El dólar sigue su implacable avance contra el euro
El euro, la moneda única, forjada en el seno de la antigua Comunidad Económica Europea, afronta su examen más crítico frente a la embestida del dólar, como vaticinan los especialistasEl euro, la moneda única, forjada en el seno de la antigua Comunidad Económica Europea, afronta su examen más crítico frente a la embestida del dólar, estiman los especialistas.
Más allá de ser socios complementarios en la depredación del planeta, EEUU y la UE, sus bancos y corporaciones empresariales, mantienen una guerra intercapitalista permanente por el control de los mercados.
Esa competencia interna tuvo un particular punto de inflexión con la crisis fiscal de la eurozona y el avance del dólar sobre el euro en los últimos días. El proyecto de creación de un fondo monetario europeo respondió a esa guerra.
Como consecuencia de la debilidad de su recuperación económica y del efecto contagio de la crisis fiscal que atraviesan algunos de sus integrantes, la Unión Europea transita por el peor momento histórico desde su creación y los peligros de desmembramiento y de ruptura de su moneda ya ocupan el centro del debate.
"Ahora que volvemos a los tiempos de crisis, sube el dólar", señala el Financial Times. "En cuanto los inversores pierden su apetito por el riesgo, vuelven a depositar su dinero en EEUU, con independencia del estado en el que se encuentre la economía estadounidense", añade.
Para el financiero británico, "Esa fue la conclusión de la gran crisis financiera, cuando el dólar se revalorizó un 24% en términos ponderados, de julio a noviembre de 2008. Esa misma conclusión se puede seguir aplicando en este momento. El dólar ha aumentado un 10,5% desde que comenzara la crisis griega, que provocó el pánico de los mercados en diciembre del año pasado".
"El índice ponderado según la balanza comercial, en 81,8, está en su punto más alto desde el pasado mes de mayo, aunque el hecho de que permanezca muy por debajo del máximo alcanzado en 2008, un 89,6, pone de manifiesto que esta crisis no se considera por el momento comparable a la última", apunta el Financial.
En este escenario, el ánimo de los especuladores internacionales pasó del pesimismo frente al dólar al pesimismo sobre el euro.
La crisis griega terminó de detonar un debate interno en la UE, y en los últimos días cobró forma la idea (impulsadas por Francia y Alemania) de crear un fondo monetario europeo como barrera de contención frente al avance del dólar y su impacto negativo en la eurozona.
Para el Financial Times "Lo que resulta significativo de la revalorización del dólar es que haya coincidido con lo que parecía una pérdida de confianza del mercado en la capacidad del Gobierno de EEUU de hacer frente a su nivel de deuda a largo plazo. La rentabilidad de los bonos del Tesoro del país a diez años ha subido 13 puntos básicos hasta el 3,82%, cifra cercana al máximo registrado después de una crisis".
"El dato -señala- implica una venta masiva de bonos estadounidenses. No obstante, a juzgar por la evolución del dólar, todo parece indicar que se han efectuado compras de activos denominados en dólares. Esa extraña combinación hace pensar que las contradicciones internas de la recuperación (europea) empiezan a ser evidentes. También demuestra la grave falta de confianza en el euro".
Según The Financial Times, un FMI europeo sería el primer paso para coordinar mejor las políticas fiscales, y cerraría la puerta a los fondos y especuladores estadounidenses cuyas operaciones están desequilibrando las economías en crisis, principalmente Grecia y España.
Los problemas de Grecia han puesto de relieve no sólo la ausencia de mecanismos para abordar la situación de un miembro de la eurozona en riesgo de impago, sino también el fracaso del pacto de estabilidad a la hora de poner freno a la deuda y el déficit.
Los problemas de Grecia dejaron de manifiesto la fragilidad de la recuperación de la zona euro y cualquier "nerviosismo" sobre la economía y el enorme déficit fiscal estadounidense quedó relegado a un segundo plano.
De esta manera, el dólar se viene apreciando sobre el euro y ha vuelto a servir de refugio seguro para los especuladores internacionales preocupados por el contagio de la crisis de la deuda, tanto de EEUU como de la Unión Europea.
La cuestión se remite a un aspecto central: Los especuladores internacionales (ante el embate de la nueva crisis fiscal en la eurozona) compran deuda pública estadounidense garantizada por el "refugio seguro" del dólar.
En general, la sombra de una insolvencia de pago generalizada (producida por los déficit y la baja de recaudación fiscal) hace temer un rebrote de la crisis financiera, y sigue favoreciendo la embestida del dólar contra el euro..
Ante esta situación, y más de una década después de activarse la divisa que unió a doce monedas nacionales como la peseta española, surge un debate sobre continuar o no con el euro en el seno de la UE.
La discusión sobre una potencial desmembración (parcial o total) del euro se ha extendido en las últimas semanas sobre muchas economías europeas y, en particular, sobre las más débiles.
Más allá de ser socios complementarios en la depredación del planeta, EEUU y la UE, sus bancos y corporaciones empresariales, mantienen una guerra intercapitalista permanente por el control de los mercados.
Esa competencia interna tuvo un particular punto de inflexión con la crisis fiscal de la eurozona y el avance del dólar sobre el euro en los últimos días. El proyecto de creación de un fondo monetario europeo respondió a esa guerra.
Como consecuencia de la debilidad de su recuperación económica y del efecto contagio de la crisis fiscal que atraviesan algunos de sus integrantes, la Unión Europea transita por el peor momento histórico desde su creación y los peligros de desmembramiento y de ruptura de su moneda ya ocupan el centro del debate.
"Ahora que volvemos a los tiempos de crisis, sube el dólar", señala el Financial Times. "En cuanto los inversores pierden su apetito por el riesgo, vuelven a depositar su dinero en EEUU, con independencia del estado en el que se encuentre la economía estadounidense", añade.
Para el financiero británico, "Esa fue la conclusión de la gran crisis financiera, cuando el dólar se revalorizó un 24% en términos ponderados, de julio a noviembre de 2008. Esa misma conclusión se puede seguir aplicando en este momento. El dólar ha aumentado un 10,5% desde que comenzara la crisis griega, que provocó el pánico de los mercados en diciembre del año pasado".
"El índice ponderado según la balanza comercial, en 81,8, está en su punto más alto desde el pasado mes de mayo, aunque el hecho de que permanezca muy por debajo del máximo alcanzado en 2008, un 89,6, pone de manifiesto que esta crisis no se considera por el momento comparable a la última", apunta el Financial.
En este escenario, el ánimo de los especuladores internacionales pasó del pesimismo frente al dólar al pesimismo sobre el euro.
La crisis griega terminó de detonar un debate interno en la UE, y en los últimos días cobró forma la idea (impulsadas por Francia y Alemania) de crear un fondo monetario europeo como barrera de contención frente al avance del dólar y su impacto negativo en la eurozona.
Para el Financial Times "Lo que resulta significativo de la revalorización del dólar es que haya coincidido con lo que parecía una pérdida de confianza del mercado en la capacidad del Gobierno de EEUU de hacer frente a su nivel de deuda a largo plazo. La rentabilidad de los bonos del Tesoro del país a diez años ha subido 13 puntos básicos hasta el 3,82%, cifra cercana al máximo registrado después de una crisis".
"El dato -señala- implica una venta masiva de bonos estadounidenses. No obstante, a juzgar por la evolución del dólar, todo parece indicar que se han efectuado compras de activos denominados en dólares. Esa extraña combinación hace pensar que las contradicciones internas de la recuperación (europea) empiezan a ser evidentes. También demuestra la grave falta de confianza en el euro".
Según The Financial Times, un FMI europeo sería el primer paso para coordinar mejor las políticas fiscales, y cerraría la puerta a los fondos y especuladores estadounidenses cuyas operaciones están desequilibrando las economías en crisis, principalmente Grecia y España.
Los problemas de Grecia han puesto de relieve no sólo la ausencia de mecanismos para abordar la situación de un miembro de la eurozona en riesgo de impago, sino también el fracaso del pacto de estabilidad a la hora de poner freno a la deuda y el déficit.
Los problemas de Grecia dejaron de manifiesto la fragilidad de la recuperación de la zona euro y cualquier "nerviosismo" sobre la economía y el enorme déficit fiscal estadounidense quedó relegado a un segundo plano.
De esta manera, el dólar se viene apreciando sobre el euro y ha vuelto a servir de refugio seguro para los especuladores internacionales preocupados por el contagio de la crisis de la deuda, tanto de EEUU como de la Unión Europea.
La cuestión se remite a un aspecto central: Los especuladores internacionales (ante el embate de la nueva crisis fiscal en la eurozona) compran deuda pública estadounidense garantizada por el "refugio seguro" del dólar.
En general, la sombra de una insolvencia de pago generalizada (producida por los déficit y la baja de recaudación fiscal) hace temer un rebrote de la crisis financiera, y sigue favoreciendo la embestida del dólar contra el euro..
Ante esta situación, y más de una década después de activarse la divisa que unió a doce monedas nacionales como la peseta española, surge un debate sobre continuar o no con el euro en el seno de la UE.
La discusión sobre una potencial desmembración (parcial o total) del euro se ha extendido en las últimas semanas sobre muchas economías europeas y, en particular, sobre las más débiles.