Mastantuono: ha nacido un ídolo
La ilusión en el madridismo y en Argentina se dispara tras su “energético” debut contra Osasuna. Xabi medita darle la titularidad en el Tartiere.
Su notable estreno contra Osasuna (1-0) el pasado martes fue sólo el inicio. Pero con electricidad. La del coliseo blanco al prorrumpir con una ovación (el “¡Franco, Franco...!” que rápidamente se volvió viral en redes) al ver que se dirigía al banquillo para ponerse la camiseta con el 30 y saltar al campo. Un dorsal que apunta alto en la tienda oficial del estadio.

Entre las expectativas desbordantes, la de hinchas de River Plate que acudieron con la camiseta de la Banda Sangre a ver el debut de su exjugador. “¿Presión? Viene de otro grande como River, se va a adaptar rápido, seguro”, comentó uno de ellos ante la cámara de AStv. “Le veo haciendo diez goles”. Los ojos dirigidos a Mastantuono aquí y allá, al otro lado del océano. En Argentina se siguió con atención y los medios se volcaron, con Olé calificando de “histórica” e “imborrable” la puesta de largo de la nueva joya de la albiceleste. Hasta comparativas con Zidane...

Apenas 28 minutos que le sirvieron para que su zurda le hiciera caer con el pie derecho entre su nueva hinchada. Que quiere más. No sólo ellos, también Xabi Alonso parece ansioso por saborear con más amplitud la calidad del chico. Antes de Osasuna apenas pudo tenerlo en cuatro entrenamientos grupales, pero tras lo visto contra los rojillos (“Franco ha agitado, ha aportado buena energía”) medita acelerar lo que parece inevitable y sería el entregarle la titularidad al 30 este mismo domingo en el Carlos Tartiere (21:30 horas). El plan inicial pasaba por esperar al menos a la visita del Mallorca a Concha Espina, el sábado 30 (21:30 horas). Pero la competencia por posición de extremo por banda derecha está mucho más que abierta...
Hay un agujero por el que colarse. Rodrygo ha sido eliminado de la ecuación y Brahim anduvo dubitativo y dejó pasar el tren. Mastantuono intervino en 28 acciones, por las 41 del malagueño, que jugó casi el doble de minutos... Caldo de cultivo para un sorpasso.
Acarició el gol... desde la tranquilidad
En el minuto 88 tuvo el debutante el golpe definitivo para haber podido precipitarlo. Una buena jugada con Gonzalo permitió sacar al ragentino un zurdazo escorado que le repelió Sergio Herrera. Un ‘¡Uyyy!’ que recorrió la espina dorsal de Chamartín.
