Atlético de Madrid / Cuatro días, cinco goles, un líder

El argentino salió tocado de Mallorca. Lo siguiente, cinco goles en dos derbis, correspondiendo a las palabras de Simeone: “Es nuestro mejor futbolista y hay que cuidarlo”.

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“Yo estaba tranquilo, las situaciones de gol las venía teniendo. Me preocuparía si no”, analizó Julián Alvarez tras el derbi que dinamitó con su doblete. El argentino se despertó el pasado domingo con solo un gol en la cuenta, el de Cornellà del primer partido, y ciertas dudas tras el penalti fallado en Mallorca, el cambio del segundo tiempo y que no daba con la tecla. Pero era el inicio de la semana fantástica, la de las cinco celebraciones de Spiderman en el Metropolitano: tres goles al Rayo y dos al Madrid. La vuelta al calcetín en apenas unos días.


No es casualidad que Simeone haya comentado en varias de las últimas conferencias de prensa que Julián “es el mejor jugador del equipo”, “un líder” y que “hay que cuidarlo para que esté muchos años acá”. El técnico hizo mucho para que el delantero (25 años) fichara por el Atlético. “Debe ser muy importante para la historia del club”, celebró este sábado el míster, que más allá de los goles valoró la “humildad” del jugador. Mucho de lo bueno que le vaya a pasar al Atleti pasa por él.

Ante el Madrid, Julián dejó a Sorloth batallando en el área para moverse por la segunda línea, dejando un 88,5% de acierto en el pase y tres ocasiones generadas. En el primer tiempo mandó un balón al poste y en el segundo su efectividad fue máxima, dos goles en dos remates a puerta, uno de penalti y otro de falta. “Me recuerda a Pantic”, dice el Cholo. Es el cuarto libre directo que el argentino ha marcado como rojiblancos, tras los del Sparta Praga, el Betis y el Espanyol. En estos últimos trece meses, solo Grimaldo (5) le supera entre los equipos de las grandes ligas. No solo eso, de su afinada bota salieron grandes centros y mucho peligro en el balón parado.

Decir que Julián es un crack es redundante, por más que ni apareciera entre los 30 candidatos al Balón de Oro. Contra el Mallorca se sintió desde fuera como su momento más bajo, en plena sequía y tras recuperarse de unas molestias en la rodilla que le dejaron sin pisar Anfield. Siete días después, Julián vuela y es el líder futbolístico de un equipo que se siente capaz de todo con su plan. La semana de derbis encendió a Julián, al Atleti y al Metropolitano. Y el martes, llega el Eintracht Frankfurt.

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