F1 | GP de Hungría / La flor de Norris y la fe inquebrantable de Alonso
Victoria de Lando, que hace buena la estrategia a una parada contra Piastri. Fernando amarra el quinto tras un ‘stint’ de 40 vueltas. Sainz, 14º.
AsNorris hizo muchas cosas mal en el arranque del GP de Hungría, perdió posiciones en la salida y se descolgó de la cabeza de carrera porque ni siquiera era capaz de adelantar a Russell. Como se quedó fuera del plano principal, pudo cuadrar una estrategia a una parada que permitió eliminar a Leclerc y también encontró a Piastri con el pie cambiado. El inglés debió defenderse en las últimos cinco vueltas de la presión de su compañero de equipo, incluido un obús de Oscar en la curva uno que casi acaba en desastre, pero salvó los muebles, cruzó primero el banderazo a cuadros de Axl Rose y celebró victoria y recorte de puntos al líder en el día menos pensado. Los campeones no cometen tantos errores, pero necesitan algo de flor. Y Lando no es el perfecto aspirante a título, pero es el que hay. Habrá que apreciarle con sus defectos y sus virtudes. Piastri y Russell completaron el podio, Leclerc (4º) entró en crisis y Alonso (5º) firmó con la espalda tocada, pero la clase intacta, su mejor resultado de 2025.
La carrera de Fernando fue sencillamente ejemplar. En la salida ganó una plaza, la cuarta por el enésimo despiste de Lando en una primera vuelta. Russell adelantó al McLaren en la uno y Fernando trazó por fuera para cerrarle el paso por dentro en la dos. A partir de ahí, lo que amenazaba con ser una carrera en grupo y tren de DRS se convirtió sin embargo en una carrera de ritmos. Se empezaron a abrir enormes diferencias, y quienes apostaron por ir a dos paradas apenas obtuvieron beneficio. Alonso clavó un stint de ¡cuarenta vueltas! con el neumático medio extendiendo su renta sobre Bortoleto o Stroll, los coches que iban inmediatamente por detrás.
Montó el neumático duro a 30 vueltas del final y volvió a poner en marcha el reloj asturiano, que no suizo, para gestionar la goma hasta la bandera a cuadros. Por momentos pareció que Verstappen evitaría el segundo pit-stop, pero no fue así. Así que se aclaró el camino de Fernando hacia el quinto puesto en el GP de Hungría. No es un triunfo, no es un podio. Pero es una gesta sobre el mismo Aston Martin que hace una semana era el coche más lento de la parrilla. Una alegría para el equipo antes del parón de verano. Un respiro para todos.

La debacle tardía de Ferrari
Delante, sucedió lo que podía pasar: que la superioridad numérica de McLaren provocó el evitable error de Ferrari. Leclerc salvó la primera mitad de carrera con bastante ritmo sobre Piastri, su liderato parecía incuestionable. Pero Norris, que ni siquiera fue capaz de adelantar a Russell, alargó su primer stint para ahorrarse una parada cuando todos los de delante iban a dos, y le salió bien. No debía ser un problema tan grave para Charles, que simplemente tenía que asegurarse de llegar al final de la carrera no muy lejos de Lando y con una buena ventaja de neumáticos. Pero el muro de los italianos se tragó un amago de Piastri, adelantó la parada del monegasco y le dejaron diez segundos por detrás con apenas diez vueltas de diferencia en las gomas. Insuficientes para recortar tanto tiempo a un coche sensiblemente más rápido en aire limpio.
Piastri sí retrasó ese último pit-stop, cazó a Leclerc con mucho más ritmo y le pasó sin sudar. Pero el Ferrari estaba tocado, su ritmo era muy pobre, aparentemente por un problema de reglajes. Russell se echó encima muy rápido, y tras unos cuantos aspavientos logró pasarle en la curva dos. Protestó mucho la defensa de Charles por sus movimientos en frenada (que le costaron cinco segundos de sanción). Atrás, en el temido grupo de la zona media, Max fue noveno e investigado por sacar de la pista a Hamilton (12º), que cuajó un domingo tan gris como el resto del fin de semana y terminó doblado. Sainz (14º) se esforzó mucho por recuperar posiciones después de arrancar con la goma blanda, pero no era el sitio ni era el día. Incluso tuvo un toque que le costó diez segundos de penalización a Gasly.