El dispositivo que generó un “caos” durante el GP de Bahréin de F1: cómo afectó a los equipos y a la transmisión de TV
Un elemento clave para medir el tiempo y la posición de los monoplazas generó conflicto en la carrera. Los problemas de George Russell, Ferrari y McLaren con el DRS
¿Qué falló? La conexión entre la torre de cronometraje principal comenzó a tener fallas con el transpondedor del monoplaza W16 de Russell. Este es un dispositivo instalado en el auto que recibe y transmite señales de radio. Dicho elemento sirve para medir la posición en pista de los pilotos, los tiempos que están marcando y la comparación con el resto de los corredores.
¿Cómo funciona? Envía los datos recopilados en pista cuando la pieza pasa por ciertos puntos de control en el trazado que están capacitados para registrar las frecuencias individuales de cada transpondedor, y esta información se envía a varios lugares, uno de los cuales es el tablero de cronometraje para la transmisión a través del centro de TV.

“Un sistema de cronometraje oficial funciona en paralelo al sistema que se utiliza para la transmisión televisiva, y también se dispone de varias copias de seguridad. Por ejemplo, se pueden utilizar infrarrojos para seguir la posición de los coches, o incluso cámaras de video si todo lo demás falla”, argumentó el sitio especializado Motorsport.
El principal afectado, además de los espectadores que estuvieron varias vueltas sin saber la posición exacta de los pilotos, fue Russell. “Fue una carrera realmente complicada. Tuvimos todo tipo de problemas en las últimas 12 vueltas. Tuvimos un fallo en los frenos, así que cuando pisaba el freno, ¡se iba al fondo! Tuve que hacer algunos reajustes, luego volvió a mí. Luego falló otra vez. Durante 10 vueltas seguidas, entrando en cada curva, no sabía si mi freno era firme o se iba al fondo”, explicó el británico en diálogo con Sky Sports F1.
Sin embargo, la falla técnica que estuvo al borde de repercutir en una penalización por parte de los comisarios de pista estuvo relacionada con el DRS. “Estábamos teniendo todo tipo de fallos e hicimos una anulación en el DRS. En una vuelta pulsé el botón de radio y el DRS se abrió, así que enseguida lo volví a cerrar, levanté y no gané nada. Perdí más de lo que gané. Solo se abrió durante una fracción de segundo, lo que demuestra la cantidad de problemas que estábamos teniendo”, argumentó.
Por esa apertura del DRS en la recta entre las curvas 10 y 11, Russell fue investigado por la FIA una vez completadas las 57 vueltas y, en caso de recibir una sanción, podría haber perdido su segundo lugar en el podio. Sin embargo, la FIA decidió omitir el problema alegando que se debió a una falla que no fue premeditada.
“La conexión entre el sistema automatizado de activación del DRS y el coche falló debido a problemas con un bucle de tiempo proporcionado por un tercero. Por lo tanto, la FIA autorizó la activación manual del DRS de acuerdo con el artículo 22.1 h). En ese momento, el piloto estaba experimentando un problema con el sistema brake-by-wire y otros problemas electrónicos. En la recta entre las curvas 10 y 11 intentó llamar por radio al equipo utilizando este botón, pero accidentalmente activó el DRS. El DRS se activó en una distancia de 37 metros en una recta de aproximadamente 700 metros. Aunque ganó 0,02 segundos, perdió 0,28 segundos en la siguiente curva para compensar. Así lo confirmó la telemetría”, comentó la organización en un comunicado oficial.
Russell no fue el único que tuvo problemas con el DRS, ya que el dispositivo en la Ferrari de Leclerc se abrió automáticamente en medio de una curva. Por su parte, el McLaren de Lando Norris también se vio afectado por los fallos técnicos. “Solo podemos usar el DRS cuando estamos 100% seguros de estar dentro de él”, le dijo Will Joseph, ingeniero de carrera del inglés, en la parte final del GP de Bahréin.