Viacom y YouTube ventilan sus trapos sucios en batalla legal
San Francisco, Agencias
Detalles poco favorables de Viacom Inc. y el portal de videos de Google, YouTube, empezaron a salir a la luz pública en medio de un feroz enfrentamiento sobre las leyes de derecho de autor que gobiernan el mundo digital.
Las operaciones de ambas empresas forman parte de las pruebas reunidas en el proceso judicial tras la demanda que Viacom le inició a YouTube en el 2007, en la que alega que el portal violó los derechos de autor de programas estadounidenses de gran audiencia como el noticiero satírico "The Daily Show".
Los documentos salieron a la luz pública el jueves porque ambas partes quieren convencer al juez federal Louis Stanton para que tome una decisión sobre el caso, sin tener que ir a un juicio.
Pero ni YouTube ni Viacom quedaban muy bien parados en el proceso.
Correos electrónicos internos de YouTube presentan al menos a uno de los fundadores de la compañía como un pirateador de videos y apuntan a que sus empleados estaban más interesados en ganar dinero rápidamente que en respetar las leyes que protegen los derechos de autor.
Otros documentos muestran cómo Viacom quería comprar YouTube al menos siete meses antes de introducir la demanda y, a menudo, usó la página para promover sus programas de cable.
Google compró YouTube por 1.760 millones de dólares en noviembre del 2006, pero no antes de que Viacom intentara convencer a Google de que le hicieran una oferta conjunta al portal de videos. Unos meses más tarde, Google propuso pagarle a Viacom 590 millones de dólares por los derechos de los videos, según los documentos.
En lugar de aceptar el pago, Viacom, dueña de Paramount Pictures y canales de televisión por cable como Comedy Central, decidió demandar a Google y a YouTube por más de 1.000 millones de dólares.
La compañía de medios alega que YouTube permitió que videos de su programación, protegidos por leyes de derecho de autor, fueran publicados en los inicios del portal para atraer más usuarios.
YouTube señala, por su parte, que siempre ha cumplido las leyes de derecho de autor digitales, las cuales tienden a proteger a los portales, siempre y cuando no hayan sido ellos mismo los que publicaron el material pirata y lo retiren una vez se les notifique la violación.
Detalles poco favorables de Viacom Inc. y el portal de videos de Google, YouTube, empezaron a salir a la luz pública en medio de un feroz enfrentamiento sobre las leyes de derecho de autor que gobiernan el mundo digital.
Las operaciones de ambas empresas forman parte de las pruebas reunidas en el proceso judicial tras la demanda que Viacom le inició a YouTube en el 2007, en la que alega que el portal violó los derechos de autor de programas estadounidenses de gran audiencia como el noticiero satírico "The Daily Show".
Los documentos salieron a la luz pública el jueves porque ambas partes quieren convencer al juez federal Louis Stanton para que tome una decisión sobre el caso, sin tener que ir a un juicio.
Pero ni YouTube ni Viacom quedaban muy bien parados en el proceso.
Correos electrónicos internos de YouTube presentan al menos a uno de los fundadores de la compañía como un pirateador de videos y apuntan a que sus empleados estaban más interesados en ganar dinero rápidamente que en respetar las leyes que protegen los derechos de autor.
Otros documentos muestran cómo Viacom quería comprar YouTube al menos siete meses antes de introducir la demanda y, a menudo, usó la página para promover sus programas de cable.
Google compró YouTube por 1.760 millones de dólares en noviembre del 2006, pero no antes de que Viacom intentara convencer a Google de que le hicieran una oferta conjunta al portal de videos. Unos meses más tarde, Google propuso pagarle a Viacom 590 millones de dólares por los derechos de los videos, según los documentos.
En lugar de aceptar el pago, Viacom, dueña de Paramount Pictures y canales de televisión por cable como Comedy Central, decidió demandar a Google y a YouTube por más de 1.000 millones de dólares.
La compañía de medios alega que YouTube permitió que videos de su programación, protegidos por leyes de derecho de autor, fueran publicados en los inicios del portal para atraer más usuarios.
YouTube señala, por su parte, que siempre ha cumplido las leyes de derecho de autor digitales, las cuales tienden a proteger a los portales, siempre y cuando no hayan sido ellos mismo los que publicaron el material pirata y lo retiren una vez se les notifique la violación.