La alarma por Mbappé es real
El francés, con un golpe en el tobillo, realizó parte de la última sesión en solitario. Su presencia ante el Atleti, en interrogantes. Todo supeditado a sus sensaciones matinales.
Lo que parecía, en un principio, una potencial maniobra de mantenimiento, se convierte en potencial inconveniente. El club transmitía tranquilidad en un inicio, pero el mensaje ha perdido optimismo con el transcurso de la sesión. “Si se siente fuerte, estará”, trasladan internamente. Y ello deja abierta una incógnita. Que se despejará con la prueba que el jugador pasará en Valdebebas mañana. De ese examen y de la sesión de activación de Kylian horas antes del encuentro depender su participación. Hará todo lo posible por apagar esa alarma.
Eso es el qué. Pero la siguiente cuestión es el cuándo. Hay que rebobinar el duelo ante el Rayo y parar en el minuto 21. Un lance con Aridane. Ahí se producía el golpe y se quejaba el francés. Pudo continuar. Y de qué manera. Porque de esa bota nació el 1-0. Tras un pase de Vinicius, quebró a Lejeune y mandó a la red el primero de la noche. Después su actuación perdió decibelios y Ancelotti le sustituyó en el 78′. Una decisión que parecía responder a mero descanso con un ojo en el Euroderbi. Una decisión que ahora gana preponderancia. De momento, Kylian permanece concentrado, junto al resto de sus compañeros, en Valdebebas. La lista, mañana al mediodía, disipará la duda.