Trump pidió a Hamas la liberación de todos los rehenes con vida para un alto el fuego en Gaza
Las palabras del mandatario estadounidense llegan en un momento en Israel intensificó su operación militar en el devatado enclave palestino
Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) estiman que unos 50 rehenes permanecen en manos de Hamas y otras facciones armadas palestinas desde el ataque del 7 de octubre de 2023. Sin embargo, según información divulgada por el propio ejército israelí, al menos 26 ya habrían muerto. La inteligencia israelí considera que alrededor de una veintena siguen con vida, aunque el número exacto sigue siendo incierto.
Las palabras de Trump llegan en un momento de máxima tensión. Qatar, que junto a Egipto y Estados Unidos actúa como mediador, acusó el martes a Israel de no dar aún una respuesta a la última propuesta de alto el fuego aprobada por Hamas.
El conflicto, que ya supera los 23 meses, se ha cobrado un precio humano devastador. El Ministerio de Sanidad gazatí, bajo control de Hamas, asegura que más de 63.700 palestinos han muerto y otros 161.000 han resultado heridos desde el inicio de la ofensiva israelí. Organismos internacionales advierten que la cifra no puede ser verificada de forma independiente, pero coinciden en describir la situación como una de las peores crisis humanitarias recientes.

La Organización de Naciones Unidas ha denunciado de manera reiterada el uso del hambre como arma de guerra en Gaza. El Programa Mundial de Alimentos declaró en agosto que varias zonas del norte del enclave ya están en “condiciones de hambruna catastrófica”, mientras que el secretario general de la ONU, António Guterres, pidió un acceso inmediato y sin restricciones de la ayuda humanitaria.
En paralelo, Israel intensificó su operación militar. La semana pasada designó a Gaza como “zona de combate peligrosa” y anunció la suspensión de las pausas humanitarias, lo que, según agencias de la ONU, ha agravado la inseguridad alimentaria y ha dejado atrapados a cientos de miles de civiles.
La presión internacional sobre Trump también se acumula. El mandatario ya había condicionado en febrero un cese temporal de las hostilidades a la liberación de todos los rehenes antes de una fecha límite, amenazando con “desatar el infierno” si Hamas no cumplía. Y en julio, reclamó públicamente a las facciones palestinas aceptar un acuerdo de 60 días de tregua diseñado por Egipto y Qatar.
Las negociaciones, no obstante, avanzan con enormes obstáculos. Israel insiste en que cualquier acuerdo debe incluir la desmilitarización de Hamas, mientras que el grupo terrorista condiciona la entrega de los rehenes a una retirada israelí y a garantías de reconstrucción para Gaza. El resultado ha sido un estancamiento prolongado.