Bolivia afirma pingües ganancias y Argentina gas, tras exaltación histórica de Juana Azurduy
Sucre, Abi
Los presidentes de Argentina, Cristina Fernández, y de Bolivia, Evo Morales, que coincidieron en la exaltación de la heroína regional del siglo XIX, Juana Azurduy, renovaron el viernes en la ciudad de Sucre un acuerdo energético que implica la venta progresiva de hasta 27,7 millones de metros cúbicos día (MMCD) de gas boliviano hasta 2026 y ganancias para el vendedor de entre 18.000 y 23.000 millones de dólares en 16 años, además de penalidades en caso de incumplimiento en el formato 'take or page' (tome o pague).
La adenda al contrato firmado el viernes para la compra-venta de gas boliviano a Argentina, establece penalidades en caso de que alguno de los dos países incumpla en las obligaciones derivadas de la recepción o entrega del combustible.
De esa manera se contará con mecanismos que motiven el estricto cumplimiento del contrato entre Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) y la empresa Energía Argentina Sociedad Anónima (ENARSA), suscribientes del acuerdo de complementación energética.
"Con el objetivo de contar con mecanismos que motiven el estricto cumplimiento del contrato, también se incorporaron penalidades. En caso de faltante de suministro, YPFB pagará a ENARSA una penalidad en función a la diferencia entre cantidades requeridas y las cantidades efectivamente entregadas. Recíprocamente, en caso de presentarse una falla de recepción, ENARSA deberá pagar a YPFB una penalidad en función a la diferencia entre las cantidades puestas a disposición y las cantidades efectivamente recibidas", señala una de las cláusulas del contrato.
Asimismo, establece que el cumplimiento de la adenda suscrita entre ambas empresas estatales, significará para Bolivia un ingreso estimado en punto de fiscalización, de entre 18.000 millones de dólares a 23.000 millones de dólares en el período 2010-2026.
De la suma, en el mismo periodo, el Estado recaudará entre 9.000 millones de dólares y 11.000 millones de dólares por concepto de Regalías y Participaciones e Impuesto Directo a los Hidrocarburos (IDH), que serán repartidos entre las regiones productoras de gas y los distintos departamentos para su desarrollo.
"Hemos negociado este último tiempo para llegar a acuerdos, entre ellos el envío regular de gas natural a Argentina. Vamos a empezar por un volumen de 5 MMCD, como una cantidad mínima y que gradualmente con el tiempo va a ir aumentando hasta llegar a 27,7 MMCD", dijo Carlos Villegas, presidente de YPFB.
El contrato también establece que la diferencia en relación al ingreso bruto y al ingreso neto permitirá cubrir los costos de producción, transporte y otras facilidades del desarrollo de campos, así como las utilidades de YPFB y las empresas titulares de contratos de operación.
"Bolivia se compromete a realizar inversiones para asegurar el incremento de producción. Asimismo, Argentina nos da garantías recíprocas, como licitarse la compra de materiales para construir en territorio argentino el gasoducto Juana Azurduy", agregó Villegas.
En su primera fase, el gasoducto de integración incrementará la capacidad de transporte de 7,7 hasta 13 MMCD.
En Bolivia, el gasoducto tendrá una extensión de 15 km, un diámetro de 32 pulgadas y unirá el punto de interconexión gasoducto Yabog (Campo Grande) y Madrejones en la frontera con Argentina.
La inversión estimada para la construcción de este gasoducto, que será inaugurado en mayo de 2011, es de 43 millones de dólares.
Por su parte, ENARSA, inició la licitación llave en mano de este mismo gasoducto en el lado argentino, el que tendrá una extensión de 32 km unirá el punto de interconexión con Campo Durán.
El ducto tendrá 30 pulgadas de diámetro, con una inversión estimada de 55 millones de dólares.
"Durante el tiempo de construcción del gasoducto noreste argentino (GNEA), YPFB y ENARSA acordaron notificarse mutuamente sobre el estado de avance de las obras de este proyecto de integración energética. Por otro lado, ambas empresas estatales reafirmaron el compromiso de entrega y recepción de mayores volúmenes de gas natural, consolidando el contrato vigente desde el 19 de octubre de 2006", anota el contrato.
Asimismo, YPFB y ENARSA comprometieron el cumplimiento de los volúmenes de compra venta de gas natural, originalmente establecidos en el contrato, además de la ejecución de las inversiones necesarias para el desarrollo de los campos productores de gas natural en Bolivia y el desarrollo del mercado energético en argentina.
En función del comportamiento del mercado argentino los compromisos de suministro y recepción se definieron por carácter estacional, es decir que comprenden un período de verano (demanda baja) y un período de invierno (demanda alta).
"En invierno Argentina demanda más volúmenes de gas por día y en verano menos; esa estacionalidad va a seguir en el contrato dependiendo de la demanda argentina de gas", explicó el presidente de YPFB.
La adenda entrará en vigencia desde el 1 de mayo de 2010.
Villegas aseguró que la adenda "estabilizará" la venta de gas a Argentina y generará mayores recursos para que el pueblo y el Estado boliviano se beneficien.
La adenda ratificó el contrato firmado en 2004 y perfeccionado en 2006 con un tope de 7,7 MMCD que con la adenda crecerá de manera gradual hasta 27 MMCD.
El denominado convenio para la integración energética fue firmado por el ministro de Hidrocarburos y Energía de Bolivia, Fernando Vincenti y el ministro de Planificación Federal Inversión Pública y Servicios de Argentina, Julio de Vido en un acto popular que se realizó en un coliseo deportivo de la capital constitucional de Bolivia.
Bolivia posee la segunda reserva probada y probable de gas natural de Sudamérica, de 1,66 trillones de MMC.
Morales calificó la jornada de "hermandad" boliviano argentina de "día histórico".
"Dos presidentes se reúnen para reflexionar sobre el pasado histórico, el presente y proyectar acuerdos conjuntos de desarrollo", resaltó.
Agregó que son "convenios y acuerdos bilaterales para que los pueblos se beneficien, lo que debe ser nuestro principal objetivo".
"Debemos fomentar una mayor amistad, hermandad y confianza entre los presidentes de los países latinoamericanos para encarar con solidaridad el desarrollo conjunto", mantuvo.
El acuerdo energético redondeó la visita que la jefa de Estado argentino cumplió a Bolivia y en la que homenajeó la lucha libertaria de Juana Azurduy de Padilla (1780-1867), a la que otorgó, de manera póstuma, el grado de generala del Ejército de su país.
Ante los despojos mortales de la heroína boliviana, Fernández entregó un sable, símbolo de empoderamiento de las armas argentinas, a su colega boliviano Evo Morales, quien representó a Juana Azurduy, en la histórica Casa de la Libertad, en Sucre, donde fue declarada en 1825 la independencia de Bolivia.
"Como Presidente de los argentinos, permítanme también, como mujer y como militante política de toda la vida, es un gran honor estar hoy aquí, ante ella, ante sus restos (mortales), para imponerle y entregarle a usted, presidente compañero Morales del Estado Plurinacional de Bolivia, la espada de generala del Ejército argentino que se lo entrego con mucho honor y gloria para ella y para nuestros pueblos", dijo la mandataria argentina.
Su homólogo boliviano exaltó, por su parte, "la lucha de la heroína por la independencia" que representa "un llamado a los pueblos a derrotar en la actualidad al colonialismo interno y externo".
"La lucha de esta heroína no ha sido en vano y es un ejemplo que mueve a los pueblos a proseguir adelante con la lucha por la liberación de los pueblos", afirmó.
A su turno el vicepresidente Álvaro García puso en relieve el legado y la lucha de Juana Azurduy "por una patria grande".
"Luchaba por una patria grande y que no estaba dividida por fronteras", remarcó al considerar que fueron los "burócratas los que convirtieron esas guerras de la independencia en un continente desmembrado".
Como una señal del la hermandad de ambos pueblos, Morales y Fernández instituyeron el 12 de junio de todos los años el Día de la Confraternidad Argentina-Boliviana, en memoria del natalicio de Juana Azurduy.
El encuentro presidencial se inscribió en clima de paz, de respeto y muy festivo
Todas las banderas políticas de una frenética campaña electoral que están enarboladas para las elecciones regiones del 4 de abril se arriaron y los chuquisaqueños se unieron en torno a la legendaria figura de una de las estampas emblemáticas de la guerra de la independencia americana.
Morales se dijo gratamente sorprendido "por el pueblo de Sucre, por este cariño del pueblo de Sucre hacia la Presidenta y toda la delegación argentina".
A la conclusión del acto de firma de acuerdos, el Presidente boliviano entregó a la mandataria argentina una moneda acuñada en Bolivia el año 1813 y una piedra preciosa La Bolivianita, engarzada en una joya por un orfebre boliviano.
Antes de retornar a su país, Fernández llamó, en tono de elogio, a Morales y García Linera, a profundizar, "con más justicia social y libertad" el proceso de cambio estructural que se verifica en Bolivia.
"Adelante, a seguir profundizado en la transformación, en los cambios, con más justicia, con más libertad y con más derechos", dijo. ABI
Los presidentes de Argentina, Cristina Fernández, y de Bolivia, Evo Morales, que coincidieron en la exaltación de la heroína regional del siglo XIX, Juana Azurduy, renovaron el viernes en la ciudad de Sucre un acuerdo energético que implica la venta progresiva de hasta 27,7 millones de metros cúbicos día (MMCD) de gas boliviano hasta 2026 y ganancias para el vendedor de entre 18.000 y 23.000 millones de dólares en 16 años, además de penalidades en caso de incumplimiento en el formato 'take or page' (tome o pague).
La adenda al contrato firmado el viernes para la compra-venta de gas boliviano a Argentina, establece penalidades en caso de que alguno de los dos países incumpla en las obligaciones derivadas de la recepción o entrega del combustible.
De esa manera se contará con mecanismos que motiven el estricto cumplimiento del contrato entre Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) y la empresa Energía Argentina Sociedad Anónima (ENARSA), suscribientes del acuerdo de complementación energética.
"Con el objetivo de contar con mecanismos que motiven el estricto cumplimiento del contrato, también se incorporaron penalidades. En caso de faltante de suministro, YPFB pagará a ENARSA una penalidad en función a la diferencia entre cantidades requeridas y las cantidades efectivamente entregadas. Recíprocamente, en caso de presentarse una falla de recepción, ENARSA deberá pagar a YPFB una penalidad en función a la diferencia entre las cantidades puestas a disposición y las cantidades efectivamente recibidas", señala una de las cláusulas del contrato.
Asimismo, establece que el cumplimiento de la adenda suscrita entre ambas empresas estatales, significará para Bolivia un ingreso estimado en punto de fiscalización, de entre 18.000 millones de dólares a 23.000 millones de dólares en el período 2010-2026.
De la suma, en el mismo periodo, el Estado recaudará entre 9.000 millones de dólares y 11.000 millones de dólares por concepto de Regalías y Participaciones e Impuesto Directo a los Hidrocarburos (IDH), que serán repartidos entre las regiones productoras de gas y los distintos departamentos para su desarrollo.
"Hemos negociado este último tiempo para llegar a acuerdos, entre ellos el envío regular de gas natural a Argentina. Vamos a empezar por un volumen de 5 MMCD, como una cantidad mínima y que gradualmente con el tiempo va a ir aumentando hasta llegar a 27,7 MMCD", dijo Carlos Villegas, presidente de YPFB.
El contrato también establece que la diferencia en relación al ingreso bruto y al ingreso neto permitirá cubrir los costos de producción, transporte y otras facilidades del desarrollo de campos, así como las utilidades de YPFB y las empresas titulares de contratos de operación.
"Bolivia se compromete a realizar inversiones para asegurar el incremento de producción. Asimismo, Argentina nos da garantías recíprocas, como licitarse la compra de materiales para construir en territorio argentino el gasoducto Juana Azurduy", agregó Villegas.
En su primera fase, el gasoducto de integración incrementará la capacidad de transporte de 7,7 hasta 13 MMCD.
En Bolivia, el gasoducto tendrá una extensión de 15 km, un diámetro de 32 pulgadas y unirá el punto de interconexión gasoducto Yabog (Campo Grande) y Madrejones en la frontera con Argentina.
La inversión estimada para la construcción de este gasoducto, que será inaugurado en mayo de 2011, es de 43 millones de dólares.
Por su parte, ENARSA, inició la licitación llave en mano de este mismo gasoducto en el lado argentino, el que tendrá una extensión de 32 km unirá el punto de interconexión con Campo Durán.
El ducto tendrá 30 pulgadas de diámetro, con una inversión estimada de 55 millones de dólares.
"Durante el tiempo de construcción del gasoducto noreste argentino (GNEA), YPFB y ENARSA acordaron notificarse mutuamente sobre el estado de avance de las obras de este proyecto de integración energética. Por otro lado, ambas empresas estatales reafirmaron el compromiso de entrega y recepción de mayores volúmenes de gas natural, consolidando el contrato vigente desde el 19 de octubre de 2006", anota el contrato.
Asimismo, YPFB y ENARSA comprometieron el cumplimiento de los volúmenes de compra venta de gas natural, originalmente establecidos en el contrato, además de la ejecución de las inversiones necesarias para el desarrollo de los campos productores de gas natural en Bolivia y el desarrollo del mercado energético en argentina.
En función del comportamiento del mercado argentino los compromisos de suministro y recepción se definieron por carácter estacional, es decir que comprenden un período de verano (demanda baja) y un período de invierno (demanda alta).
"En invierno Argentina demanda más volúmenes de gas por día y en verano menos; esa estacionalidad va a seguir en el contrato dependiendo de la demanda argentina de gas", explicó el presidente de YPFB.
La adenda entrará en vigencia desde el 1 de mayo de 2010.
Villegas aseguró que la adenda "estabilizará" la venta de gas a Argentina y generará mayores recursos para que el pueblo y el Estado boliviano se beneficien.
La adenda ratificó el contrato firmado en 2004 y perfeccionado en 2006 con un tope de 7,7 MMCD que con la adenda crecerá de manera gradual hasta 27 MMCD.
El denominado convenio para la integración energética fue firmado por el ministro de Hidrocarburos y Energía de Bolivia, Fernando Vincenti y el ministro de Planificación Federal Inversión Pública y Servicios de Argentina, Julio de Vido en un acto popular que se realizó en un coliseo deportivo de la capital constitucional de Bolivia.
Bolivia posee la segunda reserva probada y probable de gas natural de Sudamérica, de 1,66 trillones de MMC.
Morales calificó la jornada de "hermandad" boliviano argentina de "día histórico".
"Dos presidentes se reúnen para reflexionar sobre el pasado histórico, el presente y proyectar acuerdos conjuntos de desarrollo", resaltó.
Agregó que son "convenios y acuerdos bilaterales para que los pueblos se beneficien, lo que debe ser nuestro principal objetivo".
"Debemos fomentar una mayor amistad, hermandad y confianza entre los presidentes de los países latinoamericanos para encarar con solidaridad el desarrollo conjunto", mantuvo.
El acuerdo energético redondeó la visita que la jefa de Estado argentino cumplió a Bolivia y en la que homenajeó la lucha libertaria de Juana Azurduy de Padilla (1780-1867), a la que otorgó, de manera póstuma, el grado de generala del Ejército de su país.
Ante los despojos mortales de la heroína boliviana, Fernández entregó un sable, símbolo de empoderamiento de las armas argentinas, a su colega boliviano Evo Morales, quien representó a Juana Azurduy, en la histórica Casa de la Libertad, en Sucre, donde fue declarada en 1825 la independencia de Bolivia.
"Como Presidente de los argentinos, permítanme también, como mujer y como militante política de toda la vida, es un gran honor estar hoy aquí, ante ella, ante sus restos (mortales), para imponerle y entregarle a usted, presidente compañero Morales del Estado Plurinacional de Bolivia, la espada de generala del Ejército argentino que se lo entrego con mucho honor y gloria para ella y para nuestros pueblos", dijo la mandataria argentina.
Su homólogo boliviano exaltó, por su parte, "la lucha de la heroína por la independencia" que representa "un llamado a los pueblos a derrotar en la actualidad al colonialismo interno y externo".
"La lucha de esta heroína no ha sido en vano y es un ejemplo que mueve a los pueblos a proseguir adelante con la lucha por la liberación de los pueblos", afirmó.
A su turno el vicepresidente Álvaro García puso en relieve el legado y la lucha de Juana Azurduy "por una patria grande".
"Luchaba por una patria grande y que no estaba dividida por fronteras", remarcó al considerar que fueron los "burócratas los que convirtieron esas guerras de la independencia en un continente desmembrado".
Como una señal del la hermandad de ambos pueblos, Morales y Fernández instituyeron el 12 de junio de todos los años el Día de la Confraternidad Argentina-Boliviana, en memoria del natalicio de Juana Azurduy.
El encuentro presidencial se inscribió en clima de paz, de respeto y muy festivo
Todas las banderas políticas de una frenética campaña electoral que están enarboladas para las elecciones regiones del 4 de abril se arriaron y los chuquisaqueños se unieron en torno a la legendaria figura de una de las estampas emblemáticas de la guerra de la independencia americana.
Morales se dijo gratamente sorprendido "por el pueblo de Sucre, por este cariño del pueblo de Sucre hacia la Presidenta y toda la delegación argentina".
A la conclusión del acto de firma de acuerdos, el Presidente boliviano entregó a la mandataria argentina una moneda acuñada en Bolivia el año 1813 y una piedra preciosa La Bolivianita, engarzada en una joya por un orfebre boliviano.
Antes de retornar a su país, Fernández llamó, en tono de elogio, a Morales y García Linera, a profundizar, "con más justicia social y libertad" el proceso de cambio estructural que se verifica en Bolivia.
"Adelante, a seguir profundizado en la transformación, en los cambios, con más justicia, con más libertad y con más derechos", dijo. ABI