Alemania y Noruega financiarán sistemas Patriot para Ucrania si Trump autoriza el envío
Zelensky reveló en la Conferencia sobre la Reconstrucción de Ucrania que busca reunir apoyo europeo para cubrir el costo de los misiles
Además, informó que ha solicitado al presidente estadounidense, Donald Trump, la entrega de un total de diez sistemas Patriot más su munición compatible, necesarios para proteger las infraestructuras críticas ucranianas de los misiles rusos.
Donald Trump ha manifestado esta semana su disposición a enviar armamento defensivo a Ucrania y afirmó que trabaja en identificar sistemas Patriot disponibles para su entrega, aunque hasta ahora no ha aprobado ningún nuevo paquete de ayuda militar tras asumir el cargo.
Dentro de ese marco europeo, el canciller alemán Friedrich Merz ofreció este jueves una declaración significativa. Merz anunció desde Roma que Alemania “está preparada para comprar sistemas Patriot en Estados Unidos y ponerlos a disposición de Ucrania”. Subrayó que “los estadounidenses necesitan algunos, pero también tienen muchos”, y que Berlín ha solicitado al presidente Trump facilitar la operación.

Esa postura va acompañada de conversaciones formales entre Alemania y Estados Unidos. Según Reuters, Berlín está en “diálogos intensivos” para adquirir los sistemas y redirigirlos a Kiev, lo que permitiría suplir la paralización de parte de los envíos estadounidenses, incluidos misiles Patriot.
El Patriot es uno de los dispositivos antimisiles más avanzados del mundo. Incluye radar, centro de comando y lanzadores capaces de interceptar objetivos a gran altitud y una distancia de hasta 160 km. Estos sistemas resultan esenciales para blindar ciudades y zonas estratégicas ucranianas, muy expuestas a los recientes ataques rusos.
La IV Conferencia sobre la Reconstrucción acumuló compromisos financieros superiores a los 10.000 millones de euros, mientras Rusia intensifica su ofensiva con drones y misiles. Zelensky calificó estos ataques de “terrorismo puro” y urgió la urgente llegada de Patriot para reforzar la defensa antiaérea.
La propuesta de Zelensky de comprar directamente el armamento —en lugar de recibirlo en calidad de ayuda— revela dos tendencias claves: la estrechez del respaldo financiero occidental y el carácter transaccional que asume el apoyo militar, especialmente bajo la administración Trump, que condiciona nuevos envíos a contribuciones europeas.

El compromiso de Alemania supone también una maniobra política: busca asegurar defensas cruciales sin depender exclusivamente del Congreso de EEUU, controlado por republicanos reticentes. La fórmula de adquirir en EEUU para transferir a Ucrania evitaría nuevos paquetes legislativos.
El contexto estratégico es complejo. Desde 2022, Estados Unidos ha enviado ya tres sistemas Patriot a Ucrania bajo la administración Biden, y Alemania entregó otros tres. Se constituyó una coalición europea con al menos una batería adicional. No obstante, la actual agresividad rusa exige más cobertura, y la capacidad industrial occidental no alcanza el ritmo necesario.
La próxima cumbre de la OTAN, prevista en Washington, será decisiva para definir si la iniciativa germano-europea para financiar y adquirir Patriot cobra impulso. Mientras tanto, Zelensky mantiene su estrategia clara: emplear redes diplomáticas para asegurar los sistemas imprescindibles para la supervivencia de su país.