Brasil y Bolivia encararán programas de integración y desarrollo
Adalid Cabrera Lemuz, La Paz, Abi
Los gobiernos de Brasil y de Bolivia reiniciaron el miércoles en La Paz un encuentro al más alto nivel con el objetivo de fortalecer sus relaciones bilaterales y activar una serie de acuerdos de integración y desarrollo, informaron sus autoridades.
Una delegación brasileña, encabezada por el asesor para Asuntos Especiales del presidente Luiz Inácio Lula da Silva, Marco Aurelio García, llegó a La Paz para reunirse con sus homólogos del gobierno y de empresas públicas y privadas.
La comisión brasileña está integrada por ejecutivos de los sectores público y privado que han conformado comisiones con Bolivia para dar forma a las iniciativas.
García es un experimentado conocedor de la problemática latinoamericana y permanece como asesor de Lula desde el inicio de su mandato Presidencial el año 2002.
En un contacto con la prensa, García confirmó que los acuerdos boliviano-brasileños "tienen que ver con la integración caminera, plantas hidroeléctricas, industrialización del gas y la dotación de tecnología para diversos sectores".
La ministra de Planificación para el Desarrollo, Elba Viviana Caro Hinojosa, señaló que desde este miércoles delegaciones de las dos naciones analizan asuntos de interés bilateral.
Destacó la presencia en la delegación brasileña de empresarios petroleros, de la industria, comercio y ciencia y tecnología, además de responsables de empresas estatales de proyección internacional, como Petróleos Brasileños Sociedad Anónima (PETROBRAS) Y Electricidad de Brasil (ELECTROBRAS).
Señaló que entre los asuntos abordados se incluye la mecanización del agro tomando en cuenta la experiencia de Brasil en ese campo, una vez que es uno de los principales exportadores mundiales de productos agropecuarios.
Dijo que igualmente se evalúan acuerdos para la explotación asociada de la industrialización del gas que posee Bolivia, cuyo volumen se conocerá a ciencia cierta en agosto, a la conclusión de un estudio de cuantificación que elabora una empresa extranjera.
Caro puntualizó que Brasil y Bolivia comenzaron a dar forma a la construcción de un tren eléctrico de gran envergadura y longitud que una las poblaciones de Puerto Suárez, en la frontera con Brasil, y Pisiga, Chile.
"Dada la posición geográfica estratégica, Bolivia podría constituirse en el paso obligado del comercio entre Brasil y Chile, es decir entre el Atlántico y Pacífico, con los beneficios que ello significa para el desarrollo nacional", indicó.
Expresó que el proyecto ha sido bien acogido por Brasil, mucho más si se toma en cuenta que tiene en el mercado de China uno de sus principales fuentes de captación de ingresos. Su producción podría salir a ultramar a través del tren eléctrico.
"El tren eléctrico interesa a Bolivia de cara a los acuerdos que lleva adelante con India, una vez que una de sus empresas, Jindal Steel, explota hierro del Mutún con miras a industrializarlo y exportarlo, y con Corea que es uno de los principales mercados de los minerales bolivianos", anotó.
Subrayó que a ese proyecto podrían sumarse otras naciones de la región como Argentina, Uruguay, Paraguay y Perú.
Si bien manifestó que el proyecto del tren eléctrico no tiene aún un diseño final ni se ha definido el costo que demandará y podría ser realidad en más de siete años, se constituye en unas de las iniciativas más importantes de las relaciones boliviano-brasileñas.
Con relación a los acuerdos en el sector hidroeléctrico, la Ministra destacó la experiencia brasileña que se suma al alto potencial de energía que tiene Bolivia y su capacidad de `producción con tecnología que no provoque daños al medio ambiente.
Mencionó que el Gobierno ha reiterado su determinación de ampliar la producción de energía eléctrica para satisfacer el consumo nacional, pero fundamentalmente para exportar a otras naciones.
Caro anotó que la instalación de plantas de generación de electricidad de Cachuela Esperanza, Miguillas y Rosita son algunos de los proyectos para el crecimiento del sector.
Agregó que Brasil y Bolivia también impulsarán acuerdos para la instalación de un polo petroquímico, cuya ubicación está aún por definirse al igual que sus costos.
Sobre la explotación de las reservas de las salmueras del salar de Uyuni, Caro dijo que ha sido presentada una propuesta, pero aclaró que el Gobierno prefiere esperar la recepción de proyectos completos anunciados por otros países y empresas privadas que incluyan la industrialización del litio para analizarlos junto al de Brasil.
Otro de los sectores que son abordados por Brasil y Bolivia en La Paz se refiere a las manufacturas de textiles, mucho más si esa nación vecina ha abierto su mercado por dos años en forma preferente. "Nos queda aún un año y Bolivia debe aprovechar lo más que pueda para generar recursos", dijo.
Con relación a la integración vial, la Ministra resaltó que hay avances para acuerdos de conexión caminera con la cooperación brasileña, como la construcción de la doble vía Montero (Santa Cruz)-Cristalmayu (Cochabamba), La Paz-Oruro, Oruro-Cochabamba y una de vinculación interoceánica entre Brasil y Chile.
La instalación de la planta de producción de azúcar de San Buenaventura también fue abordada por ambas delegaciones con la perspectiva de que Bolivia considere y defina cuál de los tres tipos de tecnología brasileña es la más adecuada.
"Brasil es uno de los principales productores mundiales de azúcar y su experiencia será importante para dotar a San Buenaventura de la tecnología más adecuada para potenciar su producción", dijo.
Recalcó que Bolivia tiene interés en asociarse con empresas públicas y privadas de Brasil para emprender diversos programas de desarrollo.
Destacó por ejemplo la capacidad tecnológica y de gestión de las empresas estatales brasileñas PETROBRAS y ELECTROBRAS para lograr acuerdos de cooperación en los sectores de energía petrolera y eléctrica, respectivamente.
Los gobiernos de Brasil y de Bolivia reiniciaron el miércoles en La Paz un encuentro al más alto nivel con el objetivo de fortalecer sus relaciones bilaterales y activar una serie de acuerdos de integración y desarrollo, informaron sus autoridades.
Una delegación brasileña, encabezada por el asesor para Asuntos Especiales del presidente Luiz Inácio Lula da Silva, Marco Aurelio García, llegó a La Paz para reunirse con sus homólogos del gobierno y de empresas públicas y privadas.
La comisión brasileña está integrada por ejecutivos de los sectores público y privado que han conformado comisiones con Bolivia para dar forma a las iniciativas.
García es un experimentado conocedor de la problemática latinoamericana y permanece como asesor de Lula desde el inicio de su mandato Presidencial el año 2002.
En un contacto con la prensa, García confirmó que los acuerdos boliviano-brasileños "tienen que ver con la integración caminera, plantas hidroeléctricas, industrialización del gas y la dotación de tecnología para diversos sectores".
La ministra de Planificación para el Desarrollo, Elba Viviana Caro Hinojosa, señaló que desde este miércoles delegaciones de las dos naciones analizan asuntos de interés bilateral.
Destacó la presencia en la delegación brasileña de empresarios petroleros, de la industria, comercio y ciencia y tecnología, además de responsables de empresas estatales de proyección internacional, como Petróleos Brasileños Sociedad Anónima (PETROBRAS) Y Electricidad de Brasil (ELECTROBRAS).
Señaló que entre los asuntos abordados se incluye la mecanización del agro tomando en cuenta la experiencia de Brasil en ese campo, una vez que es uno de los principales exportadores mundiales de productos agropecuarios.
Dijo que igualmente se evalúan acuerdos para la explotación asociada de la industrialización del gas que posee Bolivia, cuyo volumen se conocerá a ciencia cierta en agosto, a la conclusión de un estudio de cuantificación que elabora una empresa extranjera.
Caro puntualizó que Brasil y Bolivia comenzaron a dar forma a la construcción de un tren eléctrico de gran envergadura y longitud que una las poblaciones de Puerto Suárez, en la frontera con Brasil, y Pisiga, Chile.
"Dada la posición geográfica estratégica, Bolivia podría constituirse en el paso obligado del comercio entre Brasil y Chile, es decir entre el Atlántico y Pacífico, con los beneficios que ello significa para el desarrollo nacional", indicó.
Expresó que el proyecto ha sido bien acogido por Brasil, mucho más si se toma en cuenta que tiene en el mercado de China uno de sus principales fuentes de captación de ingresos. Su producción podría salir a ultramar a través del tren eléctrico.
"El tren eléctrico interesa a Bolivia de cara a los acuerdos que lleva adelante con India, una vez que una de sus empresas, Jindal Steel, explota hierro del Mutún con miras a industrializarlo y exportarlo, y con Corea que es uno de los principales mercados de los minerales bolivianos", anotó.
Subrayó que a ese proyecto podrían sumarse otras naciones de la región como Argentina, Uruguay, Paraguay y Perú.
Si bien manifestó que el proyecto del tren eléctrico no tiene aún un diseño final ni se ha definido el costo que demandará y podría ser realidad en más de siete años, se constituye en unas de las iniciativas más importantes de las relaciones boliviano-brasileñas.
Con relación a los acuerdos en el sector hidroeléctrico, la Ministra destacó la experiencia brasileña que se suma al alto potencial de energía que tiene Bolivia y su capacidad de `producción con tecnología que no provoque daños al medio ambiente.
Mencionó que el Gobierno ha reiterado su determinación de ampliar la producción de energía eléctrica para satisfacer el consumo nacional, pero fundamentalmente para exportar a otras naciones.
Caro anotó que la instalación de plantas de generación de electricidad de Cachuela Esperanza, Miguillas y Rosita son algunos de los proyectos para el crecimiento del sector.
Agregó que Brasil y Bolivia también impulsarán acuerdos para la instalación de un polo petroquímico, cuya ubicación está aún por definirse al igual que sus costos.
Sobre la explotación de las reservas de las salmueras del salar de Uyuni, Caro dijo que ha sido presentada una propuesta, pero aclaró que el Gobierno prefiere esperar la recepción de proyectos completos anunciados por otros países y empresas privadas que incluyan la industrialización del litio para analizarlos junto al de Brasil.
Otro de los sectores que son abordados por Brasil y Bolivia en La Paz se refiere a las manufacturas de textiles, mucho más si esa nación vecina ha abierto su mercado por dos años en forma preferente. "Nos queda aún un año y Bolivia debe aprovechar lo más que pueda para generar recursos", dijo.
Con relación a la integración vial, la Ministra resaltó que hay avances para acuerdos de conexión caminera con la cooperación brasileña, como la construcción de la doble vía Montero (Santa Cruz)-Cristalmayu (Cochabamba), La Paz-Oruro, Oruro-Cochabamba y una de vinculación interoceánica entre Brasil y Chile.
La instalación de la planta de producción de azúcar de San Buenaventura también fue abordada por ambas delegaciones con la perspectiva de que Bolivia considere y defina cuál de los tres tipos de tecnología brasileña es la más adecuada.
"Brasil es uno de los principales productores mundiales de azúcar y su experiencia será importante para dotar a San Buenaventura de la tecnología más adecuada para potenciar su producción", dijo.
Recalcó que Bolivia tiene interés en asociarse con empresas públicas y privadas de Brasil para emprender diversos programas de desarrollo.
Destacó por ejemplo la capacidad tecnológica y de gestión de las empresas estatales brasileñas PETROBRAS y ELECTROBRAS para lograr acuerdos de cooperación en los sectores de energía petrolera y eléctrica, respectivamente.