Nadal consigue su sexto título en Montecarlo
MONTECARLO, EP
Con una exhibición de buen tenis, el tenista español, Rafael Nadal, arrolló a su compatriota Fernando Verdasco en la final del torneo monegasco por 6-0 y 6-1 y se adjudicó su sexto título consecutivo en el Masters 1000 de Montecarlo, el cual es el primero que gana en la presente temporada y le sirve para romper una mala racha de casi un año sin ser campeón.
La última vez que Nadal había levantado una copa fue el 3 de mayo del 2009, cuando ganó el Masters 1000 de Roma, por lo que Montecarlo le significó volver a la senda de la victoria, en la que es la superficie en la que mejor se desenvuelve el manacorí: la arcilla.
El primer set fue dominado ampliamente por Nadal, quien de inmediato consiguió un triple ‘break point' en el primer juego, sin embargo, Verdasco logró sobreponerse y lo envió a ‘deuce', sólo para alargar su agonía, pues el manacorí consiguió finalmente el triunfo para irse al frente 1-0.
Con el marcador a su favor y con su servicio, Nadal se fue arriba por dos juegos a cero, y volvió a quebrar el servicio de Verdasco en un par de ocasiones, lo cual lo situó en un irremontable 5-0, que culminó con su saque para sentenciar la barrida en 35 minutos.
La clave de los triunfos de Nadal estuvieron en la poca efectividad de Verdasco con su primer servicio, pues logró un alarmante 50 por ciento, mientras que el manacorí alcanzó el 70.
Además, Nadal consiguió tres quiebres en seis oportunidades, mientras que Verdasco ni siquiera tuvo opciones para romperle el saque; en cuanto a errores no forzados, el manacorí cometió cuatro y su rival 12.
En el segundo set, Verdasco ganó su primer ‘game', después de un intenso peloteo en el que estuvo contra las cuerdas en tres ocasiones; de esta forma se fue arriba 1-0 y quebró la inercia que llevaba Nadal, quien, con su saque, emparejó el marcador de inmediato.
No fue sencillo para Rafael Nadal volver a quebrar el servicio de Verdasco, pues el madrileño lo defendió a capa y espada, al salvar cinco opciones de quiebre, sin embargo, el manacorí terminó por imponer su superioridad en la sexta oportunidad para irse al frente 2-1, marcador que amplió gracias a su saque.
El marcador 3-1 fue una carga muy pesada para Verdasco, quien se desmoronó y perdió de nueva cuenta su servicio, además de mantener su incapacidad para quebrar el de Nadal, a pesar de contar con cinco oportunidades en el sexto 'game', con lo que el juego se puso en un definitivo 5-1.
La impotencia de Verdasco se hizo latente en este 'game', pues al ganar un punto después de un intenso peloteo en el que Nadal salvó pelotas increíbles, el madrileño levantó las manos al cielo en señal de agradecimiento, como si hubiera ganado el encuentro.
Con el marcador totalmente adverso, Verdasco opuso poca resistencia en el último game, que sirvió para que Nadal sentenciara el juego y lo dejara en un rotundo 6-0 y 6-1, para demostrar su superioridad en la arcilla, a unas semanas de que inicie Roland Garros, en donde el manacorí buscará recuperar la corona perdida.
Al conseguir el punto definitivo, Nadal se tiró al suelo y miró al cielo, pues se quitó de encima la racha más larga de su carrera sin ganar un torneo.
En el segundo set, Nadal cometió ocho errores no forzados, mientras que Verdasco sumó 23; asimismo, en cuanto a quiebres, el manacorí consiguió tres en ocho oportunidades, mientras que el madrileño no pudo aprovechar ninguna de las cinco opciones con las que contó.
En cuanto al servicio, Verdasco levantó hasta el 62 por ciento, lo cual explica que el set fuera un poco más disputado, mientras que Nadal sumó 64 por ciento.
Con la corona conseguida, Nadal empató el récord del británico Frank Doherty como los únicos tenistas que han conseguido seis títulos en el Masters de Montecarlo, aunque el manacorí es el primero en lograrlo en la Era Open, además de que dejó su marca histórica ante Verdasco con diez victorias en igual número de partidos.
El partido se resolvió en una hora y 25 minutos, en un torneo en el que Nadal no cedió ningún set.
Con una exhibición de buen tenis, el tenista español, Rafael Nadal, arrolló a su compatriota Fernando Verdasco en la final del torneo monegasco por 6-0 y 6-1 y se adjudicó su sexto título consecutivo en el Masters 1000 de Montecarlo, el cual es el primero que gana en la presente temporada y le sirve para romper una mala racha de casi un año sin ser campeón.
La última vez que Nadal había levantado una copa fue el 3 de mayo del 2009, cuando ganó el Masters 1000 de Roma, por lo que Montecarlo le significó volver a la senda de la victoria, en la que es la superficie en la que mejor se desenvuelve el manacorí: la arcilla.
El primer set fue dominado ampliamente por Nadal, quien de inmediato consiguió un triple ‘break point' en el primer juego, sin embargo, Verdasco logró sobreponerse y lo envió a ‘deuce', sólo para alargar su agonía, pues el manacorí consiguió finalmente el triunfo para irse al frente 1-0.
Con el marcador a su favor y con su servicio, Nadal se fue arriba por dos juegos a cero, y volvió a quebrar el servicio de Verdasco en un par de ocasiones, lo cual lo situó en un irremontable 5-0, que culminó con su saque para sentenciar la barrida en 35 minutos.
La clave de los triunfos de Nadal estuvieron en la poca efectividad de Verdasco con su primer servicio, pues logró un alarmante 50 por ciento, mientras que el manacorí alcanzó el 70.
Además, Nadal consiguió tres quiebres en seis oportunidades, mientras que Verdasco ni siquiera tuvo opciones para romperle el saque; en cuanto a errores no forzados, el manacorí cometió cuatro y su rival 12.
En el segundo set, Verdasco ganó su primer ‘game', después de un intenso peloteo en el que estuvo contra las cuerdas en tres ocasiones; de esta forma se fue arriba 1-0 y quebró la inercia que llevaba Nadal, quien, con su saque, emparejó el marcador de inmediato.
No fue sencillo para Rafael Nadal volver a quebrar el servicio de Verdasco, pues el madrileño lo defendió a capa y espada, al salvar cinco opciones de quiebre, sin embargo, el manacorí terminó por imponer su superioridad en la sexta oportunidad para irse al frente 2-1, marcador que amplió gracias a su saque.
El marcador 3-1 fue una carga muy pesada para Verdasco, quien se desmoronó y perdió de nueva cuenta su servicio, además de mantener su incapacidad para quebrar el de Nadal, a pesar de contar con cinco oportunidades en el sexto 'game', con lo que el juego se puso en un definitivo 5-1.
La impotencia de Verdasco se hizo latente en este 'game', pues al ganar un punto después de un intenso peloteo en el que Nadal salvó pelotas increíbles, el madrileño levantó las manos al cielo en señal de agradecimiento, como si hubiera ganado el encuentro.
Con el marcador totalmente adverso, Verdasco opuso poca resistencia en el último game, que sirvió para que Nadal sentenciara el juego y lo dejara en un rotundo 6-0 y 6-1, para demostrar su superioridad en la arcilla, a unas semanas de que inicie Roland Garros, en donde el manacorí buscará recuperar la corona perdida.
Al conseguir el punto definitivo, Nadal se tiró al suelo y miró al cielo, pues se quitó de encima la racha más larga de su carrera sin ganar un torneo.
En el segundo set, Nadal cometió ocho errores no forzados, mientras que Verdasco sumó 23; asimismo, en cuanto a quiebres, el manacorí consiguió tres en ocho oportunidades, mientras que el madrileño no pudo aprovechar ninguna de las cinco opciones con las que contó.
En cuanto al servicio, Verdasco levantó hasta el 62 por ciento, lo cual explica que el set fuera un poco más disputado, mientras que Nadal sumó 64 por ciento.
Con la corona conseguida, Nadal empató el récord del británico Frank Doherty como los únicos tenistas que han conseguido seis títulos en el Masters de Montecarlo, aunque el manacorí es el primero en lograrlo en la Era Open, además de que dejó su marca histórica ante Verdasco con diez victorias en igual número de partidos.
El partido se resolvió en una hora y 25 minutos, en un torneo en el que Nadal no cedió ningún set.