Identifican al sargento Quornelius Radford como el presunto autor del tiroteo en Fort Stewart
El ataque fue perpetrado por Radford, de 28 años, quien utilizó un arma personal y permanece bajo custodia. Las autoridades investigan cómo ingresó el arma a la base y el estado de las víctimas es estable
InfobaeLas autoridades militares identificaron a Quornelius Samentrio Radford, sargento de 28 años, como el presunto responsable del tiroteo que dejó cinco soldados heridos ayer en la base de Fort Stewart, en Georgia. El incidente ocurrió en la mañana del miércoles 6 de agosto en el área correspondiente al 2nd Armored Brigade Combat Team.
Lubas detalló que el tiroteo tuvo lugar en el puesto de trabajo de Radford y que las víctimas eran miembros de su misma unidad: “lo que sabemos es que el tiroteo ocurrió en el lugar de trabajo del soldado y se trató de una acción dirigida a sus compañeros. Aún no contamos con un motivo claro”, declaró el general ante medios locales.
El incidente se reportó a las 10:56 a.m., hora local, y el sospechoso fue detenido menos de una hora después. La respuesta de los militares presentes fue fundamental para evitar un saldo más alto de víctimas, según remarcó Lubas: “los soldados en el lugar actuaron sin vacilación para detener y someter al agresor hasta la llegada de las autoridades. Sin duda, gracias a su intervención, se evitaron fatalities adicionales”.
Las cinco víctimas permanecen internadas en hospitales de la zona y su condición es estable. Dos de los heridos fueron trasladados al Memorial Health University Medical Center de Savannah, a unos 65 kilómetros de la base. Según fuentes hospitalarias y del Ejército, todos los afectados se mantienen fuera de peligro.
Perfil del sospechoso
Radford es sargento especialista en logística automatizada, se unió al Ejército estadounidense en enero de 2018 y había estado asignado a Fort Stewart desde 2022. No registra antecedentes de despliegues de combate.

Las autoridades informaron que no contaba con reportes disciplinarios conocidos en su historial militar antes del incidente, aunque tras la investigación se descubrió que en mayo había sido arrestado localmente por conducir bajo los efectos del alcohol (DUI), circunstancia que no era conocida por su cadena de mando hasta ahora.
La principal incógnita en la investigación oficial es cómo Radford logró ingresar un arma de fuego personal a la base militar, donde su uso está estrictamente restringido.
Lubas explicó que el acceso a armas en estas instalaciones solo está permitido bajo reglamentos muy específicos y afirmó que “este aspecto particular será parte del proceso investigativo y buscaremos cómo se vulneraron los protocolos”.
Reacciones institucionales
El tiroteo provocó reacciones inmediatas en el ámbito político y militar. El gobernador de Georgia, Brian Kemp, utilizó sus redes sociales para enviar un mensaje de apoyo a las víctimas y sus familias. Por su parte, el secretario de Defensa, Pete Hegseth, calificó el ataque como “cobarde” y prometió “justicia rápida” para el responsable.
El presidente Donald Trump también se refirió al episodio y lo describió como “una atrocidad”. En declaraciones desde la Casa Blanca, el mandatario aseguró: “toda la nación está rezando por las víctimas y sus familias, y esperamos que se recuperen completamente. Vamos a cuidar muy bien de esta persona que hizo esto, es una persona horrible”. Trump remarcó que ya fue informado por la Casa Blanca sobre el avance de la investigación.
El caso está a cargo de la División de Investigación Criminal del Ejército, que continúa recogiendo pruebas y testimonios para esclarecer los hechos. Radford permanece bajo detención en la base, a la espera de una decisión formal de la Oficina del Fiscal Especial del Ejército en cuanto a los cargos que enfrentará.
Fort Stewart, ubicada en el condado de Liberty, Georgia, es una de las bases más grandes del sureste de los Estados Unidos.