para el martes concluyó con una violencia desmedida. Un grupo de fabriles intentó tomar las oficinas del Ministerio de Trabajo ubicada en pleno centro paceño, prendieron fuego a la puerta principal y mancharon con tinta el frontis principal. La policía tuvo que intervenir para contener la furia de los trabajadores.

SAN AURELIO

Mientras eso ocurrió en occidente, en el oriente del país, concretamente en la ciudad de Santa Cruz, el conflicto de los “sin lote” con los propietarios del Ingenio Azucarero San Aurelio no fue resuelto del todo, tras la toma de terrenos registrada el 24 de abril con el saldo de un muerto y 30 detenidos. La víctima mortal fue identificada como Ronald Antelo Araúz (44), quien falleció apaleado por los loteadores, según el relato de su hermano David.
El 26 de abril, el vicepresidente Álvaro García Linera lanzó un ultimátum a los “sin lote” para pedirles que desalojen el lugar bajo amenaza de hacer uso de la fuerza policial, aspecto que obligó a este sector abandonar los predios de San Aurelio, ubicados en el área urbana de la ciudad de Santas Cruz.

Un acuerdo arribado entre las partes en conflicto, que establecía que los dueños de San Aurelio se comprometían a vender terrenos en la parte sur de la propiedad que conectan con el Plan 3000, no fue cristalizado. Este hecho dio lugar a que los “sin lote” adviertan con retomar los predios. El problema de posibles enfrentamientos sigue latente.

LOS ESCAÑOS

El cuarto conflicto que rompió la tranquilidad del país es el de la distribución de escaños en las asambleas legislativas departamentales.

El problema surge a raíz de las directivas 030 y 031 emitidas por la Corte Nacional Electoral (CNE), las mismas que disponen la distribución de escaños. Según la oposición, esta determinación viola las normas vigentes y favorece al Movimiento Al Socialismo (MAS).

Las resoluciones restan escaños a los opositores que lograron representación en las asambleas legislativas de La Paz, Oruro, Potosí, Cochabamba y Chuquisaca.

Según Carlos Laruta, ex candidato a gobernador por Unidad Nacional (UN) en La Paz, el MAS logró el 50 por ciento de los votos y tendrá un 75 por ciento escaños, situación inexplicable para el opositor.

Por este hecho, el presidente de la Corte Nacional Electoral, Antonio Costas fue convocado a diputados y senadores para prestar un informe sobre el tema, los mismos que fueron aprobados satisfactoriamente por el oficialismo.

Entre tanto, la huelga de hambre en Cochabamba y La Paz se mantiene inalterable. En la Cámara Baja el diputado Jaime Navarro y otro suplente de Unidad Nacional mantienen un ayuno voluntario. El ex constituyente y ex dirigente de los choferes Ángel Villacorta pretendió sumarse al piquete, pero fue desalojado por órdenes del presidente de diputados, Héctor Arce.

Estos cuatro conflictos sociales aún perturban la tranquilidad del país, sin embargo, el enfrentamiento entre Caranavi y Alto Beni; los “sin lote” y el Ingenio Azucarero San Aurelio tienden a agravarse si no se registra una intervención adecuada por parte del gobierno.

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