Barcelona goleó al Villarreal y se olvida del Inter
Barcelona, Agencias
El Barcelona borró de su mente la imagen del Inter de Milán, sólo tres días después de quedarse fuera de la final de la Liga de Campeones, y mostró sus mejores virtudes, lo que le permitió lograr una victoria en Villarreal, fraguada en un gran primer tiempo, en el que demostró mucha superioridad.
El equipo local, que llegaba al partido en el mejor momento de la temporada y que busca un puesto en la próxima edición de la Liga Europa, ofreció una imagen pobre en la primera parte, pero se mostró más intenso tras el descanso, aunque no lo suficiente como para comprometer el triunfo del Barcelona.
Ambos equipos sabían lo que se jugaban, pero al Barcelona le tembló el pulso menos que al Villarreal y sus jugadores ofrecieron el fútbol que les faltó el miércoles para conseguir un triunfo fundamental y contundente en la lucha por el título.
Sólo cuando el Villarreal hizo su gol tuvo el Barcelona que emplearse a fondo, aunque en el cuarto de hora final del encuentro, ya había recuperado el control del juego, lo que le permitió redondear el triunfo con el segundo tanto de Messi.
El encuentro empezó con un ritmo trepidante, con el balón en poder del Barcelona, pero con llegadas a la contra del Villarreal, que dispuso de la primera gran ocasión del partido, desperdiciada por el brasileño Nilmar, que envió fuera un buen balón en un contragolpe.
Poco a poco, el Barcelona volvió a ser el de siempre. Tejió su madeja en el centro del campo y envolvió al rival. La consecuencia fue el 0-1 logrado por Messi tras una buena acción de Bojan Krkic y Xavi Hernández, en un disparo que rozó en la defensa y se coló en la meta de Diego López.
El Villarreal acusó el golpe y el Barcelona se creció. Las llegadas del equipo local a la meta de Víctor Valdés menguaron y el control del juego por parte del equipo catalán aumentó notablemente.
Hubo momentos en los que el conjunto local estuvo a merced de su rival. El Barcelona encontraba una y otra vez espacios para acercarse a la portería del Villarreal y las aprovechó, lo que le permitió llegar al descanso con una clara ventaja en el marcador.
Fue gracias a dos acciones de calidad. Primero, Xavi Hernández hizo el 0-2 en una gran falta próxima al área local y posteriormente Bojan, una gran acción individual en la que superó claramente al argentino Gonzalo Rodríguez, puso en el marcador el 0-3 con el que el partido llegó al descanso tras una fiesta de fútbol y goles del equipo catalán.
Marcos Senna y JOseba Llorente salieron de inicio en el segundo periodo en lugar del argentino Ariel Ibagaza y Cani, lo que permitió al equipo local tener más posesión de balón y jugar más minutos al comienzo del segundo tiempo cerca de la portería del Barcelona.
Con Senna en la creación del juego y Llorente en punta, el equipo local mejoró, lo que unido a que el Barcelona se planteó administrar su ventaja con el menos sufrimiento posible, el encuentro estuvo más equilibrado que en la primera parte.
Sólo un gol local podía inquietar al Barcelona y pese a la mejoría en su juego, el Villarreal no dio muestras de estar cerca de marcarlo, hasta que en el minuto 68, en una de sus más claras ocasiones, Llorente dio vida al partido al marcar para el Villarreal.
Parecía que, llegado el ecuador del segundo periodo, el equipo de Pep Guardiola podía empezar a pensar ya en el siguiente encuentro, pero no fue así. Sus hombres debieron rearmarse de cara a unos minutos finales del encuentro que iban a ser menos sencillos de lo esperado antes del gol local.
Encontró entonces el Barcelona algunas opciones a la contra, ya que el Villarreal buscaba el segundo tanto, y el partido llegó a su final con un Barcelona parecido al del primer tiempo y que sentenció el encuentro con un nuevo gol de Messi, ante un Villarreal cuya reacción en el segundo periodo no fue suficiente como para tener verdaderas opciones de puntuar.
El Barcelona borró de su mente la imagen del Inter de Milán, sólo tres días después de quedarse fuera de la final de la Liga de Campeones, y mostró sus mejores virtudes, lo que le permitió lograr una victoria en Villarreal, fraguada en un gran primer tiempo, en el que demostró mucha superioridad.
El equipo local, que llegaba al partido en el mejor momento de la temporada y que busca un puesto en la próxima edición de la Liga Europa, ofreció una imagen pobre en la primera parte, pero se mostró más intenso tras el descanso, aunque no lo suficiente como para comprometer el triunfo del Barcelona.
Ambos equipos sabían lo que se jugaban, pero al Barcelona le tembló el pulso menos que al Villarreal y sus jugadores ofrecieron el fútbol que les faltó el miércoles para conseguir un triunfo fundamental y contundente en la lucha por el título.
Sólo cuando el Villarreal hizo su gol tuvo el Barcelona que emplearse a fondo, aunque en el cuarto de hora final del encuentro, ya había recuperado el control del juego, lo que le permitió redondear el triunfo con el segundo tanto de Messi.
El encuentro empezó con un ritmo trepidante, con el balón en poder del Barcelona, pero con llegadas a la contra del Villarreal, que dispuso de la primera gran ocasión del partido, desperdiciada por el brasileño Nilmar, que envió fuera un buen balón en un contragolpe.
Poco a poco, el Barcelona volvió a ser el de siempre. Tejió su madeja en el centro del campo y envolvió al rival. La consecuencia fue el 0-1 logrado por Messi tras una buena acción de Bojan Krkic y Xavi Hernández, en un disparo que rozó en la defensa y se coló en la meta de Diego López.
El Villarreal acusó el golpe y el Barcelona se creció. Las llegadas del equipo local a la meta de Víctor Valdés menguaron y el control del juego por parte del equipo catalán aumentó notablemente.
Hubo momentos en los que el conjunto local estuvo a merced de su rival. El Barcelona encontraba una y otra vez espacios para acercarse a la portería del Villarreal y las aprovechó, lo que le permitió llegar al descanso con una clara ventaja en el marcador.
Fue gracias a dos acciones de calidad. Primero, Xavi Hernández hizo el 0-2 en una gran falta próxima al área local y posteriormente Bojan, una gran acción individual en la que superó claramente al argentino Gonzalo Rodríguez, puso en el marcador el 0-3 con el que el partido llegó al descanso tras una fiesta de fútbol y goles del equipo catalán.
Marcos Senna y JOseba Llorente salieron de inicio en el segundo periodo en lugar del argentino Ariel Ibagaza y Cani, lo que permitió al equipo local tener más posesión de balón y jugar más minutos al comienzo del segundo tiempo cerca de la portería del Barcelona.
Con Senna en la creación del juego y Llorente en punta, el equipo local mejoró, lo que unido a que el Barcelona se planteó administrar su ventaja con el menos sufrimiento posible, el encuentro estuvo más equilibrado que en la primera parte.
Sólo un gol local podía inquietar al Barcelona y pese a la mejoría en su juego, el Villarreal no dio muestras de estar cerca de marcarlo, hasta que en el minuto 68, en una de sus más claras ocasiones, Llorente dio vida al partido al marcar para el Villarreal.
Parecía que, llegado el ecuador del segundo periodo, el equipo de Pep Guardiola podía empezar a pensar ya en el siguiente encuentro, pero no fue así. Sus hombres debieron rearmarse de cara a unos minutos finales del encuentro que iban a ser menos sencillos de lo esperado antes del gol local.
Encontró entonces el Barcelona algunas opciones a la contra, ya que el Villarreal buscaba el segundo tanto, y el partido llegó a su final con un Barcelona parecido al del primer tiempo y que sentenció el encuentro con un nuevo gol de Messi, ante un Villarreal cuya reacción en el segundo periodo no fue suficiente como para tener verdaderas opciones de puntuar.