La oposición toma el poder en Kirguizistán tras la violenta revuelta
La ex ministra Rosa Otunbayeva se proclama líder del Gobierno interino y anuncia que permanecerá medio año y redactará una nueva Constitución.- Los enfrentamientos dejan al menos 65 muertos.- El presidente, Kurmanbek Bakiyev, ha salido del país en avión.
Biskek, Agencias
La líder opositora kirguís Rosa Otunbayeva, ex ministra de Asuntos Exteriores, anunció en la madrugada de este jueves que liderará durante los próximos seis meses un Gobierno interino encargado de elaborar una nueva Constitución y convocar elecciones. "Tenemos un Gobierno interino, y estoy al frente de él", afirmó Otunbayeva en declaraciones a Reuters, poco después de confirmar la creación de este Ejecutivo tras la dimisión del primer ministro, Daniyar Usenov, y la huida en avión del hasta ahora presidente, Kurmanbek Bakiyev, que se encuentra en paradero desconocido.
Así ha concluido de momento las violentas protestas convocadas por los opositores para pedir la dimisión del jefe de Estado, que se han saldado con al menos 65 muertos y unos 400 heridos en Kirguizistán. El malestar social comenzó a evidenciarse a comienzos de marzo debido a la gran pobreza, la subida de los precios y la corrupción política en esta ex república soviética y ha ido subiendo en los últimos días. EE UU, que tiene en el país una base militar fundamental para la logística de sus operaciones en Afganistán, Rusia, también con presencia militar, y la Unión Europea han hecho un llamamiento a la calma.
"Hemos alcanzado un acuerdo de que el Gobierno renunciará", dijo a la agencia Reuters Galina Skripkina, miembro del Parlamento y figura importante del opositor partido Socialdemócrata. Según Skripkina, el presidente Bakiyev ha huido a la ciudad sureña de Osh. "Bakiyev ha abordado un avión desde Biskek a Osh y ya ha aterrizado allí".
Destrozos y violencia
Unas 1.000 personas irrumpieron este miércoles en la oficina del fiscal general y han roto las ventanas del edificio y lanzado por ellas ordenadores y material de oficina. Un responsable de los servicios de emergencia, que pidió no ser identificado, señaló a Reuters que podría haber más de 50 muertos en los disturbios, mientras que desde la oposición se habla de casi un centenar de fallecidos.
Durante la tarde, la policía antidisturbios lanzó gases lacrimógenos y bombas de humo para refrenar a la multitud, que se acercó armada con rifles automáticos y barras de acero a la oficina de Bakiyev, que en ese momento no estaba seguro se hallaba en la sede presidencial. El primer ministro de este país de 5,3 millones de habitantes, Daniyar Usenov, que había restado anteriormente importancia a las protestas, ha asegurado esta tarde que tanto él como el presidente
Sin embargo, el líder opositor Temir Sariyev aseguró horas después que al entrar en la oficina presidencial Bakiyev había abandonado el edificio y había dejado una nota de renuncia del Gobierno. "Hay miles de personas allí, principalmente jóvenes, y gran parte de ellos han llegado desde diferentes partes del país", ha indicado la periodista de la BBC Rayhan Demytrie en declaraciones recogidas por la cadena británica en su página web . "Dicen que no van a moverse de allí y gritan 'el presidente tiene que irse", añade la reportera.
Los opositores también han tomado el control del canal estatal KTR, según medios locales. En otros tres poblados, los manifestantes han asaltado edificios gubernamentales. En la localidad de Talas (norte del país), un viceprimer ministro y el ministro del Interior fueron fuertemente golpeados.
Biskek, Agencias
La líder opositora kirguís Rosa Otunbayeva, ex ministra de Asuntos Exteriores, anunció en la madrugada de este jueves que liderará durante los próximos seis meses un Gobierno interino encargado de elaborar una nueva Constitución y convocar elecciones. "Tenemos un Gobierno interino, y estoy al frente de él", afirmó Otunbayeva en declaraciones a Reuters, poco después de confirmar la creación de este Ejecutivo tras la dimisión del primer ministro, Daniyar Usenov, y la huida en avión del hasta ahora presidente, Kurmanbek Bakiyev, que se encuentra en paradero desconocido.
Así ha concluido de momento las violentas protestas convocadas por los opositores para pedir la dimisión del jefe de Estado, que se han saldado con al menos 65 muertos y unos 400 heridos en Kirguizistán. El malestar social comenzó a evidenciarse a comienzos de marzo debido a la gran pobreza, la subida de los precios y la corrupción política en esta ex república soviética y ha ido subiendo en los últimos días. EE UU, que tiene en el país una base militar fundamental para la logística de sus operaciones en Afganistán, Rusia, también con presencia militar, y la Unión Europea han hecho un llamamiento a la calma.
"Hemos alcanzado un acuerdo de que el Gobierno renunciará", dijo a la agencia Reuters Galina Skripkina, miembro del Parlamento y figura importante del opositor partido Socialdemócrata. Según Skripkina, el presidente Bakiyev ha huido a la ciudad sureña de Osh. "Bakiyev ha abordado un avión desde Biskek a Osh y ya ha aterrizado allí".
Destrozos y violencia
Unas 1.000 personas irrumpieron este miércoles en la oficina del fiscal general y han roto las ventanas del edificio y lanzado por ellas ordenadores y material de oficina. Un responsable de los servicios de emergencia, que pidió no ser identificado, señaló a Reuters que podría haber más de 50 muertos en los disturbios, mientras que desde la oposición se habla de casi un centenar de fallecidos.
Durante la tarde, la policía antidisturbios lanzó gases lacrimógenos y bombas de humo para refrenar a la multitud, que se acercó armada con rifles automáticos y barras de acero a la oficina de Bakiyev, que en ese momento no estaba seguro se hallaba en la sede presidencial. El primer ministro de este país de 5,3 millones de habitantes, Daniyar Usenov, que había restado anteriormente importancia a las protestas, ha asegurado esta tarde que tanto él como el presidente
Sin embargo, el líder opositor Temir Sariyev aseguró horas después que al entrar en la oficina presidencial Bakiyev había abandonado el edificio y había dejado una nota de renuncia del Gobierno. "Hay miles de personas allí, principalmente jóvenes, y gran parte de ellos han llegado desde diferentes partes del país", ha indicado la periodista de la BBC Rayhan Demytrie en declaraciones recogidas por la cadena británica en su página web . "Dicen que no van a moverse de allí y gritan 'el presidente tiene que irse", añade la reportera.
Los opositores también han tomado el control del canal estatal KTR, según medios locales. En otros tres poblados, los manifestantes han asaltado edificios gubernamentales. En la localidad de Talas (norte del país), un viceprimer ministro y el ministro del Interior fueron fuertemente golpeados.