Cadena perpetua para el asesino de un médico abortista de EE UU
Madrid, Agencias
Un juez de Kansas ha condenado a cadena perpetua a Scott Roeder por el asesinato en mayo de 2009 del médico abortista George Tiller a las puertas de una iglesia de Wichita. Roeder fue declarado culpable del cargo de homicidio premeditado en primer grado el pasado mes de enero y el juez Warren Wilbert ha decidido imponer al hombre, de 52 años, el castigo más duro posible porque durante el juicio, los fiscales demostraron que acosó a su víctima antes de asesinarlo. Roeder solo podrá salir en libertad condicional de prisión una vez que cumpla 50 años de condena.
Durante el juicio Roeder admitió, tras negarlo en un principio, haber matado de un tiro al médico porque efectuaba abortos a mujeres en avanzado estado de gestación (dentro de los límites de las leyes de Kansas). El asesino confeso, aseguró no arrepentirse del crimen porque "si alguien no detenía al doctor George Tiller, iba a seguir haciendo lo que había hecho durante 36 años: matar niños" y comparó los abortos con un asesinato premeditado.
George Tiller, de 67 años, sufrió numerosos intentos de asesinato a lo largo de su carrera , ya le habían disparado en 1993 y había sufrido un atentado con bomba en su clínica en 1986. Era un referente del movimiento abortista y director médico de una de las tres únicas clínicas estadounidenses que interrumpen embarazos tras la semana 21, cuando la medicina considera que el feto es viable. Días antes de ser asesinado se enfrentó a un juicio por supuesta violación de las leyes estatales del aborto y fue absuelto de todos los cargos.
Un juez de Kansas ha condenado a cadena perpetua a Scott Roeder por el asesinato en mayo de 2009 del médico abortista George Tiller a las puertas de una iglesia de Wichita. Roeder fue declarado culpable del cargo de homicidio premeditado en primer grado el pasado mes de enero y el juez Warren Wilbert ha decidido imponer al hombre, de 52 años, el castigo más duro posible porque durante el juicio, los fiscales demostraron que acosó a su víctima antes de asesinarlo. Roeder solo podrá salir en libertad condicional de prisión una vez que cumpla 50 años de condena.
Durante el juicio Roeder admitió, tras negarlo en un principio, haber matado de un tiro al médico porque efectuaba abortos a mujeres en avanzado estado de gestación (dentro de los límites de las leyes de Kansas). El asesino confeso, aseguró no arrepentirse del crimen porque "si alguien no detenía al doctor George Tiller, iba a seguir haciendo lo que había hecho durante 36 años: matar niños" y comparó los abortos con un asesinato premeditado.
George Tiller, de 67 años, sufrió numerosos intentos de asesinato a lo largo de su carrera , ya le habían disparado en 1993 y había sufrido un atentado con bomba en su clínica en 1986. Era un referente del movimiento abortista y director médico de una de las tres únicas clínicas estadounidenses que interrumpen embarazos tras la semana 21, cuando la medicina considera que el feto es viable. Días antes de ser asesinado se enfrentó a un juicio por supuesta violación de las leyes estatales del aborto y fue absuelto de todos los cargos.