Así se gestó el polvorín Donnarumma
El italiano fue descartado de la Supercopa de Europa y el club ya le ha comunicado que deberá buscarse una salida (suena el City). Chevalier será titular.
La ruptura es total entre club y jugador. El PSG ya advirtió a Donnarumma hace meses de que no estaba dispuesto a aceptar sus pretensiones salariales para firmar una renovación, que comprendían una mejora salarial principalmente. Luis Campos le ofreció un salario fijo cuyos aumentos estaban supeditados al rendimiento deportivo y a la disputa de un número determinados de encuentros, condición que fue rehusada de inmediato por el entorno del napolitano.
El PSG ha sido meridiano con su nueva política, en la que nadie está por encima de la institución y en la que cualquier jugador que no se adhiera a las condiciones que impone la entidad tiene abierta la puerta de salida. Ni la última Champions de Donnarumma, en la que su rendimiento fue excelso, siendo clave en cada eliminatoria de los octavos de final, ha sido suficiente como para disuadir a los dirigentes del Paris Saint-Germain de aceptar sus mejoras salariales, lo que ha abocado la situación a un divorcio total y a un punto de no retorno.
A ello hay que añadirle el fichaje de Lucas Chevalier. El ya exjugador del Lille, de 23 años, aterrizó la semana pasada en París por 55 millones de euros. Luis Enrique, además, le comunicó a Donnarumma que el francés será el cancerbero titular esta temporada, lo que precipitó todavía más el traspaso del italiano. El miércoles, Chevalier jugará la Supercopa y también saldrá de inicio, salvo sorpresa o viraje de última hora casi imposible, en el debut liguero en Nantes el próximo 17 de agosto.
Desde que llegó en 2023 a París, en Francia se barruntó que Luis Enrique nunca estuvo convencido del potencial de Donnarumma. De hecho, el año pasado, el PSG firmó a Safónov por 20 millones de euros, aunque el ruso, salvo un partido en Múnich en noviembre del año pasado de la liguilla de la Champions, nunca fue competencia real para el internacional italiano. Esta temporada, con una inversión mucho más importante, 55 millones de euros por Chevalier, y con la ruptura total de las negociaciones por su renovación, la salida de Gigio es un hecho antes del final de mercado.
El divorcio estriba en discrepancias económicas y en un tira y afloja en el que ninguna de las partes ha dado su brazo a torcer para avenirse a un acuerdo de prolongación de contrato. La Premier League parece, ahora mismo, el próximo destino de Donnarumma, que considera el fútbol inglés como el mejor del mundo y ya consiguió en París lo más difícil, ganar una Copa de Europa. Chelsea y Manchester United han manifestado tibios coqueteos con el portero. Ahora ha surgido con fuerza el Manchester City, cuyas negociaciones, en fase embrionaria, podrían acelerarse en los próximos días. El conjunto de Guardiola valora positivamente al italiano y el interés del Galatasaray en Ederson facilitaría las cosas. El PSG pondría un precio cómodo de pagar al City.
