Paraguay: estado de excepción para combatir a la guerrilla
Eduardo Arce
BBC Mundo, Asunción
La Cámara de Senadores de Paraguay aprobó este jueves un proyecto de ley que declara estado de excepción en cinco departamentos del norte del país, con el fin de reforzar los operativos de búsqueda de supuestos miembros de un grupo armado, el Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP).
A esta organización guerrillera se le atribuye varios secuestros, el último de ellos realizado en octubre del año pasado a un influyente ganadero del derechista Partido Liberal Radical Auténtico, co gobernante con otras fuerzas de centroizquierda.
El EPP, que estaría resguardado en zonas boscosas de difícil acceso donde coexisten extensas haciendas ganaderas y cultivos ilícitos de marihuana, también habría sido el responsable de la muerte de un policía y tres civiles tras un enfrentamiento el miércoles último, según informes del Ministerio del Interior.
El presidente de Paraguay, Fernando Lugo, se reunió en la mañana de este jueves con los miembros de la Mesa Directiva del Congreso para presentar un proyecto de ley con la declaración del estado de excepción y pedir su probación urgente.
El Senado, de mayoría opositora, se reunió el mismo jueves y decidió rechazar el proyecto del Poder Ejecutivo, pero aprobó otro, con unas pocas diferencias, presentado por un senador contrario al gobierno.
El proyecto de ley aprobado prevé que el estado de excepción se prolongue 30 días, durante los cuales el presidente tendrá la facultad de ordenar la detención y el traslado de personas sin orden judicial, así como prohibir o restringir reuniones públicas y manifestaciones.
El estado de excepción, que fue utilizado discrecionalmente durante los 35 años en que gobernó el general Alfredo Stroessner con mano dura (1954-1989), puede ser declarado, según la Carta Magna de Paraguay, "en caso de conflicto armado internacional o de grave conmoción interior que ponga en peligro el imperio de esta Constitución o el funcionamiento regular de los órganos creados por ella".
Lugo moviliza tropas
El EPP estaría resguardado en zonas boscosas de difícil acceso.
Según las autoridades paraguayas, el EPP tiene vínculos con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), y estaría integrado por no más de medio centenar de personas que reivindican la lucha armada como método para cambiar el sistema económico y social vigente en Paraguay.
El gobierno consideró muy grave el enfrentamiento con el EPP verificado en el norte en el que fallecieron cuatro personas, por lo que el presidente Lugo suspendió su viaje a Cochabamba, Bolivia, previsto para el jueves, donde debería haber participado en la Conferencia Mundial de los Pueblos sobre Cambio Climático y Derechos de la Madre Tierra.
Lugo, tras reunirse con ministros y asesores en materia de seguridad, ordenó un fuerte despliegue de policías y militares en el norte del país para facilitar la búsqueda de los supuestos integrantes del EPP.
Desde noviembre del año pasado, Lugo había ya ordenado tres operativos conjuntos militares-policiales -Triángulo, Sombra y Jaguarete- para buscar a los integrantes del EPP en la zona norte del país y ninguno de ellos dio resultado positivo alguno.
Oposición al estado de excepción
La última vez que se declaró estado de excepción en Paraguay fue en 2002.
"No se justifica este estado de excepción porque ninguna de las causales prevista en la Constitución están dadas hoy en Paraguay", le dijo a BBC Mundo el analista político y sociólogo Marcial Cantero Gaona.
"Lo que se decidió en el Senado, a pedido del gobierno de Lugo, es un eufemismo del estado de sitio vigente durante más de 35 años en forma continua durante la dictadura de Alfredo Stroessner y el partido Colorado, y solo significará mayor represión", expresó Cantero.
A criterio del analista, "con esta figura constitucional el gobierno tendrá superpoderes para combatir la 'insurgencia' y tendrá facultades para allanar viviendas y locales de organizaciones sociales y políticas, realizar detenciones sin orden judicial, prohibir reuniones, manifestaciones públicas, además de profundizar la militarización de la zona".
La última vez que se declaró estado de excepción en Paraguay fue durante el Gobierno del presidente Luis González Macchi en 2002, en el marco de una serie de manifestaciones en su contra que dejaron varios heridos.
Según el comandante de la Policía Nacional José Giménez, los locales de algunos diarios, canales de televisión y radioemisoras de Paraguay tienen guardia policial desde este jueves, dispuesta por el gobierno "para evitar desmanes".
Giménez aseguró a la prensa que no existen amenazas de bomba ni otros peligros similares contra los medios por lo que las guardias son solamente medidas preventivas.
BBC Mundo, Asunción
La Cámara de Senadores de Paraguay aprobó este jueves un proyecto de ley que declara estado de excepción en cinco departamentos del norte del país, con el fin de reforzar los operativos de búsqueda de supuestos miembros de un grupo armado, el Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP).
A esta organización guerrillera se le atribuye varios secuestros, el último de ellos realizado en octubre del año pasado a un influyente ganadero del derechista Partido Liberal Radical Auténtico, co gobernante con otras fuerzas de centroizquierda.
El EPP, que estaría resguardado en zonas boscosas de difícil acceso donde coexisten extensas haciendas ganaderas y cultivos ilícitos de marihuana, también habría sido el responsable de la muerte de un policía y tres civiles tras un enfrentamiento el miércoles último, según informes del Ministerio del Interior.
El presidente de Paraguay, Fernando Lugo, se reunió en la mañana de este jueves con los miembros de la Mesa Directiva del Congreso para presentar un proyecto de ley con la declaración del estado de excepción y pedir su probación urgente.
El Senado, de mayoría opositora, se reunió el mismo jueves y decidió rechazar el proyecto del Poder Ejecutivo, pero aprobó otro, con unas pocas diferencias, presentado por un senador contrario al gobierno.
El proyecto de ley aprobado prevé que el estado de excepción se prolongue 30 días, durante los cuales el presidente tendrá la facultad de ordenar la detención y el traslado de personas sin orden judicial, así como prohibir o restringir reuniones públicas y manifestaciones.
El estado de excepción, que fue utilizado discrecionalmente durante los 35 años en que gobernó el general Alfredo Stroessner con mano dura (1954-1989), puede ser declarado, según la Carta Magna de Paraguay, "en caso de conflicto armado internacional o de grave conmoción interior que ponga en peligro el imperio de esta Constitución o el funcionamiento regular de los órganos creados por ella".
Lugo moviliza tropas
El EPP estaría resguardado en zonas boscosas de difícil acceso.
Según las autoridades paraguayas, el EPP tiene vínculos con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), y estaría integrado por no más de medio centenar de personas que reivindican la lucha armada como método para cambiar el sistema económico y social vigente en Paraguay.
El gobierno consideró muy grave el enfrentamiento con el EPP verificado en el norte en el que fallecieron cuatro personas, por lo que el presidente Lugo suspendió su viaje a Cochabamba, Bolivia, previsto para el jueves, donde debería haber participado en la Conferencia Mundial de los Pueblos sobre Cambio Climático y Derechos de la Madre Tierra.
Lugo, tras reunirse con ministros y asesores en materia de seguridad, ordenó un fuerte despliegue de policías y militares en el norte del país para facilitar la búsqueda de los supuestos integrantes del EPP.
Desde noviembre del año pasado, Lugo había ya ordenado tres operativos conjuntos militares-policiales -Triángulo, Sombra y Jaguarete- para buscar a los integrantes del EPP en la zona norte del país y ninguno de ellos dio resultado positivo alguno.
Oposición al estado de excepción
La última vez que se declaró estado de excepción en Paraguay fue en 2002.
"No se justifica este estado de excepción porque ninguna de las causales prevista en la Constitución están dadas hoy en Paraguay", le dijo a BBC Mundo el analista político y sociólogo Marcial Cantero Gaona.
"Lo que se decidió en el Senado, a pedido del gobierno de Lugo, es un eufemismo del estado de sitio vigente durante más de 35 años en forma continua durante la dictadura de Alfredo Stroessner y el partido Colorado, y solo significará mayor represión", expresó Cantero.
A criterio del analista, "con esta figura constitucional el gobierno tendrá superpoderes para combatir la 'insurgencia' y tendrá facultades para allanar viviendas y locales de organizaciones sociales y políticas, realizar detenciones sin orden judicial, prohibir reuniones, manifestaciones públicas, además de profundizar la militarización de la zona".
La última vez que se declaró estado de excepción en Paraguay fue durante el Gobierno del presidente Luis González Macchi en 2002, en el marco de una serie de manifestaciones en su contra que dejaron varios heridos.
Según el comandante de la Policía Nacional José Giménez, los locales de algunos diarios, canales de televisión y radioemisoras de Paraguay tienen guardia policial desde este jueves, dispuesta por el gobierno "para evitar desmanes".
Giménez aseguró a la prensa que no existen amenazas de bomba ni otros peligros similares contra los medios por lo que las guardias son solamente medidas preventivas.