Condena Evo Morales el capitalismo por destruir el planeta
Mario Hubert Garrido, Abi
El presidente boliviano, Evo Morales, condenó hoy en Cochabamba el sistema capitalista, el cual calificó de principal responsable de la destrucción del planeta.
En la inauguración de la Primera Conferencia Mundial de los Pueblos sobre Cambio Climático, señaló que ese sistema consumista es el enemigo principal de la Madre Tierra, pues busca sólo ganancias en detrimento de la naturaleza.
El capitalismo es puente de asimetrías y de la desigualdad en este mundo, remarcó.
Ante más de 15 mil representantes de los cinco continentes, concentrados en el estadio ecológico Esteban Ramírez, de la localidad de Tuquipaya, Morales leyó una carta a las futuras generaciones para alertar que el planeta está enfermo debido al capitalismo que intenta convertir todo en mercancía.
En la misiva, el dignatario señaló que esa Madre Tierra lastimada nos da avisos con terremotos, maremotos, tsunamis, ciclones, sequias, de ahí la necesidad de protegerla.
En el texto llamó la atención además sobre los emigrantes climáticos, unas 50 millones de personas que en 2050 podría elevarse a 200 millones de víctimas de los impactos negativos del medio ambiente.
La encrucijada definitiva, dijo, es salvar a la Madre Tierra del capitalismo y en ese sentido instó al gran pacto de los pueblos frente a quienes siembran la muerte y la compra de armas.
"Si destruimos al capitalismo, la tarea será cuidar la Madre Tierra con mucho amor", remarcó.
El dignatario señaló también en otra parte de su discurso que mientras no se cambie el capitalismo, las medidas que se adopten en defensa de la Pachamama (Madre Tierra) tendrán carácter precario y temporal.
La disyuntiva que se nos ofrece, agregó, es continuar por el camino del capitalismo que es la muerte o tomar el de la defensa de la vida y la humanidad.
Morales, que comenzó su discurso con el lema de Planeta o Muerte, Venceremos, ovacionado por los representantes originarios e invitados asistentes al foro climático, afirmó que no podrá existir armonía con la naturaleza mientras el uno por ciento de la población mundial concentra más del 50 por ciento de las riquezas del orbe.
También criticó la pasada XV Cumbre de ls Naciones Unidas en Copenhague (Dinamarca) y el llamado entendimiento de las naciones miembros, pues allí no fueron escuchadas las reivindicaciones de las organizaciones sociales y pueblos originarios.
El capitalismo desarrolla armas para acabar con la vida, un poder político que será derrotado por los pueblos en defensa de la Madre Tierra, agregó.
Asimismo opinó que los países industrializados tienen la obligación de acabar con ese modelo y en las 17 mesas de trabajo en igual cantidad de temas, la cumbre cochabambina debe profundizar sobre las causas estructurales del cambio climático incluida la distribución equitativa del espacio atmosférico.
Dirigiéndose a la ONU precisó que es necesario que los países miembros escuchen, pero también respeten la voluntad de los pueblos, en referencia a la entrega de los acuerdos de la reunión en Cochabamba a los participantes en la próxima cumbre de ONU sobre estos temas, a celebrarse en el balneario mexicano de Cancún, en diciembre próximo.
Morales confirmó la creación de una organización alternativa de los pueblos en defensa de la naturaleza, en caso de que el organismo internacional desconozca los acuerdos de la cita en la capital valluna, una agrupación que antes denominó Unidad de los Pueblos Originarios y Obreros (UNO).
En el acto, oradores a nombre de los cinco continentes y de unos 130 países participantes en la cumbre climática, respaldaron además la iniciativa de Bolivia de realizar el 12 de octubre venidero un referendo mundial sobre medio ambiente y constituir un Tribunal Internacional de Justicia Climática, en el que se juzguen a gobiernos y empresas que atenten contra la vida en el planeta.
El foro cochabambino concluirá pasado mañana con la celebración en el estadio Félix Capriles, de Cochabamba, de El Día Internacional de la Madre Tierra, una propuesta de Bolivia, aprobada por la Asamblea General de las Naciones Unidas en 2009.
El presidente boliviano, Evo Morales, condenó hoy en Cochabamba el sistema capitalista, el cual calificó de principal responsable de la destrucción del planeta.
En la inauguración de la Primera Conferencia Mundial de los Pueblos sobre Cambio Climático, señaló que ese sistema consumista es el enemigo principal de la Madre Tierra, pues busca sólo ganancias en detrimento de la naturaleza.
El capitalismo es puente de asimetrías y de la desigualdad en este mundo, remarcó.
Ante más de 15 mil representantes de los cinco continentes, concentrados en el estadio ecológico Esteban Ramírez, de la localidad de Tuquipaya, Morales leyó una carta a las futuras generaciones para alertar que el planeta está enfermo debido al capitalismo que intenta convertir todo en mercancía.
En la misiva, el dignatario señaló que esa Madre Tierra lastimada nos da avisos con terremotos, maremotos, tsunamis, ciclones, sequias, de ahí la necesidad de protegerla.
En el texto llamó la atención además sobre los emigrantes climáticos, unas 50 millones de personas que en 2050 podría elevarse a 200 millones de víctimas de los impactos negativos del medio ambiente.
La encrucijada definitiva, dijo, es salvar a la Madre Tierra del capitalismo y en ese sentido instó al gran pacto de los pueblos frente a quienes siembran la muerte y la compra de armas.
"Si destruimos al capitalismo, la tarea será cuidar la Madre Tierra con mucho amor", remarcó.
El dignatario señaló también en otra parte de su discurso que mientras no se cambie el capitalismo, las medidas que se adopten en defensa de la Pachamama (Madre Tierra) tendrán carácter precario y temporal.
La disyuntiva que se nos ofrece, agregó, es continuar por el camino del capitalismo que es la muerte o tomar el de la defensa de la vida y la humanidad.
Morales, que comenzó su discurso con el lema de Planeta o Muerte, Venceremos, ovacionado por los representantes originarios e invitados asistentes al foro climático, afirmó que no podrá existir armonía con la naturaleza mientras el uno por ciento de la población mundial concentra más del 50 por ciento de las riquezas del orbe.
También criticó la pasada XV Cumbre de ls Naciones Unidas en Copenhague (Dinamarca) y el llamado entendimiento de las naciones miembros, pues allí no fueron escuchadas las reivindicaciones de las organizaciones sociales y pueblos originarios.
El capitalismo desarrolla armas para acabar con la vida, un poder político que será derrotado por los pueblos en defensa de la Madre Tierra, agregó.
Asimismo opinó que los países industrializados tienen la obligación de acabar con ese modelo y en las 17 mesas de trabajo en igual cantidad de temas, la cumbre cochabambina debe profundizar sobre las causas estructurales del cambio climático incluida la distribución equitativa del espacio atmosférico.
Dirigiéndose a la ONU precisó que es necesario que los países miembros escuchen, pero también respeten la voluntad de los pueblos, en referencia a la entrega de los acuerdos de la reunión en Cochabamba a los participantes en la próxima cumbre de ONU sobre estos temas, a celebrarse en el balneario mexicano de Cancún, en diciembre próximo.
Morales confirmó la creación de una organización alternativa de los pueblos en defensa de la naturaleza, en caso de que el organismo internacional desconozca los acuerdos de la cita en la capital valluna, una agrupación que antes denominó Unidad de los Pueblos Originarios y Obreros (UNO).
En el acto, oradores a nombre de los cinco continentes y de unos 130 países participantes en la cumbre climática, respaldaron además la iniciativa de Bolivia de realizar el 12 de octubre venidero un referendo mundial sobre medio ambiente y constituir un Tribunal Internacional de Justicia Climática, en el que se juzguen a gobiernos y empresas que atenten contra la vida en el planeta.
El foro cochabambino concluirá pasado mañana con la celebración en el estadio Félix Capriles, de Cochabamba, de El Día Internacional de la Madre Tierra, una propuesta de Bolivia, aprobada por la Asamblea General de las Naciones Unidas en 2009.