El centrocampista italiano, leyenda de la Roma,
admite que el equipo blanco es el único club por el que habría dejado la
entidad giallorossa durante su carrera.
"
El Real Madrid era el único otro equipo al que me habría ido a jugar.
Pienso que es el único equipo que podría haber sido. Una experiencia en
un país diferente podría haber sido bonito para todos. Para mi familia.
Para mí...", reconoce Totti en el diario británico, en una entrevista
con motivo de la publicación de su biografía traducida al inglés
tres años después de ver la luz en Italia. "Pero
desde luego, mirando atrás, pensando en el hecho de decir no al Real Madrid, permanecen algunas dudas".
Esas dudas se plantearon en el verano de 2006, con un Totti en plena
madurez deportiva. A punto de cumplir 30 años y recién conquistada la
Copa del Mundo con Italia, que convertía a la Azzurra en
tetracampeona. "Por supuesto que pensé en ello. Digamos que hubo unos
cuantos días en los que teníamos un pie dentro y otro fuera. Entonces, y
lo he dicho con frecuencia y honestamente, que la elección de quedarme en la Roma la tomé con el corazón. En esos momentos, cuando los sientes así, no te puedes ir".
Y es que el vínculo de Totti con la Roma llega hasta tal extremo que da más valor al Scudetto conquistado con los giallorossi en 2001 que al Mundial. "Obviamente la
Copa del Mundo es la cúspide de cualquier carrera, pero eso es más para
quienes ganan títulos cada año que para aquellos que casi nunca ganan.
Para nosotros, lo mejor es el Scudetto, y mi mayor espina es no haber ganado al menos un segundo", lamenta.
Además de ese título de la Serie A en 2001, Totti conquistó con la
Roma dos Copas de Italia y dos Supercopas; y fue, con 26 goles, capocannoniere de la liga italiana en la 2006-07.